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jueves, junio 29, 2023

Elena Annibali / De "El viaje"




prueba del alce llaman a un test de seguridad en el que
vehículos maniobran en un zigzag furioso emulando
situaciones peligrosas: aparición
de animales grandes o pequeños
en ruta, osos fantasmales,
ciertos pájaros de ojos luminiscentes,
espíritus
de los caminos, árboles
que caen por rayos

en el movimiento, los autos, sobre todo
aquellos de gran porte, deben mantener
el equilibrio de, al menos,
dos ruedas: si el conductor
es inhábil o el alce se
espanta y sale corriendo
hacia el auto,
todos mueren
si el alce se queda quieto, pero
el conductor enloquece, viendo
en sus ojos algo que no ha 
visto nadie, salvo
el espíritu de las carreteras,
todos mueren

si el conductor, en cambio,
atropella al alce, y el alce
muere, su espíritu
entra en el cuerpo del conductor
para, definitivamente,
hacer derrapar al vehículo
en un vuelo insólito
inacabable, en el que
el tiempo se retuerce
sobre el tiempo y
todos mueren

Elena Annibali (Oncativo, Argentina, 1978)

El viaje
,
Salta el Pez Ediciones,
Buenos Aires, 2022









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Foto: Elena Annibali/Facebook

domingo, febrero 13, 2022

Elena Annibali / De "La casa de la niebla"



II

plantamos un árbol en la casa de la niebla
se doraban al sol los girasoles
moría otro día
otra noche
el árbol creció, arraigó
en la penumbra
modelaba con hueso su estatura
cada pájaro que probó los frutos
caía en somnolencia
en ausencia de vida
en la radical ceguera de los muertos

Elena Anníbali (Oncativo, Argentina, 1978), La casa de la niebla, Ediciones del Dock, 2015

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Foto: Elena Annibali/Facebook

jueves, enero 09, 2020

Elena Anníbali / De "Curva de remanso"















haber abandonado qué?
haber conseguido qué?
la belleza la costumbre el trapo

yo esperé largo pero no vino
nadie a verme en mi silencio yo esperé pero
no vino nadie a verme en toda muerte

estuve ausente yo o todos los que amé estuvieron
                                                               ausentes
o estuve ciega yo y no vi nada más que el
                          mendrugo en la mesa el hijo
en la cama, helado, el hombre a mi lado frío, el
                                                 ladrillo de mi casa
cayéndose, quebrado, el perro que guardé rabioso

estuve ausente yo o el infierno estuvo               
en el ojo que vio caer la tarde, porque el infierno
                                                                   no está
arriba o abajo, sino a nivel de las cosas
                                                            elementales
grano negro abierto en la lluvia o sapo, o entero
cadáver desmigajándose por el verano, como una
                                                      hogaza yéndose
hacia lo invisible

estuve como ausente yo o me llené de ceguera y no pude
ver cómo de a poquito se fue el padre y los amigos,
                                                      el verano altísimo
y duro en que perdí todo lo que había para perder y
                                                       me llené la boca
de esta arena caliente en que hube de construir
                                                   todo lo ido, lo seco
lo difícil

vine y no estuve, o nadie
estuvo, o desaparecimos de a poco, borrándonos
como se borra el campo en la mansa precipitación
de la noche

Elena Anníbali (Oncativo, Argentina, 1978), Curva de remanso, Caballo Negro, Córdoba, Argentina, 2017

Elena Anníbali/Facebook - Premios Nacionales Caballo Negro - Del Dock - El Desaguadero - Op. Cit. - Punto en LíneaLa Voz - Otra Iglesia Es Imposible
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Foto: Elena Anníbali/Facebook      

martes, diciembre 01, 2015

Elena Anníbali / Algunos mueren como los conejos
















I

algunos mueren como los conejos
mirando la luz
de su propio exterminio

no esperan tomando la sopa fría
su pastilla del corazón
oliendo la propia
sostenida
corrupción de la carne

amanece y alguien entra
al cuarto oscuro, el televisor
alumbra los ojos vacíos
como los de la muñeca
en el estante

afuera
el árbol se mueve un poco
y más atrás los autos

después
la vida de siempre
como siempre

Elena Anníbali (Oncativo, Argentina, 1978)

La casa de la niebla,
Ediciones del Dock,
Buenos Aires, 2015









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Foto: FILBA