Si fuese la judía
abriría las puertas de la ciudad
de un soplo
Soportaría la injuria del cautiverio
Viuda y virgen sería a la vez
Devoradora de ejércitos
Y le bastaría ser hombre
para caminar erguida sobre sus muertos
Pero a la judía le bastó ser mujer
para beber en exceso
para comer en exceso
y pasear por los sueños desnudos
de los asirios
Inventiva solitaria
Amamantadora universal
Razón del tiempo y de la historia
Si fuese la judía
levantaría con su belleza
los templos caídos de la Tierra
cortaría la cabeza de Holofernes
para saltar a la luz
desde su cueva
Pero es Judith la que espera
por el espejo encorvado de su destino
Nuestra Judith aún no está bendita
y envejece a la par
de los cortejos de Eleofonte
el tejedor de cantos opacos
como el aura
de su propio culo reseco
Damsi Figueroa (Talcahuano, Chile, 1976), Judith y Eleofonte, Editorial Letra Nueva, Concepción, 1994
Club de Traductores Literarios de Buenos Aires - Descontexto - Valija Cultural
Foto: Damsi Figueroa, Valdivia, Chile, 2017 by Otra Iglesia Es Imposible