Ayer se reunió el grupo Wirtschaftsfaktor Alter (factor económico edad, edad mayor, se entiende), impulsado por el Deutsches Institut für Wirtschaftsforschung
Les cuento cortito algo de lo más comentado: un tercio de cada euro que se paga en el mercado alemán, corresponde a pagos de una persona mayor de 60 años. El 2025, este % subirá a más del 40%, se predice.
Ayer, escuchaba a un amigo ingeniero comercial hablar acerca de la crisis económico y de las pocibilidades de superarla en los EEUU y en Europa, concretamente en Alemania. Sostenía que, aunque la población originaria en el país de Norteamérica disminuyera, afortunadamente tenían a los latinos que se reproducían, que tenían hijos, con todo lo positivo y necesario que esto significa para el mercado.
En cambio, continuaba, en Alemania, los inmigrantes, que vienen del Este, a lo sumo, tienen un hijo. Lo que no es nada y no contribuye a mejorar las condiciones económicas.
Hace algunos años, un estudio del... si mal no recuerdo era del Dresdner Bank (o del Deutsche Bank? no me acuerdo bien, pero de uno de estos bancos importantes y con una buena sección de estudios), concluía que perdíamos -en aquel entonces- 2% de crecimiento anual debido a nuestra baja tasa de natalidad.
Pero no hay que desesperarse, hay caminos a seguir. Pensando en ellos, el mismo Deutsche Bank recomienda, ya desde hace tiempo, invertir en medicina... Sí. Porque la tercera edad necesita, obviamente mayores cuidados médicos. Por eso, sin ir más lejos, a comienzos de la semana, la Asociación de médicos (Montgomery y Cía.) se quejaba de que "tenemos cada vez más médicos, pero la cobertura médica es cada día más escasa". Por varias razones, de las que, la más importante es el envejecimiento de la población.
Uno de los caminos que ha seguido la industria alemana ya desde hace tiempo -la empresa, en general- es invertir en productos para la tercera edad. Y no me refiero únicamente a los pañales para mayores o las lupas con luz o similares. Hablo, por ej., a productos tan sencillos, como estos de la foto (la foto es mía, de 8 de este mes, en Würzburg, no se puede copiar, salvo link a este blog y mención expresa de mi autoría).
O de otros, aún más sencillos y que sirvan no sólo a la tercera edad, sino a todos. Tales como collares y pulseras con broches fáciles de cerrar. Ya que, según dijo ayer (psicóloga, profesora universitaria, aquí un título muy importante) Ursula Lehr, estos nuevos productos, no sólo sirven a los mayores, sino a todos.
Y ponía en ejemplo de esos buses que se inclinan y bajan una rampa, que sirven a los ancianos (que no pueden levantar los pies) y también a los papás y mamás con cochecitos para niños (como asimismo, digo yo, a quienes usan silla de ruedas).
Miren por favor aquí el Age Explorer, concebido para explorar cómo se siente físicamente una persona mayor y así, explorar el mercado. En esta otra foto (sorry, se me olvidó poner el link), una persona más joven, con el traje, compra, con el traje, para saber lo que piensa, siente y cómo se mueve una persona en la tercera edad que es a quienes quieren vender, me refiero a venderle... llegar con sus productos. Me parece muy interesante...