Anoche antes de empezar el programa, nos enteramos con tristeza del deceso del gran Alejandro Urdapilleta, uno de los mejores actores argentinos. El programa de anoche (de una duración inusual) estuvo dedicado a él.
Durante los años 80 asistí deslumbrado a las tertulias literarias que realizaban Batato Barea, Humberto Tortonese y Alejandro Urdapilleta. Iba todos los sábados. Y no podía parar de reir, a pesar de tantas veces que los vi. Fueron algunos de los momentos más felices que viví, presenciando espectáculos. de una ferocidad y una felicidad irrepetibles. Ahí aprendí a considerar a los actores cómicos como seres benditos.
Después Urdapilleta tuvo tiempo para mostrar su extraordinario talento como actor dramático. Participó de grandes puestas en teatros de repertorio clásico. Propongo recordar su maravillosa actuación como hermano de Mercedes Morán en La niña santa, de Lucrecia Martel. Todo lo contrario a su desborde dionisíaco del Parakultural, la actuación de Urdapilleta en esa película es un prodigio de sutileza y mesura.
Aquí pueden escuchar el fragmento de nuestro programa de ayer donde recordamos e hicimos la dedicatoria al grande Alejandro. Clickear acá.