Las Amistades Peligrosas

Queridas zinéfilas,estimados lector@s,esta entrada viene tarde pero viene.

Spephen Fears dirigió "Las amistades peligrosas" en 1988.E l argumento está basado en la novela epistolar de Laclos.

Este drama de época ambientado en el siglo XVIII, nos cuenta la historia de  la Marquesa de Merteuil (Glenn Close),la cual planea una venganza contra un amante que la ha abandonado para casarse con la virginal e ingenua Cécile de Volanges (Uma Thurman), la hija de su prima Madame de Volanges (Swoosie Kurtz) .

Para llevar a cabo sus malévolos planes cuenta con un amigo tan amoral como ella, el Vizconde de Valmont (John Malkovich),el cual accede a ayudarla y además se propone otro reto aún más difícil todavía:conquistar a una mujer casada y religiosa,Madame de Tourvel (Michelle Pfeiffer), a fin de hacer honor a su legítima reputación de seductor.

La Marquesa de Merteuil ofrecerá a Valmont una tentadora recompensa íntimamente ligada a la lujuria y la pasión, si consigue todos sus propósitos,siempre que acredite cada logro con una prueba escrita.

La tía de Valmont, la anciana Madame de Rosmonde (Mildred Natwick), lo invita a su casa de verano, donde coincide con Madame de Tourvel y con Cécile de Volanges.
Valmont desplegará todas sus armas de Casanova para conquistar a ambas mujeres,pero este cazador no controla todos los factores en juego y en esas lindes,él mismo terminará siendo presa de  sus propias pasiones.
De Tourvel se enamora de Valmont, y él reconoce ante la marquesa de Merteuil que siente algo especial por ella, lo que despierta los celos de ésta.

Pero....¿por qué nos gusta tantísimo "las Amistades Peligrosas?' creo que entre otras cosas porque en este clásico de intrigas palaciegas nos hablan de amor,de desamor,de venganza,odio,celos,ambición.....todo un despliegue de pasiones tan mundanas como humanas que tiene lugar de manera siempre solapada,bajo las exquisitas formas de la clase alta acostumbrada a vivir con todo tipo de lujos y ostentación,cuidando las formas y las apariencias más que la virtud o la intachable moral de la que presumen en sociedad.

Glenn Close,está tan grandiosa,que sólo por ella merece la pena volver a ver esta película una y mil veces.Su personaje de  la Marquesa de Merteuil es una mujer que sabe de todas las desventajas de ser mujer en esa época,pero ha sabido sacarle el máximo partido a su género y a su situación,entregándose a los placeres y manteniendo aparentemente su independencia intacta.


"....si quiero a un hombre lo consigo y si él quiere contarlo se da cuenta de que no puede"

"....tratándose de matrimonio,lo mismo da un hombre que otro,el menos complaciente da menos problemas que una madre"

". ...mientras  tomes unas cuantas elementales precauciones podrás hacerlo o no con tantos hombres como desees,siempre que quieras y de la forma que quieras ..nuestro sexo disfruta de tan pocas ventajas,que más vale que aproveches las que tiene"
(Marquesa de Merteuil)

Y digo aparentemente, porque si hay una máxima que podríamos deducir de estas " amistades peligrosas", es que somos víctimas de nuestras emociones,y ésas,no atienden a razones.

Glenn Close da una clase magistral de interpretación y a veces sin tener que recurrir a la palabra. Enumero 4 escenas que me parecen impactantes simplemente a nivel visual :

- La escena con la que comienza la película.........ella espera sentada frente a un tocador,la bata le cae por uno de los hombros, y está como abandonada a sus pensamientos .....la servidumbre irrumpe y comienza a prepararle un baño y se inicia el ritual de vestirse y acicalarse........

- La escena en la que se mira al espejo.......(.¿a qué otras escenas de otras películas os recuerda?)

- El abucheo en la ópera... su cara es un registro de emociones tan diversas como inequívocas e intensas:decepción,humillación,vergüenza,indefensión...........después,lentamente,amargamente, de nuevo frente al espejo,se desmaquilla.....y en ese acto,se desprende también del orgullo y la soberbia.....

- ......Y como no,la rabia,la escena de la rabia, en la que lo tira todo,y se mancha de talco y se desploma de rodillas en el suelo,echando a gritos a la servidumbre........está tan grandiosa,que ella misma pienso que sería consciente al verse de que estaba ante el papel cumbre de su vida.


Pero Close no es la única actriz en estado de gracia,John Malkovich está majestuoso.

Sus "ataques" conquistadores me parecen las de ave rapaz,otea de lejos el objetivo con esa mirada implacable y se aproxima sin contemplaciones para arremeter contra su presa y devorarla ,primero con palabras,después,llegado el momentos con sus artes amatorias.

Su personaje,Valmont no muestra un ápice de escrúpulos,es soberbio,sagaz,hábil,mentiroso,cruel y despiadado.Se ha convertido en un experto de la seducción,desde la primera cita a la última,es pertinaz y locuaz,se ha adiestrado en el arte de la oratoria,de la mirada,del juego erótico y del placer.
Todo requiere práctica y actitud,y a él,de ambas cosas,le sobra.

"¿ por qué será siempre que nos sentimos obligados a perseguir a aquellas que huyen de nosotros?" 

"ella ha aceptado mi amor y yo he aceptado su amistad,los dos sabemos qué poca diferencia hay entro lo uno y lo otro."

"la odio,la amo....."

(en la cama,besando a una mujer.....bajando por el cuerpo de ella.......) 
"...........y ahora,creo que deberíamos empezar por uno o  dos términos latinos....."

La película es extraordinaria. Hay tantas frases que rescataría,tantas escenas,tantas miradas.....las pasiones humanas no caducan, en realidad,qué poco cambian las cosas con el paso del tiempo.
Salvando las distancias,todos los perfiles psicológicos están vigentes y las aves rapaces tal cual los documentales de la 2,acechan,otean y atacan.Los cazador@s de conquistas tal cual Valmont,corren el riesgo  algún día  de ser cazados,o no,pero si les ocurre,en realidad serán afortunados,incluso teniendo en cuenta eso de que "el pesar es componente esencial de la felicidad"
Si algo queda claro en es esta historia de intrigas,triunfos y fracasos es que,aunque en el amor no siempre son más felices quienes más lo merecen, entre vanidad y felicidad existe una evidente incompatibilidad y que para ganar en este terreno paradójicamente,es preciso sucumbir.



Troyana