"En esa época Michael no podía saberlo [...] pero estaba de acuerdo con los franceses cuando dicen que solo te conviertes en un adulto tras la pérdida de tus padres"
"Ayer, en lo alto de la escalera vi a un hombre que no estaba allí, tampoco estaba allí hoy, ¡ojalá! ¡ojalá se haya marchado!
Introducción al libro, cita de William Hughes Mearns
Michael, un joven escritor que recientemente ha perdido a su mujer se muda a Londres para intentar rehacer su vida y dejar los fantasmas del pasado atrás a la vez que hae un esfuerzo por recomponerse mediante la escritura. La llegada a Londres desde un pueblecito galés es fría, a pesar del tumulto y el gentío, Michael vive abrumado por el recuerdo de su esposa Caroline, llena su tiempo en una clase de esgrima hasta que su situación parece dar un giro para bien.
Conoce a Josh, un joven americano extrovertido y su sofisticada esposa Sam, pronto traban amistad y Michael llega a introducirse y a sentirse valorado por su obra en el círculo intelectual que los rodea.
Algo tan simple como la necesidad de recuperar un destornillador que Michael le prestó a Josh para arreglar sus gafas es el detonante de una serie de tragedias imprevistas.
Michael encuentra la puerta de Josh y Sam abierta y decide entrar para recuperar la herramienta. Su mente le jugará una mala pasada, creerá identificar en la casa la presencia de su esposa, Caroline. Desde hace algún tiempo Michael viene recibiendo cartas de una persona que firma como Daniel, cartas que contienen la confesión y los detalles de la muerte de Caroline. Un desafortunado incidente mientras Michael deambula por la casa acaba con la vida de una de las hijas de Josh. Michael huye sin prestar auxilio creyendo tener una coartada perfecta. Lo que Michael no sabe es que Josh también tiene algo que ocultar ni que la revelación de su secreto puede dar un giro vertiginoso a la vida de los dos hombres.
Una novela con tintes de thriller en el que el sentimiento de culpa es el gran protagonista, culpa o como deshacerse de la presión que esta ejerce sobre el pecho, tres hombres interrelacionados que ponen en tela de juicio sus valores morales y su ética para salvaguardarse, cada uno por sus razones. Es especialmente interesante el modo en el que cada uno actúa y las razones que los llevan a reaccionar de la manera en que lo hacen. La historia está salpicada de infidelidades, de falsas apariencias, de pactos tácitos que pugnan por cubrir las grietas con un silencio hermético para que las fichas del juego no se muevan, para que los dados no tienten a la suerte, una novela ligera, entretenida y con el ritmo idóneo para disfrutar en un vilo in crescendo hacia un final que no infiere la mínima dosis de justicia poética.
