"Dell se sorprendía de las capas de infierno que se le iban revelando, día tras día"
Más que un diablo de Polvo, la novela de Roger Smith es un simún en toda regla que arrasa con todo a su paso y deja el paisaje enterrado en la arena. Nos encontramos ante una novela de acción, trepidante, adictiva en la que no cabe mucho tiempo para pensar. Los acontecimientos se suceden en una cadena cuyos eslabones son un gran número de episodios cortos, directos en los que somos testigos de la vida de los cuatro protagonistas principales, al principio en capítulos independientes para luego ir entrelazándose hasta un final coral.
El libro retrata a la perfección la realidad del África del apartheid y las consecuencias sociales de este. Asistimos a la vida de las zonas marginales de las grandes urbes sudafricanas, carcomidas por la corrupción, la pobreza, la suciedad y el VIH en contraste con la vida de los Boers acaudalados- término que aparece frecuentemente en tono despectivo así como referencias en el mismo tono a su idioma-el afrikaans.
Los personajes principales son Dell, que disfruta de una vida cómoda sin problemas, casado, con dos hijos y totalmente opuesto a los ideales del apartheid en el que su padre Goodbread, un norteamericano de Tejas participó activamente, Inja, apodado el perro, un asesino a sueldo corrupto cuya mafia actúa en la ciudad de Durban, que no conoce escrúpulos a la hora de matar y que en breve tomará como esposa a Sunday, una joven zulú que trabaja en un resort turístico mostrando el modo de vida de este pueblo a los turistas y con quien Inja pretende casarse por recomendación de un guía espiritual para curarse, según el rito, del sida y Zondi, que sospecha ser el padre de Sunday e intenta protegerla.
La historia comienza cuando Inja asesina a sangre fría a un Boer que mantiene una relación con la esposa de Dell. Ella logra escapar e Inja decide acabar con su vida provocando un accidente de tráfico en el que mueren ella y sus dos hijos y del que Dell sale ileso. Goodbread decide ayudarlo a escapar de Inja y más tarde a vengarse de él. A esta trama principal se unen las de los demás personajes conformando así el conjunto de la historia.
Es sin duda un libro entretenido, adictivo, la acción es frenética y trepidante, sobre todo en los primeros capítulos, ya que el ritmo va decayendo. El estilo es salvaje y brutal, los asesinatos son descritos con mucha crudeza, a veces siguiendo la prémisa "demasiado nunca es suficiente" y presenta todos los elementos de un relato de acción incluyendo una parte que haría una muy digna road-movie. Por ello, no podemos esperar personajes redondos o introspecciones profundas, no las hay aunque sí encontraremos un buen testimonio de la situación que se vive en Sudáfrica, país que tenía hasta hace poco el porcentaje de asesinato más alto del mundo y donde la corrupción política y el más básico instinto de supervivencia están a la orden del día.
Roger Smith nacido en Johannesburgo y residente en Ciudad del Cabo
nos propone una novela de acción en la que descubriremos la realidad social de Sudáfrica.