El pasaje, Justin Cronin, Umbriel
1084 páginas son demasiadas.
Un virus que se extiende convirtiendo a los seres humanos en monstruos.
Una niña que parece ser la última esperanza de la humanidad.
Diversos personajes que intentarán sobrevivir en un mundo cada vez más hostil.
Una historia que se extiende durante cientos de años.
El pasaje es una buena novela de fantasía y terror con sus pinceladas de ciencia ficción. Con un estilo sencillo y llano, consigue crear momentos de gran tensión, pasajes angustiosos y crear un mundo post apocalíptico interesante y asfixiante. Llena sus páginas de personajes efectivos, aunque algo funcionales, que sirven como marco y vehículo de la gran protagonista de la novela, Amy.
Resulta muy interesante la apuesta del autor por una estructura en grandes saltos temporales. Una primera en el presente. La segunda, cien años después y luego, mil. Esto tanto desubica como consigue que el lector se haga más suya la tragedia y el apocalipsis al ver los efectos a largo plazo tanto en los humanos como en el paisaje (esas búsquedas entre ruinas de la segunda parte). La historia funciona, los personajes funcionan y los monstruos funcionan. Pero...
... ¿de verdad eran necesarias 1084 páginas? Porque resulta exagerado. Creo que esta novela hubiera mejorado mucho con trescientas o cuatrocientas páginas menos. El autor cae en algunos momentos en largos vacíos narrativos que no llevan a ninguna parte, a repeticiones de la historia de los personajes que no aportan información nueva, a llenar páginas y páginas de nada absoluta o información no relevante. Eso ocasiona que, a pesar de lo interesante de la historia, la novela se haga cuesta arriba y el interés se pierda.
¿Qué interés narrativo tiene, por ejemplo, explicar toda la historia de amor del personaje de Brad Wolgast, la primera cita, el matrimonio, etc. cuando lo importante ya se ha narrado antes? Si el lector ya sabe de su matrimonio fracasado, de la muerte de su hija, de su incapacidad para volver a conectar, ¿por qué poco después aparecen treinta páginas explicando algo que ya sabemos, que el autor ya ha explicado y mucho mejor? Narrativamente no le encuentro el sentido más allá de llenar páginas por llenar. Igual ocurre con el principio de la segunda parte... páginas llenas de detalles e información que no lleva a ninguna parte.
Y, claro, esto en un momento lector en el que se me hace cuesta arriba cualquier libro que tenga más de cuatrocientas páginas, pesa. Pero no quiero dar la impresión de que es una mala novela o una novela fallida. No, como novela de aventuras con pinceladas de terror funciona muy bien. Y la coña de unos vampiros fluorescentes es graciosa. El pasaje es una propuesta interesante de novela post apocaliptica y con suficientes momentos de interés como para justificar su lectura. Eso sí, mucho menos le hubiera venido de perlas.
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"Fiebre oscura" de Karie Marie Moning
Fiebre oscura, Karen Marie Moning, Ediciones B
Primer volumen de, por el momento, siete.
(Si no me equivoco, este primer volumen está descatalogado. Se puede conseguir alguno en segunda mano con esta portada o en una edición coleccionable de RBA de horrible portada).
Lo he comentado más de una vez, tengo debilidad por el género de fantasía urbana. No leo mucho ni estoy muy al tanto de novedades o autores, pero cuando me cae una novela de estas en las manos, tiene que ser muy mal novela para que no lo pase bien con ella.
Soy consciente de que casi siempre se basan en variaciones de la misma historia: chica deslenguada y divertida que se ve metida en problema de índole paranormal donde contará con la ayuda de atractivo y misterioso tipo con el que tendrá una relación llena de discusiones e inexplicable atracción. Explican una y otra vez lo mismo (quita unos vampiros, pon demonios, quita demonios y pon cambiaformas o mezclalos todos que es más divertido), pero este subgénero tiene algo que pese a eso despierta todas mis simpatías.
Fiebre oscura no ha sido una sorpresa. Me lo he pasado francamente bien con ella.
Una buena novela de fantasía urbana (de las mejores que he leído) que a pesar de no ser muy original, está muy bien escrita, bien explicada, con buen ritmo, mucho sentido del humor y, atención, no focaliza todo lo que ocurre en la atracción entre los protagonistas (se acaban de conocer, hay una poquilla, pero sin de chorreos cada vez que se cruzan las miradas), si no en la aventura y en el misterio. Porque la acción empieza porque la protagonista recibe la noticia que han asesinado a su hermana y decide ponerse a investigar. Y al hacerlo se ve envuelta en la búsqueda de un libro y adentrándose en un mundo fantástico repleto de peligros. La verdad es que por muy bueno que esté el chico, no está el chocho para farolillos cuando te persigue un bicho asqueroso con muchas bocas que rezuman algo parecido a limo.
Karie Marie Moning domina el género. Es ágil, con un estilo rico, rápido y vibrante. No satura al lector con información y construye una novela sencilla done sitúa al lector, pero no lo aturde. Quizá uno de los handicaps de Fiebre oscura es que sea demasiado introductoria y casi es más un prólogo que un primer capítulo. Presenta, resuelve poco, intriga mucho y se acaba la novela. Por contra, tiene una protagonista que funciona muy bien, resuelta, inteligente, alegra, directa y que no renuncia al rosa ni que la persiga un monstruo. Al igual que el chico, ese tal Jericho, pero de él hablaremos un poco más tarde.
Buen mundo, buena intriga, buenos monstruos. No hay mucho más que decir, Fiebre oscura es una muy entretenida novela de fantasía urbana. Da lo que promete y pasas un par de tardes es muy buena compañía. Y al acabarla, provoca las ganas de seguir explorando este universo de magia, dimensiones y objetos mágicos.
Y no, no me olvido de Jericho.
Quiero aprovechar este espacio que se me brinda para agradecer a Karie Marie Moning un retrato tan acertado, preciso y conciso del trabajo de librero. Por fin en un libro podemos leer y comprobar lo terriblemente sexi y peligroso que es el oficio de estar todo el día cargando libros de arriba a abajo, repasar albaranes, hacer pedidos, buscar ese libro de la portada roja que aparecía una chica con cara de algo, matar monstruos y guardar mucho secretos.
Jericho Barrows enseña lo sexi y peligroso que es ser librero hoy en día. Lo atractivo que resulta el tipo que coloca libros en una estantería y que ocupa todo el espacio. Jericho Barrows somos todos los libreros. Y yo más que ninguno.
Otras opiniones
Gaceta del ocio
Letras y escenas
El cofre de Nebe
Demencia lectora
Primer volumen de, por el momento, siete.
(Si no me equivoco, este primer volumen está descatalogado. Se puede conseguir alguno en segunda mano con esta portada o en una edición coleccionable de RBA de horrible portada).
Lo he comentado más de una vez, tengo debilidad por el género de fantasía urbana. No leo mucho ni estoy muy al tanto de novedades o autores, pero cuando me cae una novela de estas en las manos, tiene que ser muy mal novela para que no lo pase bien con ella.
Soy consciente de que casi siempre se basan en variaciones de la misma historia: chica deslenguada y divertida que se ve metida en problema de índole paranormal donde contará con la ayuda de atractivo y misterioso tipo con el que tendrá una relación llena de discusiones e inexplicable atracción. Explican una y otra vez lo mismo (quita unos vampiros, pon demonios, quita demonios y pon cambiaformas o mezclalos todos que es más divertido), pero este subgénero tiene algo que pese a eso despierta todas mis simpatías.
Fiebre oscura no ha sido una sorpresa. Me lo he pasado francamente bien con ella.
Una buena novela de fantasía urbana (de las mejores que he leído) que a pesar de no ser muy original, está muy bien escrita, bien explicada, con buen ritmo, mucho sentido del humor y, atención, no focaliza todo lo que ocurre en la atracción entre los protagonistas (se acaban de conocer, hay una poquilla, pero sin de chorreos cada vez que se cruzan las miradas), si no en la aventura y en el misterio. Porque la acción empieza porque la protagonista recibe la noticia que han asesinado a su hermana y decide ponerse a investigar. Y al hacerlo se ve envuelta en la búsqueda de un libro y adentrándose en un mundo fantástico repleto de peligros. La verdad es que por muy bueno que esté el chico, no está el chocho para farolillos cuando te persigue un bicho asqueroso con muchas bocas que rezuman algo parecido a limo.
Karie Marie Moning domina el género. Es ágil, con un estilo rico, rápido y vibrante. No satura al lector con información y construye una novela sencilla done sitúa al lector, pero no lo aturde. Quizá uno de los handicaps de Fiebre oscura es que sea demasiado introductoria y casi es más un prólogo que un primer capítulo. Presenta, resuelve poco, intriga mucho y se acaba la novela. Por contra, tiene una protagonista que funciona muy bien, resuelta, inteligente, alegra, directa y que no renuncia al rosa ni que la persiga un monstruo. Al igual que el chico, ese tal Jericho, pero de él hablaremos un poco más tarde.
Buen mundo, buena intriga, buenos monstruos. No hay mucho más que decir, Fiebre oscura es una muy entretenida novela de fantasía urbana. Da lo que promete y pasas un par de tardes es muy buena compañía. Y al acabarla, provoca las ganas de seguir explorando este universo de magia, dimensiones y objetos mágicos.
Y no, no me olvido de Jericho.
Quiero aprovechar este espacio que se me brinda para agradecer a Karie Marie Moning un retrato tan acertado, preciso y conciso del trabajo de librero. Por fin en un libro podemos leer y comprobar lo terriblemente sexi y peligroso que es el oficio de estar todo el día cargando libros de arriba a abajo, repasar albaranes, hacer pedidos, buscar ese libro de la portada roja que aparecía una chica con cara de algo, matar monstruos y guardar mucho secretos.
Jericho Barrows enseña lo sexi y peligroso que es ser librero hoy en día. Lo atractivo que resulta el tipo que coloca libros en una estantería y que ocupa todo el espacio. Jericho Barrows somos todos los libreros. Y yo más que ninguno.
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"Crepúsculo" de Stephanie Meyer
Crepúsculo, Stephenie Meyer, ed. Alfagura
Cuando ya casi nadie se acuerda de esta saga, sus libros han sido rebajados de precio y algunos están agotados o directamente descatalogados. Cuando solo quedan las ediciones de bolsillo con las portadas de las películas y de estas ya se han hecho todas las películas.
Una serie que ha sido admirada, amada, odiada, ridiculizada, parodiada, defendida y atacada hasta la saciedad y el agotamiento. Una serie que ha sido origen de otras muchas novelas que se dedicaron a fusilar ambiente, tipos, forzados triángulos y heroínas apáticas. Uno de los motivos de que mucha gente se lanzara a abrir un blog para compartir su entusiasta lectura con el mundo y tres años después algunas de esas personas hicieran entradas para justificar su entusiasmo primero.
Y cuando parece que Crepúsculo está cayendo poco a poco en el limbo de los éxitos fulgurantes, ahora vengo yo.
Con cantar sereno.
Ahora vengo yo a intentar hacer algo parecido a una reseña porque vosotros lo habéis decidido.
Y dudo.
¿Por qué?
Porque, ¿cómo hacer una reseña de un libro tan sobre explotado como éste? ¿Cómo enfrentarse a hacer una valoración más o menos serena de un libro que ha sido tan comentado, analizado, explotado, parodiado, ridiculizado, amado, defendido y atacado como éste? ¿Cómo se puede hacer una lectura y un comentario de un libro del que se quiera o no, se sabe todo? ¿Cómo librarse de prejuicios y hacer una lectura serena y una valoración alejada de fáciles chistes?
Es complicado, pero es lo que he intentado hacer; una lectura desprejuiciada. Como si hubiese leído esta novela a la semana siguiente de su publicación. De verdad. He intentado dejar fuera todas las influencias posibles, los prejuicios y las valoraciones externas e intentar apreciar esta novela por sí misma y no por el ruido que de ella me ha ido llegando. Y he intentado hacer una reseña sin caer en gracias gratuitas o en la broma gratuita e ingeniosa. ¿Lo he conseguido? Sí. Creo. Más o menos. Espero que sí. Empecemos.
Siendo totalmente sincero, Crepúsculo me ha parecido...
- Perdona, dilectísimo Jorge.
¿Sí?
- ¿Pero de qué va?
¿En serio?
- Sí, ¿de qué va Crepúsculo? Es que no lo sé...
¿De verdad hay alguien que no sepa de qué va esta novela?
- Parece ser que sí.
Vale. ¿De qué va Crepúsculo?
Resumiendo mucho, Crepúsculo sería la historia de amor en un entorno fantástico entre una adolescente y un anciano. Crepúsculo sería la historia de la ascensión social de una aburrida adolescente de clase media a la relumbrante alta sociedad aristocrática por medio de su historia de amor con un misterioso muchacho. Crepúsculo es una metáfora sobre la castidad. Crepúsculo es la historia de una inadaptada contenta de no encajar en ninguna parte que encuentra su lugar junto a otro inadaptado. Crepúsculo...
Crepúsculo narra la historia de una chica inadaptada que se muda a un gris pueblecito a vivir con un padre que se pasa la novela viendo la tele, comiendo y saliendo por la puerta. Se sabe diferente, se siente diferente, marca su diferencia y tiende a despreciar a todo aquel que se acerca a ella (sean chicos, chicas, profesores, etcétera). Hasta que en su camino se cruza un guapo muchacho que la desprecia abiertamente y, claro, se siente fascinada por el odio que desprende el joven mozo. Así se inicia una historia de amor con tintes sadomasoquistas donde ella irá despojándose de su triste personalidad anulándola poco a poco, mientras se enamora de un joven caballero que si la anula, la protege, la acosa, no deja que conduzca, observa mientras duerme y la sigue es "por su bien". Ah, y él es un vampiro. Pero tampoco importa mucho.
¿Qué me ha parecido Crepúsculo, entonces?
No me ha gustado.
¿Por qué?
Ante todo porque me ha parecido terriblemente aburrida.
Leer la historia de amor de Bella y Edward ha sido una experiencia soporífera porque durante las primeras tres cuartas partes del libro no pasa nada remarcable. ¿Qué ella descubre que es un vampiro? Como lector ya lo sabemos desde la contra portada así que el factor sorpresa desaparece. ¿Qué él no deja de repetir lo peligroso que es y que no deberían estar juntos porque la atracción es imposible de detener y por eso no dejan de buscarse? Me parece bien, pero esa sensación de peligro no se percibe en ningún momento. Como lectores sabemos que a Bella no le pasará nada por mucho que Edward la mire en diagonal. Y, sinceramente, el elemento vampírico casi parece más un adorno que una realidad (como ella se enfrenta al descubrimiento resulta triste y poco creíble... supongo que tengo un problema serio con esas escenas donde un elemento fantástico irrumpe y las protas se lo toman con un "¿y?").
¿Qué nos queda, pues? La historia de amor entre un chico y una chica que se conocen, se enamoran, van a cenar, se van de excursión y presentan a sus respectivas familias. Trescientas páginas de miradas, conversaciones repetitivas, más miradas, suspiros, sueños y vigilancia. La autora no consigue en mi opinión trasmitir la sensación de que Edward es un peligro para Bella. Se limita a hacer que el protagonista masculino cierre los dientes y ella se lo quede mirando con ojitos de cordera esperando que él haga algo en una metáfora muy poco sutil de "quiero acostarme contigo, pero no debemos". Supongo que el hecho de que el único punto de vista narrativo sea el de Bella y que esta esté tan entregada desde el principio a Edward, provoca que no haya tensión. O, por lo menos, que yo no la he percibido.
Para mí esta historia hubiera funcionado si de verdad Edward y su familia se hubieran presentado como seres fascinantes, peligrosos y sexis. Aunque luego fueran buenas personas y solo se dedicaran a matar animales por los bosques y a coleccionar figuritas de porcelana. Pero la única sensación que trasmiten es la frialdad, aburrimiento y aristocracia. Y supongo que es por esto último por lo que Bella se siente tan atraída por los Cullen y desprecia a sus compañeros de instituto (este tiene el pelo grasiento, esta va teñida, este es un pesado, esta es una cotilla, etcétera). Ya sé que quizá interpreto demasiado, pero Crepúsculo me ha parecido la historia de una ascensión social devolviendo al vampiro la brillantez de la aristocracia. ¿Exagerado? Quizá.
Ya sé que es una historia de amor, pero en mi opinión falta cuerpo a la novela. No solo está descompensada (la acción se acumula en el último cuarto de la novela) y resulta repetitiva (¡cuántas escenas de Bella y Edward repitiendo lo peligroso, lo no me importa, lo no te entiendo! ¡cuántos rechazos de Bella a todos los chicos que aparecen ante ella!) con un buen montón de páginas de más. Creo que con cien menos, la historia hubiera ganado ritmo y sería más directa, más contundente.
En mi opinión, Crepúsculo ha sido una lectura aburrida. El libro quizá no es tan malo como me prometían algunos (se lee rápido al tener una estructura lineal y muy marcada, un par de diálogos resultones en el coche que hace que los personajes cobren algo de vida antes de desmoronarse de nuevo), pero está lejos de haberme gustado. No acabo de creerme a los personajes (en mi opinión demasiado fijos e inmóviles, amén de una protagonista quejosa, melodramática, superficial, pasiva e hipócrita. Esto sin tener en cuenta toda esa excusa de la torpeza motriz de Bella para justificar que hay que protegerla...) ni la historia.
Como novela de fantasía no es interesante siendo quizá la mejor, pero no muy original, idea de los "vampiros vegetarianos" (George R.R. Martin, por ejemplo, trata la idea en la excelente Sueño del Fevre), aunque choca de frente con lo de los "vampiros brillantes", idea de una ridiculez alarmante y que en mi opinión tanto daño hace a una de las ideas más genuinas e inspiradas del mito vampírico.
¿Y cómo novela romántica? ¿Cómo exploración morosa y detallista de los sentimientos? Tampoco, ya que en mi opinión se queda en la superficie. Bella desde el primer momento se entrega y el resto es la repetición de las mismas palabras, cambiando un poco el orden.
Y, la verdad, toda esa parte del acoso de Edward para proteger a Bella me ha inquietado bastante. Ya sé que es entrar en una valoración moral de la novela, pero estas historias de acoso y vigilancia no me gustan. Y, sobre todo, si el protagonista lo hace aparándose en el discurso de "es por tu bien". Vamos por aquí, por allá, no puedes ir sola, conduzco yo, camino a tu lado por si tropiezas, te vigilo mientras duermes por si te ahogas con la saliva, eres torpe, ya lo hago yo... Él como macho alfa sobreprotector, ella como damisela indefensa a la que hay que proteger de todo. Además, después de leer a Edward uno vuelve a ser consciente de que sí, de que la sombra de Ángel es muy alargada y de que el vampiro de Meyer solo es una copia descafeinada del vampiro de Whedon.
Ya he leído Crepúsculo y no me ha gustado. Es larga y aburrida. Los protagonistas no me gustan, la historia no me la creo, no pienso leer sus secuelas y no acabo de entender el éxito que ha tenido. ¿Publicidad? ¿Edward Cullen como héroe romántico? ¿Una historia de amor típica de caballero protector de damiselas en apuros a la que dicen una y otra vez que no se puede valer por sí misma y ella lo acepta? La verdad es que no lo sé. Y de vez en cuando le voy dando vueltas.
Y no, no he visto la película. Y no lo haré. A menos que un día haga el especial "Qué veo, qué reseño" y deje a los lectores que elijan la película que tengo que ver para comentar despues... ummm... es una idea, pero ¿es una buena idea?
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Rapsodia literaria
Cuando ya casi nadie se acuerda de esta saga, sus libros han sido rebajados de precio y algunos están agotados o directamente descatalogados. Cuando solo quedan las ediciones de bolsillo con las portadas de las películas y de estas ya se han hecho todas las películas.
Una serie que ha sido admirada, amada, odiada, ridiculizada, parodiada, defendida y atacada hasta la saciedad y el agotamiento. Una serie que ha sido origen de otras muchas novelas que se dedicaron a fusilar ambiente, tipos, forzados triángulos y heroínas apáticas. Uno de los motivos de que mucha gente se lanzara a abrir un blog para compartir su entusiasta lectura con el mundo y tres años después algunas de esas personas hicieran entradas para justificar su entusiasmo primero.
Y cuando parece que Crepúsculo está cayendo poco a poco en el limbo de los éxitos fulgurantes, ahora vengo yo.
Con cantar sereno.
Ahora vengo yo a intentar hacer algo parecido a una reseña porque vosotros lo habéis decidido.
Y dudo.
¿Por qué?
Porque, ¿cómo hacer una reseña de un libro tan sobre explotado como éste? ¿Cómo enfrentarse a hacer una valoración más o menos serena de un libro que ha sido tan comentado, analizado, explotado, parodiado, ridiculizado, amado, defendido y atacado como éste? ¿Cómo se puede hacer una lectura y un comentario de un libro del que se quiera o no, se sabe todo? ¿Cómo librarse de prejuicios y hacer una lectura serena y una valoración alejada de fáciles chistes?
Es complicado, pero es lo que he intentado hacer; una lectura desprejuiciada. Como si hubiese leído esta novela a la semana siguiente de su publicación. De verdad. He intentado dejar fuera todas las influencias posibles, los prejuicios y las valoraciones externas e intentar apreciar esta novela por sí misma y no por el ruido que de ella me ha ido llegando. Y he intentado hacer una reseña sin caer en gracias gratuitas o en la broma gratuita e ingeniosa. ¿Lo he conseguido? Sí. Creo. Más o menos. Espero que sí. Empecemos.
Siendo totalmente sincero, Crepúsculo me ha parecido...
- Perdona, dilectísimo Jorge.
¿Sí?
- ¿Pero de qué va?
¿En serio?
- Sí, ¿de qué va Crepúsculo? Es que no lo sé...
¿De verdad hay alguien que no sepa de qué va esta novela?
- Parece ser que sí.
Vale. ¿De qué va Crepúsculo?
Resumiendo mucho, Crepúsculo sería la historia de amor en un entorno fantástico entre una adolescente y un anciano. Crepúsculo sería la historia de la ascensión social de una aburrida adolescente de clase media a la relumbrante alta sociedad aristocrática por medio de su historia de amor con un misterioso muchacho. Crepúsculo es una metáfora sobre la castidad. Crepúsculo es la historia de una inadaptada contenta de no encajar en ninguna parte que encuentra su lugar junto a otro inadaptado. Crepúsculo...
Crepúsculo narra la historia de una chica inadaptada que se muda a un gris pueblecito a vivir con un padre que se pasa la novela viendo la tele, comiendo y saliendo por la puerta. Se sabe diferente, se siente diferente, marca su diferencia y tiende a despreciar a todo aquel que se acerca a ella (sean chicos, chicas, profesores, etcétera). Hasta que en su camino se cruza un guapo muchacho que la desprecia abiertamente y, claro, se siente fascinada por el odio que desprende el joven mozo. Así se inicia una historia de amor con tintes sadomasoquistas donde ella irá despojándose de su triste personalidad anulándola poco a poco, mientras se enamora de un joven caballero que si la anula, la protege, la acosa, no deja que conduzca, observa mientras duerme y la sigue es "por su bien". Ah, y él es un vampiro. Pero tampoco importa mucho.
¿Qué me ha parecido Crepúsculo, entonces?
No me ha gustado.
¿Por qué?
Ante todo porque me ha parecido terriblemente aburrida.
Leer la historia de amor de Bella y Edward ha sido una experiencia soporífera porque durante las primeras tres cuartas partes del libro no pasa nada remarcable. ¿Qué ella descubre que es un vampiro? Como lector ya lo sabemos desde la contra portada así que el factor sorpresa desaparece. ¿Qué él no deja de repetir lo peligroso que es y que no deberían estar juntos porque la atracción es imposible de detener y por eso no dejan de buscarse? Me parece bien, pero esa sensación de peligro no se percibe en ningún momento. Como lectores sabemos que a Bella no le pasará nada por mucho que Edward la mire en diagonal. Y, sinceramente, el elemento vampírico casi parece más un adorno que una realidad (como ella se enfrenta al descubrimiento resulta triste y poco creíble... supongo que tengo un problema serio con esas escenas donde un elemento fantástico irrumpe y las protas se lo toman con un "¿y?").
Sí, eso mismo opino yo del elemento vampírico.
¿Y los malos? Ya sabéis, los cazadores de las últimas cien páginas. En mi opinión, de relleno. Había que procurar que pasara algo más allá de cenas familiares y partidos de beisbol.
¿Qué nos queda, pues? La historia de amor entre un chico y una chica que se conocen, se enamoran, van a cenar, se van de excursión y presentan a sus respectivas familias. Trescientas páginas de miradas, conversaciones repetitivas, más miradas, suspiros, sueños y vigilancia. La autora no consigue en mi opinión trasmitir la sensación de que Edward es un peligro para Bella. Se limita a hacer que el protagonista masculino cierre los dientes y ella se lo quede mirando con ojitos de cordera esperando que él haga algo en una metáfora muy poco sutil de "quiero acostarme contigo, pero no debemos". Supongo que el hecho de que el único punto de vista narrativo sea el de Bella y que esta esté tan entregada desde el principio a Edward, provoca que no haya tensión. O, por lo menos, que yo no la he percibido.
Para mí esta historia hubiera funcionado si de verdad Edward y su familia se hubieran presentado como seres fascinantes, peligrosos y sexis. Aunque luego fueran buenas personas y solo se dedicaran a matar animales por los bosques y a coleccionar figuritas de porcelana. Pero la única sensación que trasmiten es la frialdad, aburrimiento y aristocracia. Y supongo que es por esto último por lo que Bella se siente tan atraída por los Cullen y desprecia a sus compañeros de instituto (este tiene el pelo grasiento, esta va teñida, este es un pesado, esta es una cotilla, etcétera). Ya sé que quizá interpreto demasiado, pero Crepúsculo me ha parecido la historia de una ascensión social devolviendo al vampiro la brillantez de la aristocracia. ¿Exagerado? Quizá.
Ya sé que es una historia de amor, pero en mi opinión falta cuerpo a la novela. No solo está descompensada (la acción se acumula en el último cuarto de la novela) y resulta repetitiva (¡cuántas escenas de Bella y Edward repitiendo lo peligroso, lo no me importa, lo no te entiendo! ¡cuántos rechazos de Bella a todos los chicos que aparecen ante ella!) con un buen montón de páginas de más. Creo que con cien menos, la historia hubiera ganado ritmo y sería más directa, más contundente.
En mi opinión, Crepúsculo ha sido una lectura aburrida. El libro quizá no es tan malo como me prometían algunos (se lee rápido al tener una estructura lineal y muy marcada, un par de diálogos resultones en el coche que hace que los personajes cobren algo de vida antes de desmoronarse de nuevo), pero está lejos de haberme gustado. No acabo de creerme a los personajes (en mi opinión demasiado fijos e inmóviles, amén de una protagonista quejosa, melodramática, superficial, pasiva e hipócrita. Esto sin tener en cuenta toda esa excusa de la torpeza motriz de Bella para justificar que hay que protegerla...) ni la historia.
Como novela de fantasía no es interesante siendo quizá la mejor, pero no muy original, idea de los "vampiros vegetarianos" (George R.R. Martin, por ejemplo, trata la idea en la excelente Sueño del Fevre), aunque choca de frente con lo de los "vampiros brillantes", idea de una ridiculez alarmante y que en mi opinión tanto daño hace a una de las ideas más genuinas e inspiradas del mito vampírico.
¿Y cómo novela romántica? ¿Cómo exploración morosa y detallista de los sentimientos? Tampoco, ya que en mi opinión se queda en la superficie. Bella desde el primer momento se entrega y el resto es la repetición de las mismas palabras, cambiando un poco el orden.
Y, la verdad, toda esa parte del acoso de Edward para proteger a Bella me ha inquietado bastante. Ya sé que es entrar en una valoración moral de la novela, pero estas historias de acoso y vigilancia no me gustan. Y, sobre todo, si el protagonista lo hace aparándose en el discurso de "es por tu bien". Vamos por aquí, por allá, no puedes ir sola, conduzco yo, camino a tu lado por si tropiezas, te vigilo mientras duermes por si te ahogas con la saliva, eres torpe, ya lo hago yo... Él como macho alfa sobreprotector, ella como damisela indefensa a la que hay que proteger de todo. Además, después de leer a Edward uno vuelve a ser consciente de que sí, de que la sombra de Ángel es muy alargada y de que el vampiro de Meyer solo es una copia descafeinada del vampiro de Whedon.
Lo siento, pero este sí que es un vampiro sexi, atormentado y peligroso.
Y no es ni sobreprotector ni condescendiente con Buffy.
Y no es ni sobreprotector ni condescendiente con Buffy.
Y no, no he visto la película. Y no lo haré. A menos que un día haga el especial "Qué veo, qué reseño" y deje a los lectores que elijan la película que tengo que ver para comentar despues... ummm... es una idea, pero ¿es una buena idea?
Otras historias de vampiros
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Rapsodia literaria
"Deuda de espíritu. Vampire Academy 5" de Richelle Mead
Deuda de espíritu, Richelle Mead, Alfaguara
Vampire Academy 5
Por fin la quinta entrega de una de las mejores series juveniles que podemos encontrar en las librerías (aunque algún volumen ya está agotado). Para los seguidores de esta serie, la publicación de sus volúmenes está siendo una experiencia agónica con un lapso de tiempo de unos dos años entre volúmenes que frustra más cuando la saga lleva cuatro años finiquitada en su país de origen. Sea como sea, quinta entrega. Leída en un momento y, ¿conclusión?, qué buena que es Richelle Mead. Nada nuevo, verdad, pero no se puede decir otra cosa.
¿De qué va? Bueno, a Rose le pasan cosas. A Lisa le pasan cosas. Y sale Dimitri que primero esto y luego lo otro. Y más personajes que salen y hacen bla bla bla y pim pam pum. Hay un par de "esto no me lo esperaba", un par de "esto lo imaginaba, pero que bien funciona" y otro par de "anda que no eres cabrona ni ná, Richelle... con cariño". Salen personajes nuevo, alguno de otros volúmenes y los que llevan libros acompañándonos, siguen. Y..., vale, ya sé que como sinopsis es un poco...
- Mierda.
- Patética.
- Absurda.
... rara, pero después de cinco libros hacer un resumen de la novela es asegurar el despiece argumental a quien no lo haya leído o vaya por sus primeros compases.
La verdad, no tengo mucha idea de cómo hacer esta reseña sin que suene a repetición de las anteriores. Richelle Mead es buena, historia y personajes poderosos, muy bien equilibrada, etc., así que pasando de reseña y vayamos a tres o cuatro puntos de por qué esta novela me ha gustado mucho.
1. Rose Hathaway. Tranquilos, no voy a hacer un momento de fanboyleo en plan "Oh, Rose, mi Rose, es que es tan alkalkdjkjaafff y vaya cuerpo". Este punto se refiere a la excelente evolución y configuración de un personaje que cambia libro a libro. De la Rose comprometida, pero algo frívola del primer libro a este saco de fuerza hay un evidente cambio. Lo sucedido moldea al personaje. Rose no es una de esas protagonistas que de primer a último libro se mantiene igual en sus actos y suspiros, si no que cambia y aprende. Y lo que es más interesante, en Deuda de espíritu se equivoca. Richelle Mead tiene el acierto de no crear una heroína perfecta e inmaculada. Es esta novela, Rose está confundida y muestra al lector su lado más obsesivo y egoísta. Rose toma decisiones en nombre de una buena causa, o lo que ella considera una buena causa, que afectan a la vida de los que la rodean y, sobre todo, de inocentes que no tienen nada que ver con todo aquello (por ejemplo, la escena en Las Vegas).
2. Giros en la trama. Algunos más inesperados que otros, pero todos ellos funcionan muy bien y son lógicos con el desarrollo de la trama y los personajes. Es más, dan una mayor profundidad al argumento y al universo en el que se mueven dhampirs, moroi y strigoi (por ejemplo, como este submundo oculto vampírico también afecta a los humanos, y me remito de nuevo a la escena en Las Vegas). Esta saga es un ejemplo de como un planteamiento que puede ser tópico se resuelve como algo nuevo y que el camino que lleva desenlace que pueda antojarse a priori en ya conocido, es apasionante. Además, se profundiza en el universo de la corte y en el momento político de los dhampirs, algo que en las anteriores novelas no se trabajaba demasiado. En esta trama, Rose sí que demuestra estar a la altura (aunque en ocasiones le pierda su bonita boca... bueno, lo que llega a soltar por ella).
3. Equilibrio. A diferencia de las anteriores novelas donde había un pequeño desequilibrio en la estructura (recuerdo, por ejemplo, la segunda novela donde había grandes lagunas de vampiros con esquí y accion algo precipitada), en Deuda de espíritu está mejor repartido... tiene una estructura más cuidada y que no depende tanto de los estallidos de acción (por ejemplo, la sorpresa final no tiene nada que ver con patadas en la boca, si no con una intriga política). Es más compacta y la sensación que deja al acabar la lectura es que en ella no sobra nada.
4. Constatar que la sombra de Ángel es muy alargada...
5. Lo fantástico que es leer una historia de amistad entre mujeres donde no aparece ni la envidia ni la competencia. Dos amigas que se quieren, ayudan, respetan, apoyan y pelean, con los demás y entre ellas. Sí, vale, Vampire Academy puede ser una gran historia de amor y unas excelentes novelas de acción, pero para mí en verdad es una serie cuyo núcleo son dos estupendas muchachas y la historia de su amistad. Si en el fondo Los juegos del hambre no era más que la historia de amor entre dos hermanas, Vampire Academy es la historia de amor entre dos amigas. Y esto es genial.
Y poco más. Deuda de espíritu es una estupenda novela de acción, intriga y amoooor. Un capítulo más en una excelente serie juvenil siempre en ascenso. Vampire Academy es una de las pocas series que considero (casi) imprescindibles.
Ahora solo esperar que la publicación del desenlace no se demore mucho.
Otras historias
Otras opiniones
Devoradora de libros
El cofre de Nebe
Vampire Academy 5
Por fin la quinta entrega de una de las mejores series juveniles que podemos encontrar en las librerías (aunque algún volumen ya está agotado). Para los seguidores de esta serie, la publicación de sus volúmenes está siendo una experiencia agónica con un lapso de tiempo de unos dos años entre volúmenes que frustra más cuando la saga lleva cuatro años finiquitada en su país de origen. Sea como sea, quinta entrega. Leída en un momento y, ¿conclusión?, qué buena que es Richelle Mead. Nada nuevo, verdad, pero no se puede decir otra cosa.
¿De qué va? Bueno, a Rose le pasan cosas. A Lisa le pasan cosas. Y sale Dimitri que primero esto y luego lo otro. Y más personajes que salen y hacen bla bla bla y pim pam pum. Hay un par de "esto no me lo esperaba", un par de "esto lo imaginaba, pero que bien funciona" y otro par de "anda que no eres cabrona ni ná, Richelle... con cariño". Salen personajes nuevo, alguno de otros volúmenes y los que llevan libros acompañándonos, siguen. Y..., vale, ya sé que como sinopsis es un poco...
- Mierda.
- Patética.
- Absurda.
... rara, pero después de cinco libros hacer un resumen de la novela es asegurar el despiece argumental a quien no lo haya leído o vaya por sus primeros compases.
La verdad, no tengo mucha idea de cómo hacer esta reseña sin que suene a repetición de las anteriores. Richelle Mead es buena, historia y personajes poderosos, muy bien equilibrada, etc., así que pasando de reseña y vayamos a tres o cuatro puntos de por qué esta novela me ha gustado mucho.
1. Rose Hathaway. Tranquilos, no voy a hacer un momento de fanboyleo en plan "Oh, Rose, mi Rose, es que es tan alkalkdjkjaafff y vaya cuerpo". Este punto se refiere a la excelente evolución y configuración de un personaje que cambia libro a libro. De la Rose comprometida, pero algo frívola del primer libro a este saco de fuerza hay un evidente cambio. Lo sucedido moldea al personaje. Rose no es una de esas protagonistas que de primer a último libro se mantiene igual en sus actos y suspiros, si no que cambia y aprende. Y lo que es más interesante, en Deuda de espíritu se equivoca. Richelle Mead tiene el acierto de no crear una heroína perfecta e inmaculada. Es esta novela, Rose está confundida y muestra al lector su lado más obsesivo y egoísta. Rose toma decisiones en nombre de una buena causa, o lo que ella considera una buena causa, que afectan a la vida de los que la rodean y, sobre todo, de inocentes que no tienen nada que ver con todo aquello (por ejemplo, la escena en Las Vegas).
2. Giros en la trama. Algunos más inesperados que otros, pero todos ellos funcionan muy bien y son lógicos con el desarrollo de la trama y los personajes. Es más, dan una mayor profundidad al argumento y al universo en el que se mueven dhampirs, moroi y strigoi (por ejemplo, como este submundo oculto vampírico también afecta a los humanos, y me remito de nuevo a la escena en Las Vegas). Esta saga es un ejemplo de como un planteamiento que puede ser tópico se resuelve como algo nuevo y que el camino que lleva desenlace que pueda antojarse a priori en ya conocido, es apasionante. Además, se profundiza en el universo de la corte y en el momento político de los dhampirs, algo que en las anteriores novelas no se trabajaba demasiado. En esta trama, Rose sí que demuestra estar a la altura (aunque en ocasiones le pierda su bonita boca... bueno, lo que llega a soltar por ella).
3. Equilibrio. A diferencia de las anteriores novelas donde había un pequeño desequilibrio en la estructura (recuerdo, por ejemplo, la segunda novela donde había grandes lagunas de vampiros con esquí y accion algo precipitada), en Deuda de espíritu está mejor repartido... tiene una estructura más cuidada y que no depende tanto de los estallidos de acción (por ejemplo, la sorpresa final no tiene nada que ver con patadas en la boca, si no con una intriga política). Es más compacta y la sensación que deja al acabar la lectura es que en ella no sobra nada.
4. Constatar que la sombra de Ángel es muy alargada...
5. Lo fantástico que es leer una historia de amistad entre mujeres donde no aparece ni la envidia ni la competencia. Dos amigas que se quieren, ayudan, respetan, apoyan y pelean, con los demás y entre ellas. Sí, vale, Vampire Academy puede ser una gran historia de amor y unas excelentes novelas de acción, pero para mí en verdad es una serie cuyo núcleo son dos estupendas muchachas y la historia de su amistad. Si en el fondo Los juegos del hambre no era más que la historia de amor entre dos hermanas, Vampire Academy es la historia de amor entre dos amigas. Y esto es genial.
Y poco más. Deuda de espíritu es una estupenda novela de acción, intriga y amoooor. Un capítulo más en una excelente serie juvenil siempre en ascenso. Vampire Academy es una de las pocas series que considero (casi) imprescindibles.
Ahora solo esperar que la publicación del desenlace no se demore mucho.
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Devoradora de libros
El cofre de Nebe
"El baile de los secretos" de Jesús Cañadas, "Diástole" de Emilio Bueso y "El hombre sin rostro" de Luis Manuel Ruíz
Tres buenísimas lecturas.
El baile de los secretos, Jesús Cañadas, Ajec Editores
Se ha escrito mucho sobre esta novela. La leí hace un año y pico y se había quedado en la recamara de la reseñas. A veces te encuentras con una novela de la que cuesta hacer una reseña por breve o escueta que sea. Su lectura pilla desprevenido y en el momento de sentarse y escribir, lo leído te supera. ¿Y qué me encontré con El baile de los secretos? Una partida de rol. Un mundo en peligro. Y muchos secretos, claro.
El baile de los secretos es una novela críptica, dura, exigente, excesiva, pero a la vez absorbente, divertida, terrorífica, ágil, provista de un estilo y lenguaje absolutamente brillantes y un pérfido sentido del juego y la manipulación. Una historia que no empieza sino que es la continuación de algo que llevan viviendo los personajes un tiempo. Y una partida de rol donde cada uno tiene un personaje. El lector se verá impelido a jugar esa misma partida y a leer atento para conectar ambos mundos e ir desentrañando quién es quién, la relación que tienen y todo lo que callan. Y este ejercicio me resultó muy estimulante como lector ya que obliga a una lectura atenta. Jesús Cañadas juega, y juega bien, y no escribe una novela lineal o explicativa. Es la lectura atenta del lector la que hará que la historia se engarce y crezca (y si además el lector ha jugado a rol, eso que tiene ganado. Ya sabemos que la heroína de físico imposible suele tener como jugador a un tío).
Novela de terror, de fantasía, de ciencia ficción. Historia sobre el amor, el desamor y los monstruos que ambos crean. Juego de referencias y homenajes (un mundo construido con lecturas, visiones, imaginaciones de otros mundos y otros autores) sin perder ni fuerza ni personalidad. Una lectura apasionante. Una novela terrorífica, emocionante y divertida a partes iguales. Y una excleente prueba de que con talento e imaginación se pueden encontrar otras formas de explicar las historias y dar nuevos bríos al género fantástico y de terror.
Otras opiniones
Fantasy Mundo
Planetas prohibidos
Diástole, Emilio Bueso, Salto de página
Un pintor yonki es contratado por un extraño para pintar un retrato durante cuatro noches. En esas noches, el cliente irá desgranando una fascinante historia de horror que transformará para siempre la vida del pintor.
La portada de esta novela es un enorme spoiler, así que no destapo nada si digo que en Diástole salen vampiros. Y que, además, esta novela me ha parecido una de las más interesantes novelas de vampiros que he leído en mucho tiempo. Más aún, me ha parecido una de las mejores muestras de literatura de terror que he devorado en años. Y entiendo literatura de terror no en el sentido de gore y susto fácil, si no en ese tipo de literatura que te muestra lo que no quieres ver y que lleva a lugares que luego no puedes olvidar. Entendida como destapar lo que queremos que permanezca oculto y mostrarnos las llagas.
El arte como ejercicio de vampirización. Dorian Grey y Arrebato de Zulueta. El arte que chupa vida y creatividad y el precio por una obra eterna. Un estilo brillante para la historia de dos personajes a su manera heridos y a su manera, buscando cierta redención. Una historia sucia y dura escrita con un estilo brillante que atrapa en una maraña al lector y lo conduce por una historia donde el horror se infiltra de forma muy sutil hasta un cruel desenlace. La novela se instala en el gris y en la incomodidad.
Ivan y Jerôme son dos personajes creados y explicados con mimo, sutileza y complejidad. Al igual que el estilo de Bueso. Brillante y sutil. Provisto de registro y voces. Con la capacidad de crear páginas de arrebatadora y agusanada belleza. Y mala leche, claro, al convertir las evocadoras y románticas noches blancas de Dostoievski, en un momento hermoso, pero repleto de inquietantes resonancias. El horror que de forma sutil va destruyendo y erosionando.
Otras opiniones
Fantifica
El hombre sin rostro, Luís Manuel Ruíz, Salto de página
Una novela inesperada. Un conocido me vino un día a la librería y me dijo, toma, lee. Y leí. Y puedo afirmar que El hombre sin rostro es de las lecturas más felices que he hecho este año; una novela de detectives a principios de siglo XX con su toque de ciencia ficción que puede recordar a Wells o a Verne, pero que para mí se hermana con aquel Madrid fantasmagórico y onírico de la maravillosa La torre de los siete jorobados de Edgard Neville.
Una serie de extraños accidentes que tienen toda la pinta de ser asesinatos. Un reportero sin mucho oficio ni muchas luces que decide investigar. Un grupo de científicos que trabajaban en algo secreto. Mentiras, espionaje y una arrebatadora heroína llena de recursos, inteligencia, belleza y lengua rápida. Una investigación que llevará a nuestro grupo de protagonistas por el Madrid, la Barcelona y la Galicia del principios de siglo XX.
El hombre sin rostro me ha parecido una maravilla. Repito, una lectura feliz. Una historia fascinante que aúna con naturalidad el retrato de época con la ciencia ficción. Unos personajes en estado de gracia que despiertan la simpatía del lector. Un estilo brillante, firme, rico, juguetón y rebosante de sentido del humor, de la ironía y la parodia. Una novela que se lee en un suspiro y que al cerrarla dan ganas de volver a ella.
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Dime lo que escribes
"El umbral de la noche" de Stephen King
El umbral de la noche, Stephen King, Best seller
Cuarto libro de Stephen King tras los éxitos atronadores de Carrie, Salem's Lot y El resplandor. Y primer libro de cuentos. Dicen que el mejor. Eso no lo sé porque todavía no he leído los otros. ¿Y este? Buena colección de relatos aunque nos encontramos de todo. Algunos brillantes, otros buenos, varios que están bien y algunos que provocaron que pensara, ¿de verdad creías que era una idea Stephen? Es una colección muy interesante que proporciona horas de buena lectura y algún escalofrío amen de permitir rastrear las principales influencias de un Stephen King que empezaba y que buscaba su voz personal en el relato (las sombras de Matheson, Dalh, Lovecraft, Jackson y varios etcéteras).
Y ahora vamos cuento por cuento (son veinte así que paciencia).
Los misterios del gusano. Empezamos con un homenaje a la narrativa lovecraftiana. Relato epistolar, libros malditos, pueblo con secreto y amenaza primigenia. Un relato pulcro, contenido y muy clásico que sirve como contribución de King al mundo creado por Lovecraft. No aporta ninguna sorpresa, pero es muy entretenido de leer.
El último turno. Un grupo de trabajadores limpiando un sótano. La tensión entre uno de ellos y el encargado. Muchas ratas. Relato donde se juega con varios miedos y fobias, las ratas, los espacios estrechos y oscuros, la desconfianza por "el otro". Miles de ratas y una deuda pendiente. Un relato angustioso. Le falta algo de entidad a los personajes principales, pero funciona bien. De este relato se hizo una mala película, pero de las malas, de las que no llegan ni a divertida, titulada La fosa común.
Marejada nocturna. Una epidemia a nivel mundial. Un grupo de jóvenes que se creen inmune al virus. Un accidente de coche y una muestra de crueldad gratuita. Un cuento bien llevado que deja mucho en el aire para inquietud del lector.
Soy la puerta. Uno de los relatos que más me han gustado. Una historia de pura ciencia ficción que entronca con los relatos de La dimensión desconocida y el cine de serie B de los cincuenta. Un viaje al espacio que sale mal y una vuelta a casa... acompañado. Bien escrito, con la duración justa y con una inquietud que crece hasta un escalofriante final.
La trituradora. El primer cuento que me llevo a pensar si en su momento realmente Stephen King pensaba que era una buena idea porque la historia de una maquina planchadora asesina por haber probado la sangre humana es bastante ridícula. Pero una idea ridícula puede dar un buen relato. Lástima que este no es el caso ya que todo el relato es demasiado demencial y exige demasiado al lector. En narrativa fantástica es donde la credibilidad debe ser más acusada. No todo vale. Tuvo su correspondiente mala película en 1995 dirigida por el mismísimo Tobe Hooper (¿dó quedó el pulso de La matanza de Texas o la diversión de La casa de los horrores?) con el título de The mangler.
El coco. Un tipo va al psicólogo para una única sesión para confesar que ha matado a sus tres hijos... sin tocarlos. Un relato escalofriante que explora los terrores infantiles y los miedos de la paternidad. Un personaje principal desgradable y un desarrollo que parte de esa idea tan sencilla y tan efectiva de que hay algo en el armario. Y con un final que lo entronca directamente con los cómics de Cuentos de la cripta o Creepy.
Materia gris. Historia de mutaciones y cerveza. No es gran cosa, pero es divertido y entretenido.
Campo de batalla. Divertidísimo relato de acción. Un asesino a sueldo enfrentado a una multitud de juguetes bélicos. Relato que entronca con la maravillosa tradición de juguetes asesinos como The devil doll de Todd Browning o el muñeco vudú del relato de Matheson. No digo mucho más para no estropear la diversión a nadie ni el placer de un excelente final. Existe una divertidísima adaptación televisiva de este relato en la serie Pesadillas y alucinaciones con un William Hurt pasándoselo muy, pero que muy bien.
Camiones. Los camiones de una gasolinera cobran vida y empieza a atropellar a la gente que hay por allí. Un grupo de supervivientes se encierran en un restaurante e intentan sobrevivir al acoso de los camiones. Muertes, motores rugiendo y gasolina que se acaba... No sé si es que los cuentos de máquinas con vida propia no le sientan bien a Stephen King (con la excepción de Christine), pero este es otro cuanto que no tiene mucho sentido, ni calidad, ni gracia. Vuelve a partir de una situación demasiado inverosímil (ya sé que la de los juguetitos también, pero en ella hay un espíritu de sano cachondeo y diversión que redime) con una resolución bastante tonta. Este relato fue la base para que Stephen King debutara como director de cine con una espantosa película llamada Maximun Overdrive. Decir que es mala es poco.
Años después alguien perpretó un remake. Como decía aquel, qué manera de tirar el dinero.
A veces vuelven. Buen relato. Un nuevo profesor en una nueva escuela ve como "regresan" a su vida aquellos chavales que lo acosaban veinte años atrás. No es que se parezcan, es que son los mismos. Aunque no acaba de cuadrar en la solución final, tiene buen pulso y resulta muy inquietante el nuevo acoso de estos abusones. Tuvo una adaptación televisiva que no he visto, pero que no augura nada bueno.
La primavera de fresa. Un joven recuerda los extraños asesinatos que se sucedieron años atrás cuando estudiaba en una universidad de Nueva Inglaterra. Cuento bastante tonto y previsible donde se ven demasiado las costuras de un escritor que empieza. De los que menos me han gustado de todo el libro.
La cornisa. La sombra de Roald Dalh y su Hombre del sur es alargada. Un ejemplo de lo que es un homenaje y revisión de un clásico. Un tipo por x motivos convence a otro para rodear el edificio donde están por una cornisa a más de 200 metros de altura. Tensión, angustia, pinceladas de humor negro y una paloma muy jodedora. De lo cuentos que más me han gustado. En 1985 se estreno la entretenida película Cat's Eye formada por tres pequeñas historias. Esta es una de ellas.
El hombre de la cortadora de césped. Extraño y fallido relato con criatura mitológica incluida. La idea del extraño que invade tu casa siempre me ha resultado interesante, pero tiene una resolución que creo que roza el ridículo. En 1992 se hizo una película que tomaba el título del relato, una escena y nada más.
Basta S.A. Con este cuento Stephen King demuestra que no solo puede ser un gran escritor de terror, si no que además es un estupendo escrito de relatos de humor. Basta S.A. es un excelente relato de humor negrísimo sobre una técnica radical para dejar de fumar. Muy divertido e irónico. Es otro de los fragmentos de la película Cat's Eye.
Sé lo que necesitas. Una historia de amor frustrada. Una chica siente una extraña atracción por un chico marginado. Este parece adivinar siempre lo que ella necesita para ser feliz. Una historia de amor, desconfianza, algún que otro crimen y que, la verdad, ni me convenció ni me entretuvo especialmente. Bastante anodino. La verdad es que me ha costado bastante recordar de qué iba.
Los chicos del maíz. Uno de los relatos más famosos de Stephen King y que tiene como tema central una de mis preferidos, la pareja urbanita atrapada en un entorno rural lleno de amenazas y cabrones. Una pareja llega a un pueblo donde no hay adultos. Los niños siguen un extraño culto. La huida parece imposible. Un cuento que es Stephen King en estado puro y uno de los mejores del libro. Bien explicado, angustioso y claustrofóbico pese a alguna vacilación en su parte intermedia (como el protagonista explica lo que ocurre en el pueblo está un poco pillado por los pelos) y que no acabe de ser redondo del todo. Origen de una larga, y cada vez peor, saga de películas que allá en los ochenta tuvo bastante popularidad. El primer título tiene más fama que calidad, pero es bastante entretenido a trozos pese a que ha envejecido bastante mal. El resto, mejor olvidarlo.
Y una duda, ¿había visto Stephen King el año anterior el películón de Chicho Ibáñez Serrador ¿Quién puede matar a un niño? y se inspiró en ella para estos chicos?
El último peldaño de la escalera. Un buen relato. La historia de dos hermanos, un momento de angustia que compartieron y la progresiva disolución de su relación. No es un relato de terror. Nos vamos de lleno al drama.
El hombre que amaba las flores. Un hombre joven camina por la calle a buscar unas flores para su amada. La gente reconoce y comparte ese amor que parece destilar el desconocido. Pero las apariencias engañan. Un cuento bastante flojo y previsible en su "sorpresa" final.
Un trago de despedida. Regreso a Salem's Lot y regreso al terror más clásico. Los parroquianos de un bar ver interrumpida su tranquila noche por un hombre que pide ayuda: su mujer y su hija están atrapadas en la nieve en el cruce que lleva a la ciudad de Salem's Lot. Buen cuento de vampiros de aire clásico.
La mujer de la habitación. El relato que cierra el libro. Un hijo ante su madre enferma y una difícil decisión. Un cuento bastante anodino para acabar el libro y que cae de lleno en el melodrama. Para mí, ningún interés.
El umbral de la noche es una correcta colección de relatos en la que en mi opinión destacan aquellos con más sentido del humor o donde el homenaje a formatos como La dimensión desconocida o los cómics de terror es más evidente. No tiene una estructura definida o en ellos un nexo común, pero en su conjunto resulta muy entretenido pese a la variabilidad de la calidad de los relatos. A Stephen King creo que le sienta mejor la larga distancia de la novela para que sus historias y su universo se expanda que el relato ya que en algunos de ellos se notaba que con más hubiera sido mejor (el ejemplo de Los chicos del maíz es perfecto ya que es una buena idea que hubiera necesitado más espacio para crecer). Sea como sea, una buena y entretenida lectura.
Cuarto libro de Stephen King tras los éxitos atronadores de Carrie, Salem's Lot y El resplandor. Y primer libro de cuentos. Dicen que el mejor. Eso no lo sé porque todavía no he leído los otros. ¿Y este? Buena colección de relatos aunque nos encontramos de todo. Algunos brillantes, otros buenos, varios que están bien y algunos que provocaron que pensara, ¿de verdad creías que era una idea Stephen? Es una colección muy interesante que proporciona horas de buena lectura y algún escalofrío amen de permitir rastrear las principales influencias de un Stephen King que empezaba y que buscaba su voz personal en el relato (las sombras de Matheson, Dalh, Lovecraft, Jackson y varios etcéteras).
Y ahora vamos cuento por cuento (son veinte así que paciencia).
Los misterios del gusano. Empezamos con un homenaje a la narrativa lovecraftiana. Relato epistolar, libros malditos, pueblo con secreto y amenaza primigenia. Un relato pulcro, contenido y muy clásico que sirve como contribución de King al mundo creado por Lovecraft. No aporta ninguna sorpresa, pero es muy entretenido de leer.
El último turno. Un grupo de trabajadores limpiando un sótano. La tensión entre uno de ellos y el encargado. Muchas ratas. Relato donde se juega con varios miedos y fobias, las ratas, los espacios estrechos y oscuros, la desconfianza por "el otro". Miles de ratas y una deuda pendiente. Un relato angustioso. Le falta algo de entidad a los personajes principales, pero funciona bien. De este relato se hizo una mala película, pero de las malas, de las que no llegan ni a divertida, titulada La fosa común.
Marejada nocturna. Una epidemia a nivel mundial. Un grupo de jóvenes que se creen inmune al virus. Un accidente de coche y una muestra de crueldad gratuita. Un cuento bien llevado que deja mucho en el aire para inquietud del lector.
Soy la puerta. Uno de los relatos que más me han gustado. Una historia de pura ciencia ficción que entronca con los relatos de La dimensión desconocida y el cine de serie B de los cincuenta. Un viaje al espacio que sale mal y una vuelta a casa... acompañado. Bien escrito, con la duración justa y con una inquietud que crece hasta un escalofriante final.
La trituradora. El primer cuento que me llevo a pensar si en su momento realmente Stephen King pensaba que era una buena idea porque la historia de una maquina planchadora asesina por haber probado la sangre humana es bastante ridícula. Pero una idea ridícula puede dar un buen relato. Lástima que este no es el caso ya que todo el relato es demasiado demencial y exige demasiado al lector. En narrativa fantástica es donde la credibilidad debe ser más acusada. No todo vale. Tuvo su correspondiente mala película en 1995 dirigida por el mismísimo Tobe Hooper (¿dó quedó el pulso de La matanza de Texas o la diversión de La casa de los horrores?) con el título de The mangler.
El coco. Un tipo va al psicólogo para una única sesión para confesar que ha matado a sus tres hijos... sin tocarlos. Un relato escalofriante que explora los terrores infantiles y los miedos de la paternidad. Un personaje principal desgradable y un desarrollo que parte de esa idea tan sencilla y tan efectiva de que hay algo en el armario. Y con un final que lo entronca directamente con los cómics de Cuentos de la cripta o Creepy.
Materia gris. Historia de mutaciones y cerveza. No es gran cosa, pero es divertido y entretenido.
Campo de batalla. Divertidísimo relato de acción. Un asesino a sueldo enfrentado a una multitud de juguetes bélicos. Relato que entronca con la maravillosa tradición de juguetes asesinos como The devil doll de Todd Browning o el muñeco vudú del relato de Matheson. No digo mucho más para no estropear la diversión a nadie ni el placer de un excelente final. Existe una divertidísima adaptación televisiva de este relato en la serie Pesadillas y alucinaciones con un William Hurt pasándoselo muy, pero que muy bien.
Camiones. Los camiones de una gasolinera cobran vida y empieza a atropellar a la gente que hay por allí. Un grupo de supervivientes se encierran en un restaurante e intentan sobrevivir al acoso de los camiones. Muertes, motores rugiendo y gasolina que se acaba... No sé si es que los cuentos de máquinas con vida propia no le sientan bien a Stephen King (con la excepción de Christine), pero este es otro cuanto que no tiene mucho sentido, ni calidad, ni gracia. Vuelve a partir de una situación demasiado inverosímil (ya sé que la de los juguetitos también, pero en ella hay un espíritu de sano cachondeo y diversión que redime) con una resolución bastante tonta. Este relato fue la base para que Stephen King debutara como director de cine con una espantosa película llamada Maximun Overdrive. Decir que es mala es poco.
Años después alguien perpretó un remake. Como decía aquel, qué manera de tirar el dinero.
A veces vuelven. Buen relato. Un nuevo profesor en una nueva escuela ve como "regresan" a su vida aquellos chavales que lo acosaban veinte años atrás. No es que se parezcan, es que son los mismos. Aunque no acaba de cuadrar en la solución final, tiene buen pulso y resulta muy inquietante el nuevo acoso de estos abusones. Tuvo una adaptación televisiva que no he visto, pero que no augura nada bueno.
La primavera de fresa. Un joven recuerda los extraños asesinatos que se sucedieron años atrás cuando estudiaba en una universidad de Nueva Inglaterra. Cuento bastante tonto y previsible donde se ven demasiado las costuras de un escritor que empieza. De los que menos me han gustado de todo el libro.
La cornisa. La sombra de Roald Dalh y su Hombre del sur es alargada. Un ejemplo de lo que es un homenaje y revisión de un clásico. Un tipo por x motivos convence a otro para rodear el edificio donde están por una cornisa a más de 200 metros de altura. Tensión, angustia, pinceladas de humor negro y una paloma muy jodedora. De lo cuentos que más me han gustado. En 1985 se estreno la entretenida película Cat's Eye formada por tres pequeñas historias. Esta es una de ellas.
El hombre de la cortadora de césped. Extraño y fallido relato con criatura mitológica incluida. La idea del extraño que invade tu casa siempre me ha resultado interesante, pero tiene una resolución que creo que roza el ridículo. En 1992 se hizo una película que tomaba el título del relato, una escena y nada más.
Basta S.A. Con este cuento Stephen King demuestra que no solo puede ser un gran escritor de terror, si no que además es un estupendo escrito de relatos de humor. Basta S.A. es un excelente relato de humor negrísimo sobre una técnica radical para dejar de fumar. Muy divertido e irónico. Es otro de los fragmentos de la película Cat's Eye.
Sé lo que necesitas. Una historia de amor frustrada. Una chica siente una extraña atracción por un chico marginado. Este parece adivinar siempre lo que ella necesita para ser feliz. Una historia de amor, desconfianza, algún que otro crimen y que, la verdad, ni me convenció ni me entretuvo especialmente. Bastante anodino. La verdad es que me ha costado bastante recordar de qué iba.
Los chicos del maíz. Uno de los relatos más famosos de Stephen King y que tiene como tema central una de mis preferidos, la pareja urbanita atrapada en un entorno rural lleno de amenazas y cabrones. Una pareja llega a un pueblo donde no hay adultos. Los niños siguen un extraño culto. La huida parece imposible. Un cuento que es Stephen King en estado puro y uno de los mejores del libro. Bien explicado, angustioso y claustrofóbico pese a alguna vacilación en su parte intermedia (como el protagonista explica lo que ocurre en el pueblo está un poco pillado por los pelos) y que no acabe de ser redondo del todo. Origen de una larga, y cada vez peor, saga de películas que allá en los ochenta tuvo bastante popularidad. El primer título tiene más fama que calidad, pero es bastante entretenido a trozos pese a que ha envejecido bastante mal. El resto, mejor olvidarlo.
Y una duda, ¿había visto Stephen King el año anterior el películón de Chicho Ibáñez Serrador ¿Quién puede matar a un niño? y se inspiró en ella para estos chicos?
El último peldaño de la escalera. Un buen relato. La historia de dos hermanos, un momento de angustia que compartieron y la progresiva disolución de su relación. No es un relato de terror. Nos vamos de lleno al drama.
El hombre que amaba las flores. Un hombre joven camina por la calle a buscar unas flores para su amada. La gente reconoce y comparte ese amor que parece destilar el desconocido. Pero las apariencias engañan. Un cuento bastante flojo y previsible en su "sorpresa" final.
Un trago de despedida. Regreso a Salem's Lot y regreso al terror más clásico. Los parroquianos de un bar ver interrumpida su tranquila noche por un hombre que pide ayuda: su mujer y su hija están atrapadas en la nieve en el cruce que lleva a la ciudad de Salem's Lot. Buen cuento de vampiros de aire clásico.
La mujer de la habitación. El relato que cierra el libro. Un hijo ante su madre enferma y una difícil decisión. Un cuento bastante anodino para acabar el libro y que cae de lleno en el melodrama. Para mí, ningún interés.
El umbral de la noche es una correcta colección de relatos en la que en mi opinión destacan aquellos con más sentido del humor o donde el homenaje a formatos como La dimensión desconocida o los cómics de terror es más evidente. No tiene una estructura definida o en ellos un nexo común, pero en su conjunto resulta muy entretenido pese a la variabilidad de la calidad de los relatos. A Stephen King creo que le sienta mejor la larga distancia de la novela para que sus historias y su universo se expanda que el relato ya que en algunos de ellos se notaba que con más hubiera sido mejor (el ejemplo de Los chicos del maíz es perfecto ya que es una buena idea que hubiera necesitado más espacio para crecer). Sea como sea, una buena y entretenida lectura.
"El libro de Jade. Saga Vanir 1" de Lena Valenti
Primer volumen de la conocida saga Vanir, una larga serie de novelas románticas paranormales que a la chita callando ha ido ganando un buen número de lectores y un espacio en las librerías. Una historia de ambiente celta que relata la interminable lucha entre vanirios (que no vampiros) y bersekers (que no hombres lobo) contra vampiros y hombres lobo (ahora sí). Todo claro, con el elemento protagonista de mucha pasión, mucho sexo, muchos buenorros y algunas tortas.
¿De qué va esto? Vale. Por un lado tenemos a Caleb, un vanirio, un ser inmortal y atormentado que está rebueno. Vive obsesionado con la idea de vengarse de una organización científica que tortura e investiga con sus hermanos de raza. Está dispuesto a todo. Hasta a secuestrar, vejar, violar, humillar, herir e intentar destruir psicológicamente a Eileen, la hija del científico jefe. Ella no sabe nada, pero él no la cree. Y así, con la fuerza y el dolor, arranca una difícil relación entre dos protagonistas que los llevará a transitar caminos plagados de mitología, sangre, familias, dolor, arrepentimiento, descubrimiento del amor eterno, páginas de más y en el volúmen que tenía en las manos, una auténtica plaga de errores de edición, faltas de ortografía y frases sin sentido.
Bueno, más o menos. Ya sabéis que hacer resúmenes argumentales no es lo mío.
Una más de las quince novelas que los lectores del blog decidieron que tenía que leer y comentar. Así que me fui con mi mejor sonrisa a la biblioteca y después de ordenar las colecciones de narrativa juvenil y fantasía, pedí el libro, lo trajeron y en un par de tardes me lo leí. Y, bueno, entretener, entretiene, pero como novela es justita, justita, nada original y con una edición tan espantosa que no tendría que haber salido así a la venta. A punto estuve de dejar de leer por culpa del pésimo trabajo de edición y corrección. Con un sencillo trabajo se podrán haber evitado la mayor parte de los errores y faltas. Ignoro si en ediciones posteriores se ha arreglado, pero la edición que leí yo era un espanto.
Y sobre la novela en sí.
Lo dicho antes, entretener, entretiene. Aunque al final se me hizo un poco cuesta arriba, creo que Lena Valenti tiene mano para presentar personajes, giros en la trama y en las escenas sexuales. Crea una dinámica de personajes y una velocidad de narración que invita a pasar páginas y a mantener al lector atento (aunque yo reconozco que por momentos me aburrí ya que también creo que la novela está algo estirada y con algunas páginas menos, hubiera sido mucho más). Pero a la vez la novela presenta largas partes que parecen escritas por otra persona. Me explico.
Durante las primeras cien páginas hay una narración torpe y atropellada con extraños saltos de punto de vista que con posterioridad están mejor trabajados, una acumulación de marcas de objetos (ropa, relojes, teléfonos, etc.) que en mi opinión lastraba la narración, pero que después desaparece para dar paso a descripciones más neutras y efectivas, donde hay una pobreza narrativa que contrasta con la viveza de páginas posteriores, etc. Y esto reaparece en un par de ocasiones más a lo largo de la novela lo que produce en mi opinión una descompensación de tonos y formas en la novela, como si se hubieran unidos dos borradores diferentes o dos estadios distintos de escritura de la novela. El libro de Jade me produjo una sensación de desequilibrio narrativo que me chirrió.
Al igual que la historia. Pese a que el ambiente celta con reminiscencias vikingas prometía interesante, el argumento acabó por terminarse por una amalgama en ocasiones mal cosidas de ideas con procedencia muy distintas. Desde los universos narrativos de J.R. Ward o Sherrilyn Kenyon, hasta sagas como Underworld o Resident Evil, imagineria de cómic, novela romántica y fantasía urbana, etc., en mi opinión esta primera novela de la saga no logra imponer su historia como algo diferente y original quedándose como reflejo de tantas otras.
Y su pareja protagonista no abandonan los patrones de la convencionalidad. Desde el rechazo inicial hasta el posterior enamoramiento (que me resulta poco creíble debido a cómo se conoce la pareja) la relación prosigue unos caminos conocidos y que empiezan a estar algo trillados. Quizá sea la pareja protagonista el punto más débil de la novela, tanto su concepción como en su desarrollo ya que no encuentro en ellos ningún punto que los diferencie de otros protagonistas en otras novelas (y no puedo dejar de pensar en Wrath y Beth, la pareja protagonista de Amante oscuro, salvando las distancias).
Caleb corresponde al prototipo de héroe romántico atormentado. Perfección física, tendencias violentas, celoso, posesivo, pero capaz de un gran arrepentimiento cada vez que mete la caga (y en esta novela lo hace unas cuantas veces y en grados de importancia). Eileen es una de esas protagonistas femeninas perfectas en todo, y que todo lo hacen bien. Amables, cariñosas, duras, hermosas y capaz de revelarse como una gran luchadora con un mínimo de entrenamiento previo (mención merece la escena de la pelea de Eileen contra los hombres lobo; quizá una de las peleas peor narradas que he leído y que redunda en lo que he comentado más arriba, el desequilibrio narrativo que presenta toda la novela. Momentos que están bien contados seguidos de algunos ejecutados de forma muy torpe). Mucho más interesantes resultan los personajes secundarios. Más vivos y mejor resueltos que la pareja protagonista y que imagino protagonizarán los siguientes volúmenes de la serie, en especial Daana.
Pero, pese a todo esto, la novela entretiene. Imagino que a lo largo de los libros siguientes la saga se irá afinando y encontrando su sitio. Creo que Lena Valenti tiene intuición y mano. En la novela se puede apreciar en ciertos momentos (especialmente los más cotidianos y en el tratamiento de los secundarios), pero en general me ha parecido una novela bastante floja. Supongo que esto se debe a una historia convencional, una pareja protagonista muy vista y una estructura vacilante y de calidad muy dispar. Y a esto se le añade una edición con tantas faltas de ortografía, frases sin sentido, mala puntuación, etc., lo que no consigue que la editorial se gane mis simpatías.
Otras opiniones
Un libro para esta noche
Olor a libro nuevo y café
Lecturioseando
"Tormenta" de Jim Butcher
Tormenta, Jim Butcher, La Factoria, 2006
Serie Harry Dresden
Tormenta ha sido una de las alegrías de los quince.
Harry Desden se ha convertido en una ayuda insustituible para la policía de Chicago, porque es el único a quien pueden acudir cuando una investigación entra de lleno en lo paranormal. Es el caso de un doble asesinato con tintes de magia negra. Y detrás de la magia negra siempre hay un mago oscuro. Así es como Harry se encuentra de frente con el lado siniestro de la hechicería. Y lo que parecía un trabajo rutinario se convierte en pesadilla. Ahora van a por él.
Primera entrega de las aventuras y desventuras (intuyo que más de estas últimas) de Harry Dresden y una novela muy divertida y entretenida pese a un argumento algo trillado y cierta previsibilidad. Pero no me ha importado. Como ya dije cuando hice la reseña de Furia venenosa, con el género de fantasía urbana estoy medio vendido. Me pueden repetir el argumento una y otra vez con pocas variantes y me lo trago igual. ¿Por qué? Si fuera reduccionista diría que porque salen monstruos y como salen monstruos, me gusta. Ahondando más diría la mezcla de fantasía y género negro funciona bien y que al ser dos género con los que disfruto y me lo paso bien, no me canso de las mismas estructuras si están explicadas con gracia. En el caso de Jim Butcher, lo están.
A ver, Tormenta no es una maravilla, ni siquiera creo que sea una gran novela. Se notan mucho las costuras de ser una primera novela, el caso que investiga Harry Desden es previsible y para cualquiera que haya leído un poco de novela negra, resulta sencillo desentrelazarlo, adivinar el culpable y cerrar la investigación. Pero...
... pero, el personaje principal, ese tal Harry Dresden, mago profesional, tiene el suficiente carisma y gracia para aguantar una trama débil y convertir la lectura de esta novela en una experiencia muy divertida y que deja ganas de más. Igual que su compañero, la calavera Bob que añade humor, desparpajo y simpatía a la historia. Los personajes secundarios están algo desdibujados, como si en ocasiones fueran meros esbozos, pero no creo que vaya en contra de la lectura por un motivo.
Las serie de fantasía urbana son de largo recorrido. Suelen ser series que pueden llegar con calma a los veinte volúmenes ya que el autor concibe un mundo, unos personajes recurrentes y un protagonista que irán creciendo e interactuando. Y Tormenta, como primera novela, creo que se debe entender como un pórtico a lo que vendrá. La historia en sí es menos importante que la presentación del protagonista y de los secundarios que tendrán importancia en la serie ya sea la detective Karrin Murphy, la periodista, (con la que protagoniza una de las escenas más tensas y divertidas de la novela), la vampiresa o el mafioso local. Meras presentaciones y posibles nucleos argumentales con los favores y los odios que se han creado.Creo que hasta el tercer volumen de una serie de fantasía urbana no se puede hacer una valoración correcta del mundo que el autor ha creado. Es a partir de ese número que las bases ya están claras y podemos empezar a divertirnos.
Por tanto creo que no hay que ser muy duro en la valoración de esta novela porque es un paso previo a lo que será. Entiendo que una valoración de una serie de fantasía urbana se hace con un conjunto de novelas o con arcos narrativos completos. En este caso, Tormenta me parece una novela algo floja, pero a la vez es un pórtico estupendo a lo que presiento es una gran historia y unos buenos personajes. Además, el humor socarrón que recurre las páginas es muy agradecido y aporta un valor añadido a la historia.
Tormenta, pues, ha sido una novela divertida y muy refrescante que llegó en el momento que más la necesitaba después de haber sido condenado a leer mucha morralla. No es una maravilla, no es una gran novela, pero sí es muy divertida, rápida, directa, adulta y adictiva. Me quedo con ganas de leer más de Harry Dresden y ver crecer este mundo.
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Un libro para esta noche
Book eater
Generación reader
No me gustan los números
El blog de Welzen
Serie Harry Dresden
Tormenta ha sido una de las alegrías de los quince.
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Primera entrega de las aventuras y desventuras (intuyo que más de estas últimas) de Harry Dresden y una novela muy divertida y entretenida pese a un argumento algo trillado y cierta previsibilidad. Pero no me ha importado. Como ya dije cuando hice la reseña de Furia venenosa, con el género de fantasía urbana estoy medio vendido. Me pueden repetir el argumento una y otra vez con pocas variantes y me lo trago igual. ¿Por qué? Si fuera reduccionista diría que porque salen monstruos y como salen monstruos, me gusta. Ahondando más diría la mezcla de fantasía y género negro funciona bien y que al ser dos género con los que disfruto y me lo paso bien, no me canso de las mismas estructuras si están explicadas con gracia. En el caso de Jim Butcher, lo están.
A ver, Tormenta no es una maravilla, ni siquiera creo que sea una gran novela. Se notan mucho las costuras de ser una primera novela, el caso que investiga Harry Desden es previsible y para cualquiera que haya leído un poco de novela negra, resulta sencillo desentrelazarlo, adivinar el culpable y cerrar la investigación. Pero...
... pero, el personaje principal, ese tal Harry Dresden, mago profesional, tiene el suficiente carisma y gracia para aguantar una trama débil y convertir la lectura de esta novela en una experiencia muy divertida y que deja ganas de más. Igual que su compañero, la calavera Bob que añade humor, desparpajo y simpatía a la historia. Los personajes secundarios están algo desdibujados, como si en ocasiones fueran meros esbozos, pero no creo que vaya en contra de la lectura por un motivo.
Las serie de fantasía urbana son de largo recorrido. Suelen ser series que pueden llegar con calma a los veinte volúmenes ya que el autor concibe un mundo, unos personajes recurrentes y un protagonista que irán creciendo e interactuando. Y Tormenta, como primera novela, creo que se debe entender como un pórtico a lo que vendrá. La historia en sí es menos importante que la presentación del protagonista y de los secundarios que tendrán importancia en la serie ya sea la detective Karrin Murphy, la periodista, (con la que protagoniza una de las escenas más tensas y divertidas de la novela), la vampiresa o el mafioso local. Meras presentaciones y posibles nucleos argumentales con los favores y los odios que se han creado.Creo que hasta el tercer volumen de una serie de fantasía urbana no se puede hacer una valoración correcta del mundo que el autor ha creado. Es a partir de ese número que las bases ya están claras y podemos empezar a divertirnos.
Por tanto creo que no hay que ser muy duro en la valoración de esta novela porque es un paso previo a lo que será. Entiendo que una valoración de una serie de fantasía urbana se hace con un conjunto de novelas o con arcos narrativos completos. En este caso, Tormenta me parece una novela algo floja, pero a la vez es un pórtico estupendo a lo que presiento es una gran historia y unos buenos personajes. Además, el humor socarrón que recurre las páginas es muy agradecido y aporta un valor añadido a la historia.
Tormenta, pues, ha sido una novela divertida y muy refrescante que llegó en el momento que más la necesitaba después de haber sido condenado a leer mucha morralla. No es una maravilla, no es una gran novela, pero sí es muy divertida, rápida, directa, adulta y adictiva. Me quedo con ganas de leer más de Harry Dresden y ver crecer este mundo.
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"La era de Drácula" de Kim Newman
La era de Drácula, Kim Newman, Alamut, 2010
Creo que en algunos países está prohibido pasárselo tan bien con un libro.
1885. Van Helsing y sus compañeros no consiguen derrotar al monstruo conocido como Drácula. Por ese funesto error, su cabeza está en una pica frente al palacio de Buckingham. Drácula se ha convertido en el príncipe consorte, se puede encontrar a sus enemigos empalados por las calles de Londres, la nobleza se vampiriza imitando a la casa real y las clases bajas hacen lo mismo. Poco a poco los llamados "cálidos" lo tienen más difícil para tener una vida algo normal y los vampiros de clase más baja están cada vez más degradados. Pero entonces una serie de horribles crímenes sacude Londres; un asesino que descuartiza a prostitutas vampiras en el barrio de Whitechapel y al que bautizan Cuchillo de plata y amenaza con desestabilizar el nuevo sistema social.
Después de la intensidad emocional y literaria que me supuso la lectura de Ante el espejo de Veniamín Kaverin (novela de la que hablaré en cuanto me haya recuperado) necesitaba puro escapismo, juego y entretenimiento. Y rebuscando en la biblioteca de casa entre los centenares de volúmenes que dormitan en los anaqueles, me encuentro con el libro que A. me compró el pasado Sant Jordi. Drácula, el Destripador y un escritor que con todo lo que he leído de él me lo ha hecho pasar muy bien (una reseña de su obra, aquí). Pues venga. Y en un par de días, leída. Después de la intensidad rusa, la diversión, el escapismo, la sátira de tintes algo gruesos, el pastiche, la referencia y la innegable calidad de la propuesta de Kim Newman era justo lo que necesitaba. Lo dicho, y pese a todos los peros que se le pueden poner a La era de Drácula, qué bien me lo he pasado.
Kin Newman nos presenta una realidad alternativa, una dimensión donde la frontera entre la época victoriana real y la literaria han desaparecido y se han convertido en un todo. Donde Lestrade y Abberline comparten oficina en Scotland Yard, donde encontramos a un vampirizado Oscar Wilde en una fiesta o contamos con la ayuda de los extraños doctores en medicina Jekyll y Moreau para investigar unos crímenes. Y pese a que en algún momento la referencia, el personaje o el juego cae en lo gratuito y no acaba de aportar a la historia, me gustaría destacar de esta propuesta lo natural y "realista" que acaba siendo el resultado. Funciona. Y funciona muy bien. Como lector que me ha resultado ni raro ni forzado, sino que este universo alternativo discurre con una normalidad apabullante. Y esto se consigue gracias a que se percibe
1. El amor que Kim Newman tiene por la novela de terror, la novela decimonónica y toda una época literaria que dio al mundo verdaderas obras de arte de cuya influencia aun estamos empapados (no es solo Drácula, tambien son las obras de Stevenson, de H.G. Wells, de Le Fanu, Wilde, Shaw, Potter, Conan Doyle, etc.). Y por la figura del conde, cuya presencia en la novela se reduce a un solo capítulo, pero cuya sombra domina cada una de las páginas.
2. El profundo conocimiento de la época victoriana en sus niveles políticos y sociales. Y sus contradicciones, claro. Los movimientos religiosos, reformistas. Los profundos abismos de diferencias de clase, etc.
3. Pese a alguna vacilación, algún diálogo algo forzado, algún vacío narrativo, lo excelente de la prosa de Newman conjugando todos estos factores en un pastiche narrativo que funciona con naturalidad y en la creación de una novela muy divertida y entretenida que funciona a muchos niveles; el homenaje, la parodia, la novela de terror, la sátira social y literaria, etc.
Lo estupendo de esta novela es que no se queda en el mero juego de referencias, sino que construye una historia muy interesante que le sirve para hablar del racismo, la explotación, la ignorancia o la superstición. Una investigación, unos crímenes, una reimaginación histórica y literaria.
Y la siempre fascinante Geneviève Sandrine d'Isle Dieudonné, una prima lejana de aquella otra Geneviève Dieudonné que aparece en las novelas de Warhammer. Una vampira antigua con un cuerpo de dieciséis años proviniente de un linaje vampírico que la aleja de Drácula (interesante la idea de diferentes linajes de vampiros siendo el del conde el más corrupto y degradado). ¿Algo gratuito nombrar a este personaje cuando no menciono a ningún otro? Sí, pero es que tengo debilidad por este carácter en cualquiera de sus encarnaciones.
La era de Drácula es una divertida, entretenida y muy fascinante novela de aventuras que sabre recrear y jugar con una época histórica y literaria. Un puro entretenimiento de género excelentemente construido que me ha proporcionado una excelente horas de diversión. Si no me extiendo más en personajes y trama es por el convencimiento de que quien quiera adentrarse en esta obra tiene que hacerlo sin saber mucho de ella para irse topando con las sorpresas, los giros y con una historia mínima que se mantiene muy bien. Una buena novela vampírica y un excelente entretenimiento de uno de esos autores que me gusta seguir de cerca y que me caen la mar de bien.
Y solo me queda pedir a Alamut que se lance a la reedición de El sangriento barón rojo y la publicación de Judgement of tears para completar esta trilogía sobre Drácula (tranquilos, de lectura independiente), así como las novelas del Club Diogenes o, qué demonios, cualquier cosas de Newman. Con su obra la diversión está asegurada.
Otras opiniones
Sagacómic
Fantasy mundo
Creo que en algunos países está prohibido pasárselo tan bien con un libro.
1885. Van Helsing y sus compañeros no consiguen derrotar al monstruo conocido como Drácula. Por ese funesto error, su cabeza está en una pica frente al palacio de Buckingham. Drácula se ha convertido en el príncipe consorte, se puede encontrar a sus enemigos empalados por las calles de Londres, la nobleza se vampiriza imitando a la casa real y las clases bajas hacen lo mismo. Poco a poco los llamados "cálidos" lo tienen más difícil para tener una vida algo normal y los vampiros de clase más baja están cada vez más degradados. Pero entonces una serie de horribles crímenes sacude Londres; un asesino que descuartiza a prostitutas vampiras en el barrio de Whitechapel y al que bautizan Cuchillo de plata y amenaza con desestabilizar el nuevo sistema social.
Después de la intensidad emocional y literaria que me supuso la lectura de Ante el espejo de Veniamín Kaverin (novela de la que hablaré en cuanto me haya recuperado) necesitaba puro escapismo, juego y entretenimiento. Y rebuscando en la biblioteca de casa entre los centenares de volúmenes que dormitan en los anaqueles, me encuentro con el libro que A. me compró el pasado Sant Jordi. Drácula, el Destripador y un escritor que con todo lo que he leído de él me lo ha hecho pasar muy bien (una reseña de su obra, aquí). Pues venga. Y en un par de días, leída. Después de la intensidad rusa, la diversión, el escapismo, la sátira de tintes algo gruesos, el pastiche, la referencia y la innegable calidad de la propuesta de Kim Newman era justo lo que necesitaba. Lo dicho, y pese a todos los peros que se le pueden poner a La era de Drácula, qué bien me lo he pasado.
Kin Newman nos presenta una realidad alternativa, una dimensión donde la frontera entre la época victoriana real y la literaria han desaparecido y se han convertido en un todo. Donde Lestrade y Abberline comparten oficina en Scotland Yard, donde encontramos a un vampirizado Oscar Wilde en una fiesta o contamos con la ayuda de los extraños doctores en medicina Jekyll y Moreau para investigar unos crímenes. Y pese a que en algún momento la referencia, el personaje o el juego cae en lo gratuito y no acaba de aportar a la historia, me gustaría destacar de esta propuesta lo natural y "realista" que acaba siendo el resultado. Funciona. Y funciona muy bien. Como lector que me ha resultado ni raro ni forzado, sino que este universo alternativo discurre con una normalidad apabullante. Y esto se consigue gracias a que se percibe
1. El amor que Kim Newman tiene por la novela de terror, la novela decimonónica y toda una época literaria que dio al mundo verdaderas obras de arte de cuya influencia aun estamos empapados (no es solo Drácula, tambien son las obras de Stevenson, de H.G. Wells, de Le Fanu, Wilde, Shaw, Potter, Conan Doyle, etc.). Y por la figura del conde, cuya presencia en la novela se reduce a un solo capítulo, pero cuya sombra domina cada una de las páginas.
2. El profundo conocimiento de la época victoriana en sus niveles políticos y sociales. Y sus contradicciones, claro. Los movimientos religiosos, reformistas. Los profundos abismos de diferencias de clase, etc.
3. Pese a alguna vacilación, algún diálogo algo forzado, algún vacío narrativo, lo excelente de la prosa de Newman conjugando todos estos factores en un pastiche narrativo que funciona con naturalidad y en la creación de una novela muy divertida y entretenida que funciona a muchos niveles; el homenaje, la parodia, la novela de terror, la sátira social y literaria, etc.
Lo estupendo de esta novela es que no se queda en el mero juego de referencias, sino que construye una historia muy interesante que le sirve para hablar del racismo, la explotación, la ignorancia o la superstición. Una investigación, unos crímenes, una reimaginación histórica y literaria.
Y la siempre fascinante Geneviève Sandrine d'Isle Dieudonné, una prima lejana de aquella otra Geneviève Dieudonné que aparece en las novelas de Warhammer. Una vampira antigua con un cuerpo de dieciséis años proviniente de un linaje vampírico que la aleja de Drácula (interesante la idea de diferentes linajes de vampiros siendo el del conde el más corrupto y degradado). ¿Algo gratuito nombrar a este personaje cuando no menciono a ningún otro? Sí, pero es que tengo debilidad por este carácter en cualquiera de sus encarnaciones.
La era de Drácula es una divertida, entretenida y muy fascinante novela de aventuras que sabre recrear y jugar con una época histórica y literaria. Un puro entretenimiento de género excelentemente construido que me ha proporcionado una excelente horas de diversión. Si no me extiendo más en personajes y trama es por el convencimiento de que quien quiera adentrarse en esta obra tiene que hacerlo sin saber mucho de ella para irse topando con las sorpresas, los giros y con una historia mínima que se mantiene muy bien. Una buena novela vampírica y un excelente entretenimiento de uno de esos autores que me gusta seguir de cerca y que me caen la mar de bien.
Y solo me queda pedir a Alamut que se lance a la reedición de El sangriento barón rojo y la publicación de Judgement of tears para completar esta trilogía sobre Drácula (tranquilos, de lectura independiente), así como las novelas del Club Diogenes o, qué demonios, cualquier cosas de Newman. Con su obra la diversión está asegurada.
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Sagacómic
Fantasy mundo
"Furia venenosa" de Marika Gallman
Furia venenosa, Marika Gallman, Libros de seda, 2013
Serie Maeve Regan 1
Presentación y puesta de largo de editorial y autora en este blog (dato: la autora en verdad se llama Marika Gallman aunque en la edición española de su obra aparezca Marita. Se admiente apuestas, ¿errata o el nombre "sonaba mal"? Sea como sea, estas cosas no se hacen).
Maeve Regan, bajita, borde y malhablada. Va a la universidad sin ser una alumna brillante, sin pareja fija, noches de juerga y gusto por las bebidas fuertes. Único familiar, un abuelo que no destaca por su cariño. Y amigos, Elliot con quien tuvo una historia y ahora existe una fuerte tensión y Brianne que vive atrapada en una relación destructiva. Por medio, la novia de Elliot, la perfecta muñequita de Tara. Nada especial, la verdad. Pero una noche se va con un tipo muy atractivo llamado Luke en un arrebato de pasión la muerde... y empieza a vomitar. Y descubre que su abuelo no le ha dicho la verdad sobre la desaparición de su familia. Y el tipo atractivo reaparece, la secuestra y, ¿qué demonios? ¿es eso un vampiro? Vamos, que una semana que empieza mal puede acabar siendo una semana de mierda.
Furia venenosa es una novela de fantasía urbana la mar de entretenida, distraída y agradable de leer. Tengo que reconocer que con este género voy medio vendido. No lo puedo evitar, las historias de aventuras con heroínas bajitas, bordes y malhabladas son una de mis debilidades. Y Maeve Regan es una buena heroína; dura, alejada de los clichés de princesita en apuro, con tendencia a equivocarse, orgullosa, borde y a la que le suda un huevo la opinión de los demás. Por supuesto que tiene un centro sensible, pero no deja que esto la catatonice ni acabe convirtiéndola en una pavisosa en el momento en que el prota se quita la camiseta. Es una protagonista con carisma con la que el lector puede encariñarse con facilidad y que sostiene con dignidad una historia bastante tópica (más abajo amplío esto), pero escrita con un estilo rápido, conciso y ajustado que hace que la lectura sea agradable y, por momentos, tensa. Ah, y con una tendencia a la ira, la violencia y la maldad muy acusadas. Maeve se aleja de los "buenos" para adentrarse en un territorio gris que la hace muy interesante y que consigue diferenciarla de otras heroinas que por mucho que pasen, siempre serán las buenas.
¿Problemas? Los personajes secundarios, en especial los tres amigos, quedan desdibujados y se echa de menos el mismo cuidado que ha puesto Marika Gallman en los principales. Especialmente flagrante es el caso de Elliot, un quiero zumbarme a la prota sin dejar a mi novia que crispa, molesta y entran ganas de arrancarle la cabeza y mandarla de viaje a un lugar muy oscuro y estrecho. Eso provoca que el intento de triángulo amoroso de la autora (bueno, en rigor es un cuarteto) quede descompensado y cojo. No se puede construir un triángulo si uno de los lados es tan débil e inconsistente. Y es que, seamos sinceros, no se puede competir con el cabrón de Luke (buen personaje, pero que sigue las pautas de otros machotes del género). Eso sí, y que nadie se lleve a escándalos, este apunte de triángulo no vertebra ni es centro de la novela. Es un elemento más que aunque no molesta, en alguna página despista.
Y lo que podría ser el principal handicap para muchos lectores: la novela no tiene un solo punto original que la diferencie de otras novelas de fantasía urbana. Están todos los elementos (secretos, machote, tensión sexual, entrenamiento, maloso, más secretos, enfrentamiento, más tensión sexual, luchas, cabreos, muchísima tensión sexual que al final estalla y... no, en esta novela no hay escena de sexo, etc.) colocados en el mismo orden y conducidos de la misma forma. Quien espere algo diferente, no es su novela. El mismo cuento que conocemos, sí, pero explicado con gracia.
A mí me ha gustado. Sin entusiasmo, de acuerdo, pero con el suficiente como para pasar un par de tardes muy entretenido, ganas de leer su continuación y conservar un recuerdo más que agradable. ¿La recomiendo? Sí, es un novela muy entretenida, bien escrita y con protagonista malhablada. A mí me vale.
Y sirve para ampliar fronteras y leer algo de fantasía urbana no anglosajona. Esta novela nos sirve para saber que en Suiza se produce algo más que novela policíaca llena de crítica social, secretos de pueblo y asesinos muy correctos.
Serie Maeve Regan 1
Presentación y puesta de largo de editorial y autora en este blog (dato: la autora en verdad se llama Marika Gallman aunque en la edición española de su obra aparezca Marita. Se admiente apuestas, ¿errata o el nombre "sonaba mal"? Sea como sea, estas cosas no se hacen).
Maeve Regan, bajita, borde y malhablada. Va a la universidad sin ser una alumna brillante, sin pareja fija, noches de juerga y gusto por las bebidas fuertes. Único familiar, un abuelo que no destaca por su cariño. Y amigos, Elliot con quien tuvo una historia y ahora existe una fuerte tensión y Brianne que vive atrapada en una relación destructiva. Por medio, la novia de Elliot, la perfecta muñequita de Tara. Nada especial, la verdad. Pero una noche se va con un tipo muy atractivo llamado Luke en un arrebato de pasión la muerde... y empieza a vomitar. Y descubre que su abuelo no le ha dicho la verdad sobre la desaparición de su familia. Y el tipo atractivo reaparece, la secuestra y, ¿qué demonios? ¿es eso un vampiro? Vamos, que una semana que empieza mal puede acabar siendo una semana de mierda.
Furia venenosa es una novela de fantasía urbana la mar de entretenida, distraída y agradable de leer. Tengo que reconocer que con este género voy medio vendido. No lo puedo evitar, las historias de aventuras con heroínas bajitas, bordes y malhabladas son una de mis debilidades. Y Maeve Regan es una buena heroína; dura, alejada de los clichés de princesita en apuro, con tendencia a equivocarse, orgullosa, borde y a la que le suda un huevo la opinión de los demás. Por supuesto que tiene un centro sensible, pero no deja que esto la catatonice ni acabe convirtiéndola en una pavisosa en el momento en que el prota se quita la camiseta. Es una protagonista con carisma con la que el lector puede encariñarse con facilidad y que sostiene con dignidad una historia bastante tópica (más abajo amplío esto), pero escrita con un estilo rápido, conciso y ajustado que hace que la lectura sea agradable y, por momentos, tensa. Ah, y con una tendencia a la ira, la violencia y la maldad muy acusadas. Maeve se aleja de los "buenos" para adentrarse en un territorio gris que la hace muy interesante y que consigue diferenciarla de otras heroinas que por mucho que pasen, siempre serán las buenas.
¿Problemas? Los personajes secundarios, en especial los tres amigos, quedan desdibujados y se echa de menos el mismo cuidado que ha puesto Marika Gallman en los principales. Especialmente flagrante es el caso de Elliot, un quiero zumbarme a la prota sin dejar a mi novia que crispa, molesta y entran ganas de arrancarle la cabeza y mandarla de viaje a un lugar muy oscuro y estrecho. Eso provoca que el intento de triángulo amoroso de la autora (bueno, en rigor es un cuarteto) quede descompensado y cojo. No se puede construir un triángulo si uno de los lados es tan débil e inconsistente. Y es que, seamos sinceros, no se puede competir con el cabrón de Luke (buen personaje, pero que sigue las pautas de otros machotes del género). Eso sí, y que nadie se lleve a escándalos, este apunte de triángulo no vertebra ni es centro de la novela. Es un elemento más que aunque no molesta, en alguna página despista.
Y lo que podría ser el principal handicap para muchos lectores: la novela no tiene un solo punto original que la diferencie de otras novelas de fantasía urbana. Están todos los elementos (secretos, machote, tensión sexual, entrenamiento, maloso, más secretos, enfrentamiento, más tensión sexual, luchas, cabreos, muchísima tensión sexual que al final estalla y... no, en esta novela no hay escena de sexo, etc.) colocados en el mismo orden y conducidos de la misma forma. Quien espere algo diferente, no es su novela. El mismo cuento que conocemos, sí, pero explicado con gracia.
A mí me ha gustado. Sin entusiasmo, de acuerdo, pero con el suficiente como para pasar un par de tardes muy entretenido, ganas de leer su continuación y conservar un recuerdo más que agradable. ¿La recomiendo? Sí, es un novela muy entretenida, bien escrita y con protagonista malhablada. A mí me vale.
Y sirve para ampliar fronteras y leer algo de fantasía urbana no anglosajona. Esta novela nos sirve para saber que en Suiza se produce algo más que novela policíaca llena de crítica social, secretos de pueblo y asesinos muy correctos.
Portada original.
Cómo me gustan esas posturas imposibles con el pecho pa'lante y el arma a punto.
Otras opiniones
Libros a medias III
Pertenezco a ese grupo de personas a los que no remuerde la conciencia abandonar un libro por la mitad, a la página 50 o a tres páginas de su final. Si no me interesa, a otra cosa. La vida es corta y los libros muchos para malgastarlos con lecturas que no me gustan. Entiendo que esta valoración que hago es injusta e imparcial, pero solo me centro en las páginas leídas. Si luego la historia mejora o no mejora, no lo sé. Lo único que puedo decir es que lo leído me ha hecho abandonar la novela.
Abrasada. La casa de la noche VI o VII, P.C. Cast y Kristin Cast, Trakatá, 2011
Pues sí, aquí donde me veis me he leído muchos volúmenes de la serie La casa de la noche de las Cast. He leído una y otra vez como Zoey salva el mundo cada quince/veinte minutos y vive cuitas amorosas con muchachos de buen ver de muy distinto pelaje. Y reconozco que lo pasé bien. Es una serie divertida e irritante por partes iguales, capaz de alternar grandes momentos de acción o emocionales con pasajes de tedio infinito y lagunas argumentales. Y lo mejor es la evolución del personaje de Zoey de pavisosa irritante y molesta a hermosa muchacha madura con un punto de tristeza. Y se agradece la alegría sexual y que los protagonistas y las protagonistas sientan como normales tener deseos sexuales y que gustan más de un chico. Pero... Ya basta. En serio. Basta. Empezar la lectura de Abrasada fue asistir a lo mismo de los anteriores volúmenes... se ha roto la magia. La historia de Kalona, los cuervos, los malos, la molesta chupi pandi de Zoey... ya no tiene gracia. La trama de La casa de la noche ya me parece estirada hasta la nausea y merece un descanso o que se desenchufe la máquina. Abrasada no aportaba nada y, sinceramente, me aburrió porque me encontré los mismos motivos, explicados de la misma forma y con los conflictos que nos han acompañado desde aquel irritante primer volumen.
The Blessed, Tonya Hurley, Alfaguara, 2012
No he leído la famosa serie de Ghostgirl así que las ciento cincuenta páginas que he me he tragado de The Blessed es lo primero que leo de Tonya Hurley. Y después de leerlas, puedo decir que no creo que me acerque a más novelas de esta autora. No me ha gustado y considero que esta historia moderna de redención y santidad no me interesa, ni funciona, ni me la creo. Tres pecadoras, un muchacho guapo llamado Sebastian, una reinvención del martirio de tres santas, una novela sobre lo guay que es el cristianismo. Lo siento, una de las cosas que más me molestan de una novela es que me adoctrinen o me intenten convencer. Soy consciente de que no existe el arte inocente y que toda expresión artística es trasmisión de ideas, pero cuando me lo hacen de una forma tan burda y descarada me molesta mucho. Y de sutilidad en The Blessed hay muy poco. Personajes extremos muy poco matizados y un avance a trompicones con una aire de folletín de mediodía que crispa. Amén de encontrarlo bastante pretencioso ya que la impresión que me ha dado es que la autora quería hacer ARTE y se ha quedado en la primera letra. No le niego cierta gracia en el diálogo, pero no pasa de aquí. Muy irritante.
Ojos negros, William Ritcher, Blok (Ediciones B de toda la vida), 2012
Thriller. Investigación. Secretos. No empieza mal. Un principio algo tramposillo, pero vamos, no pasa nada. Se presenta una novela movida con una protagonista que vive en la calle y que tendrá que conocer su pasado para hacer frente a una amenaza. No está mal, pero me pilla en unos días sin paciencia y cae en uno de los elementos narrativos que más me molestan e irritan y cabrean. ¿Cuál? La casualidad. Me parece un recurso fácil, cómodo, molesto y perezoso. La prota va a un barrio donde no ha estado nunca, donde no conoce a nadie, entra en una tienda donde no ha puesto los pies en su vida y, casualmente, hay un sobre para ella que le desvelará detalles de su origen. No. No. No. Esto no. Aunque luego me lo justifiques con un "yo sabía quien eras y te envíe allí con toda la intención y bla bla bla". Este tipo de piruetas narrativas no me las creo y las considero muy peligrosas y me demuestran algo de pereza en el escritor. ¿Poca cosa para dejar un libro? En el momento en que la credibilidad de la historia que te están explicando se desmorona, ¿para qué seguir?
Malditos, Josephine Angelini, Roca, 2012
Predestinados fue, junto con las reseñas de las novelas de Patchito y Norita, la novela por la que más comentarios hirientes he recibido y por la que más mails insultándome han aparecido en mi bandeja de entrada. Lo que no deja de ser curioso porque mi opinión sobre Predestinados no es negativa. La considero una novela agradable y entretenida. Vale que no aporta nada al género y le sobran unas sesenta páginas, pero se lee bien y no aburre. En cambio, en mi opinión, Malditos no se sostiene. Empecé a leerla y me di cuenta de que mi interés por la historia de Helena y Lucas se quedó en la primera parte y que esta segunda no me aportaba nada nuevo. La iba leyendo con el piloto automático puesto y no podía evitar que mi atención se fuera derivando a lo graciosos que son mis gatos, cómo crece la pared o si me han mandado un mensaje al móvil. Cuando pasa esto, peligro peligro. Y, por cierto, ¿por qué en el noventa por ciento de las novelas en la segunda parte los protagonistas tienen que estar chochos el uno por el otro, pero no verse o verse poco, desear olvidarse, pero cuando se encuentran se calientan hasta derretir las paredes, pero llega un momento en que uno de los dos mira al otro mal, así como en diagonal y como diciendo "que te meto" y entonces todo es preocupación porque me ha olvidado? ¿Tan pocos recursos narrativos tenemos?
Buscaré el océano, Carrie Ryan, Montena, 2012
De las cinco novelas que apunto aquí, la única que volvería a intentar leer es esta Buscaré el océano (que, por cierto, mucho más bonito su título original, ese Bosque de manos y dientes. ¿Por qué esa manía de cambiar títulos? Y más como en casos como este dicen y aportan mucho de la novela que titulan). El problema fue la proximidad de las vacaciones escolares, los cuadernos de verano, las orejas que asoman de la campaña de texto... Total, que no estaba por la labor y no conecté con la propuesta de Carrie Ryan. Se me hizo cuesta arriba el conflicto de Mary. Y eso que la idea de la aldea aislada con sus normas cabronas y los muertos que caminan de aquí para allá a ver si pillan un buen vivo que llevarse a la boca me gusta. No sé... Es un libro que permanece en la estantería mirándome y pidiendo una segunda oportunidad. Y puede que se la de.
Abrasada. La casa de la noche VI o VII, P.C. Cast y Kristin Cast, Trakatá, 2011
Pues sí, aquí donde me veis me he leído muchos volúmenes de la serie La casa de la noche de las Cast. He leído una y otra vez como Zoey salva el mundo cada quince/veinte minutos y vive cuitas amorosas con muchachos de buen ver de muy distinto pelaje. Y reconozco que lo pasé bien. Es una serie divertida e irritante por partes iguales, capaz de alternar grandes momentos de acción o emocionales con pasajes de tedio infinito y lagunas argumentales. Y lo mejor es la evolución del personaje de Zoey de pavisosa irritante y molesta a hermosa muchacha madura con un punto de tristeza. Y se agradece la alegría sexual y que los protagonistas y las protagonistas sientan como normales tener deseos sexuales y que gustan más de un chico. Pero... Ya basta. En serio. Basta. Empezar la lectura de Abrasada fue asistir a lo mismo de los anteriores volúmenes... se ha roto la magia. La historia de Kalona, los cuervos, los malos, la molesta chupi pandi de Zoey... ya no tiene gracia. La trama de La casa de la noche ya me parece estirada hasta la nausea y merece un descanso o que se desenchufe la máquina. Abrasada no aportaba nada y, sinceramente, me aburrió porque me encontré los mismos motivos, explicados de la misma forma y con los conflictos que nos han acompañado desde aquel irritante primer volumen.
The Blessed, Tonya Hurley, Alfaguara, 2012
No he leído la famosa serie de Ghostgirl así que las ciento cincuenta páginas que he me he tragado de The Blessed es lo primero que leo de Tonya Hurley. Y después de leerlas, puedo decir que no creo que me acerque a más novelas de esta autora. No me ha gustado y considero que esta historia moderna de redención y santidad no me interesa, ni funciona, ni me la creo. Tres pecadoras, un muchacho guapo llamado Sebastian, una reinvención del martirio de tres santas, una novela sobre lo guay que es el cristianismo. Lo siento, una de las cosas que más me molestan de una novela es que me adoctrinen o me intenten convencer. Soy consciente de que no existe el arte inocente y que toda expresión artística es trasmisión de ideas, pero cuando me lo hacen de una forma tan burda y descarada me molesta mucho. Y de sutilidad en The Blessed hay muy poco. Personajes extremos muy poco matizados y un avance a trompicones con una aire de folletín de mediodía que crispa. Amén de encontrarlo bastante pretencioso ya que la impresión que me ha dado es que la autora quería hacer ARTE y se ha quedado en la primera letra. No le niego cierta gracia en el diálogo, pero no pasa de aquí. Muy irritante.
Ojos negros, William Ritcher, Blok (Ediciones B de toda la vida), 2012
Thriller. Investigación. Secretos. No empieza mal. Un principio algo tramposillo, pero vamos, no pasa nada. Se presenta una novela movida con una protagonista que vive en la calle y que tendrá que conocer su pasado para hacer frente a una amenaza. No está mal, pero me pilla en unos días sin paciencia y cae en uno de los elementos narrativos que más me molestan e irritan y cabrean. ¿Cuál? La casualidad. Me parece un recurso fácil, cómodo, molesto y perezoso. La prota va a un barrio donde no ha estado nunca, donde no conoce a nadie, entra en una tienda donde no ha puesto los pies en su vida y, casualmente, hay un sobre para ella que le desvelará detalles de su origen. No. No. No. Esto no. Aunque luego me lo justifiques con un "yo sabía quien eras y te envíe allí con toda la intención y bla bla bla". Este tipo de piruetas narrativas no me las creo y las considero muy peligrosas y me demuestran algo de pereza en el escritor. ¿Poca cosa para dejar un libro? En el momento en que la credibilidad de la historia que te están explicando se desmorona, ¿para qué seguir?
Malditos, Josephine Angelini, Roca, 2012
Predestinados fue, junto con las reseñas de las novelas de Patchito y Norita, la novela por la que más comentarios hirientes he recibido y por la que más mails insultándome han aparecido en mi bandeja de entrada. Lo que no deja de ser curioso porque mi opinión sobre Predestinados no es negativa. La considero una novela agradable y entretenida. Vale que no aporta nada al género y le sobran unas sesenta páginas, pero se lee bien y no aburre. En cambio, en mi opinión, Malditos no se sostiene. Empecé a leerla y me di cuenta de que mi interés por la historia de Helena y Lucas se quedó en la primera parte y que esta segunda no me aportaba nada nuevo. La iba leyendo con el piloto automático puesto y no podía evitar que mi atención se fuera derivando a lo graciosos que son mis gatos, cómo crece la pared o si me han mandado un mensaje al móvil. Cuando pasa esto, peligro peligro. Y, por cierto, ¿por qué en el noventa por ciento de las novelas en la segunda parte los protagonistas tienen que estar chochos el uno por el otro, pero no verse o verse poco, desear olvidarse, pero cuando se encuentran se calientan hasta derretir las paredes, pero llega un momento en que uno de los dos mira al otro mal, así como en diagonal y como diciendo "que te meto" y entonces todo es preocupación porque me ha olvidado? ¿Tan pocos recursos narrativos tenemos?
Buscaré el océano, Carrie Ryan, Montena, 2012
De las cinco novelas que apunto aquí, la única que volvería a intentar leer es esta Buscaré el océano (que, por cierto, mucho más bonito su título original, ese Bosque de manos y dientes. ¿Por qué esa manía de cambiar títulos? Y más como en casos como este dicen y aportan mucho de la novela que titulan). El problema fue la proximidad de las vacaciones escolares, los cuadernos de verano, las orejas que asoman de la campaña de texto... Total, que no estaba por la labor y no conecté con la propuesta de Carrie Ryan. Se me hizo cuesta arriba el conflicto de Mary. Y eso que la idea de la aldea aislada con sus normas cabronas y los muertos que caminan de aquí para allá a ver si pillan un buen vivo que llevarse a la boca me gusta. No sé... Es un libro que permanece en la estantería mirándome y pidiendo una segunda oportunidad. Y puede que se la de.
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