Sigo con las novelas del reto.
Iré rápido porque no vale la pena perder el tiempo con esta novela. He tardado tanto en ponerme a escribir esta reseña o comentario porque me daba una pereza terrible (mezclada con cierta ira) perder unos minutos que podría dedicar a cosas más fructíferas.
Iré rápido porque no vale la pena perder el tiempo con esta novela. He tardado tanto en ponerme a escribir esta reseña o comentario porque me daba una pereza terrible (mezclada con cierta ira) perder unos minutos que podría dedicar a cosas más fructíferas.
Antes de continuar quiero dejar bien claro un punto para que no hayan polémica a las que no entraré o malentendidos. No tengo nada en contra de los fafics. Nada. No soy consumidor del género y, por tanto, no puedo juzgar la ingente cantidad de producción que existe. Estoy convencido que hay fanfics valiosos, bien escritos, con gracia y técnica. Que haya dado la casualidad de que los que he leído sean todos un horror, no hace que desestime el género en su conjunto. En serio.
Dicho esto, Los sueños se cumplen es un horror. De nuevo una novela que tal como está no debería haber llegado nunca a las librerías y hacer pagar 14,95 euros por el (u 8,99 en su versión ebook). Una prosa inmadura, poco trabajada, sin corrección ni revisionado (vamos, como lo que yo escribía con diez años). Una novela que ha pasado tal cual estaba en wattpad (imagino que con algún cambio menor) al papel sin que un editor de verdad hiciera nada con ella. Una pura operación comercial, legítima que aquí Alfaguara ha venido a ganar dinero, que con el mínimo gasto consiga una ventas decentes arrancando el dinero a los fans de un youtuber. No existe una mínima preocupación literaria, ni en forma ni en fondo. Esto es para hacer un dinero aprovechando que los youtubers y wattpad están de moda y ya está.
La prota se muda de ciudad y descubre que su vecino es su youtuber favorito y se enamoran y salen de la mano y hace tonterías de reir y se pelean y luego hacen el amor en una bochornosa escena y se vuelven a pelear y...
Vamos, lo de siempre. Exactamente lo de siempre. Y con las cosas de siempre. Dejarlo todo por amor. Victimismo. Celos y posesión. Manipulación. Chantajes emocionales y todos los etcéteras que queráis. ¿Esas historias de amores tóxicos y manipuladores elevados a la quintaesencia del amor romántico? Pues dos tazas. A veces me pregunto si todos estos famosos que inspiran fanpics leen alguna de estas historias y, en ésta en concreto, qué debe opinar el protagonista de verse convertido en un tipo celoso, manipulador y con tendencia al insulto y la amenaza fácil. Y otra pregunta, ¿de verdad parece que la única forma de crear conflicto y tensión en una novela de aire romántico es convertir la relación en una pesadilla de malentendidos y crueldades mútuas? ¿Esto es todo? ¿En serio? Porque de este tipo de historias llevo una cuantas y es muy preocupante, la verdad.
Además, resulta chocante la frivolidad con la que se tratan temas como el acoso escolar, las pulsiones suicidas de adolescentes, el maltrato... supongo que todo esto se debe a la inexperiencia y juventud de la autora (disculpad si sueno algo condescendiente), pero vuelve a ser muy molesto a nivel de trabajo editorial. Se disparan temas como salvas de fuego, no se concreta ninguno y están solo para demostrar que la protagonista sufre mucho, pero mucho, que quien les rodean son personas muy malas y que suerte de los youtubers que todos son muy majos y consiguen que la vida de la protagonista se vuelva maravillosa.
Al final la novela se convierte en un canto a la popularidad, al amor que se demuestra a gritos y celos, a que los cambios físicos (más delgado, ropa más corta, más miradas de los demás) son acicates y motores de la autoestima, que la culpa siempre es de los otros y que para romper con el novio es mucho mejor mentirle diciendo que le has engañado que decirle la verdad sobre una mudanza.
No sigo. No vale la pena. Huid de ella. Es morralla con ventas decentes (el mercado es cruel).
Espero que las siguientes estén mejor.
La prota se muda de ciudad y descubre que su vecino es su youtuber favorito y se enamoran y salen de la mano y hace tonterías de reir y se pelean y luego hacen el amor en una bochornosa escena y se vuelven a pelear y...
Vamos, lo de siempre. Exactamente lo de siempre. Y con las cosas de siempre. Dejarlo todo por amor. Victimismo. Celos y posesión. Manipulación. Chantajes emocionales y todos los etcéteras que queráis. ¿Esas historias de amores tóxicos y manipuladores elevados a la quintaesencia del amor romántico? Pues dos tazas. A veces me pregunto si todos estos famosos que inspiran fanpics leen alguna de estas historias y, en ésta en concreto, qué debe opinar el protagonista de verse convertido en un tipo celoso, manipulador y con tendencia al insulto y la amenaza fácil. Y otra pregunta, ¿de verdad parece que la única forma de crear conflicto y tensión en una novela de aire romántico es convertir la relación en una pesadilla de malentendidos y crueldades mútuas? ¿Esto es todo? ¿En serio? Porque de este tipo de historias llevo una cuantas y es muy preocupante, la verdad.
Además, resulta chocante la frivolidad con la que se tratan temas como el acoso escolar, las pulsiones suicidas de adolescentes, el maltrato... supongo que todo esto se debe a la inexperiencia y juventud de la autora (disculpad si sueno algo condescendiente), pero vuelve a ser muy molesto a nivel de trabajo editorial. Se disparan temas como salvas de fuego, no se concreta ninguno y están solo para demostrar que la protagonista sufre mucho, pero mucho, que quien les rodean son personas muy malas y que suerte de los youtubers que todos son muy majos y consiguen que la vida de la protagonista se vuelva maravillosa.
Al final la novela se convierte en un canto a la popularidad, al amor que se demuestra a gritos y celos, a que los cambios físicos (más delgado, ropa más corta, más miradas de los demás) son acicates y motores de la autoestima, que la culpa siempre es de los otros y que para romper con el novio es mucho mejor mentirle diciendo que le has engañado que decirle la verdad sobre una mudanza.
No sigo. No vale la pena. Huid de ella. Es morralla con ventas decentes (el mercado es cruel).
Espero que las siguientes estén mejor.