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Hace poco os comentaba que Cuerpos malditos había sido una de las mejores lecturas delos últimos meses. Una historia dura, violenta y llena de frustración que a pesar de todo merece la pena leer porque pienso que con este tipo de lecturas uno crece como persona y te aportan algo tan importante como la reflexión, la capacidad de comprobar que hay que juzgar menos y razonar más.  Pasé un rato muy agradable con su autora Lucía Baskaran, hablamos de temas relacionados con el libro, algunos de los cuales eran puntos de vista  o razones por las que había escrito su novela y que me ayudo a disfrutar mucho más de esa lectura reciente. 

¿Viste tu vida pasar por delante de tus ojos antes de morir? ¿Era yo la protagonista de alguna de esas imágenes? ¿Cuál fue tu último pensamiento? ¿Llegaste a quererme alguna vez? ¿Para quién eran esas flores?

Martín murió hace más de un año y Alicia no deja de hacerse esas preguntas, atormentada por el recuerdo de quien fuera su prometido. Apenas tiene veintiocho y ya es viuda, pero en los arcenes de su luto aguardan una nueva pareja, el reencuentro con su mejor amiga y el fantasma de una madre ausente.

Cuerpos malditos es una novela breve y áspera sobre cómo nos transforman las pérdidas. La historia de una mujer que busca rehacer su vida al tiempo que ahonda en el pasado para desenredar los motivos de su infelicidad: una adolescencia marcada por la aparición del deseo, la violencia, la dificultad para reconocer su propio cuerpo y las heridas del primer amor y del primer desengaño. 

Lucía Baskaran escribe sobre la asfixia de las familias, el cuerpo y la amistad con la brutal elegancia de quien entiende lo humano.




Libros en el petate: En una entrevista te  preguntaban en referencia a tu anterior novela “Partir” si creías que hablar sin tapujos  de sexo y  orgasmos femeninos podía molestar y respondías que mientras siguiera molestando habría que seguir escribiendo. Leyendo “Cuerpos malditos” yo te pregunto, seguimos sin cambiar o hay esperanza.

Lucía Baskaran: Rearticularía eso y diría que si no le molesta a nadie es que muy bien no lo estás haciendo. Cuando escribes algo siempre te expones a la crítica y por supuesto que no le va a gustar a todo el mundo y cuando hay algo de género y es una mujer la que escribe por supuesto que molesta más. Me sorprende que con el tema de la masturbación femenina haya aún gente que se moleste cuando es un tema que se ha tratado en la literatura, quizás no en España, pero si en otros lugares y eso me hizo reflexionar y pensar que si es un tema que fuera de mis círculos no sienta bien es un tema que aún se debe debatir.

L.P: Creo que es un tema que debería verse como normal y mientras más hablaba sobre feminismo con autoras como Patricia Escalona, Luna Miguel o autores como  Iván Repila cuya literatura es necesaria para que uno pueda leer sobre estos temas sin que te sorprenda y llegue a verse como algo normal. Mientras una escena en un libro donde un varón se masturba nos pueda llegar a resultar divertida  y en otra donde lo haga una mujer nos escandalice o ruborice creo que algo va mal.

L.B: Desde luego que ahí hay una lectura de género que hacer y es verdad que hay muy poca información en torno a la sexualidad femenina la cual aún es objeto de debate público y mientras nos sigan clasificando entre vírgenes y putas, todo lo que sea expresar el propio deseo sin que intervenga la mirada masculina sigue generando polémica. Es terrible pero es así.

L.P: Leyendo “Cuerpos malditos” me he sentido identificado en algunos pasajes con su protagonista Alicia, en algunos momentos de su  vida, en lo que piensa, en sus contradicciones. Eso me ha hecho pensar que de alguna u otra forma Alicia somos todos.

L.B: Para mi es importante que los personajes tengan contradicciones ya que si carecen de ellas son solo clichés.

L.P: Te lo preguntaba porque no hace falta ser mujer para identificarse como Alicia.

L.B: Por supuesto. Hay rasgos en los que cualquier hombre se puede identificar con Alicia porque al final es una mujer que empieza con una perdida, todos conocemos lo que es una perdida porque es algo inherente al ser humano que es perder a alguien y no tiene que  ser por una muerte como le ha pasado en este caso a Alicia sino por una ruptura amorosa. La muerte y el dolor es algo con la que todas y todos convivimos.
Alicia es una joven que experimenta la sexualidad con su mejor amiga del colegio. Siente que la opinión pública no la ve con buenos ojos y por eso cuando la abandona su madre y encuentra a Martín quien se convierte en su pareja cree haber encontrado el mundo perfecto y estar viviendo la vida correcta, en una historia que ella misma se cuenta para poder sobrevivir y construir su personalidad a través de ser la novia de Martín, la que todo el mundo juzga como la ideal por eso parto de esa premisa y Martín muerte dejando a Alicia sola y que  tenga que preguntarse que una vez muerto su pareja quién es ella.

L.P: Por eso el título de Cuerpos malditos, por esa constante lucha por ser la persona que realmente quiere ser.

L.B: Es no solo la vuelta a la niña sino a la mujer salvaje, a la mujer sin domesticar, a la que aún los mandatos de género no le afectan. Alicia niña es una chica salvaje aunque termina siendo domesticada.

L.P: Este libro tiene capítulos magníficos y uno especialmente que me ha gustado mucho es donde hablas de la pasión, de cuando el deseo ocurre antes de la palabra y es esa palabra algunas veces el enemigo porque cuando se clasifica el deseo se rompe y entonces pasa a ser algo que está en el cuerpo a limitarlo, a ponerle nombre.    Crees que nos obstinamos en poner etiquetas a lo que deseamos.

L.B: Sí y no. El tema del deseo me interesa mucho y tiene que ver mucho con el libro. Cuando decía que las palabras limitan el deseo lo digo porque en ese momento de la novela, Alicia y Anne están descubriendo la sexualidad y aun no tienen un juicio moral sobre la sexualidad, ni tienen claro que está bien o que es punible. Dicho esto, precisamente una de las cosas que me parecen violentas de las relaciones es que no se habla de las preferencias sexuales dentro de la pareja porque hay una creencia de que si hablamos de lo que te gusta a ti o de lo que me gusta a mí, vamos a romper la magia. Para mí esto es absurdo y creo que la expresión del deseo abierta y entusiasta da mucho morbo.

L.P: En algunos momentos esta novela puede parecer dura o real. Parece que si leemos ciertas escenas en un libro tendemos a sorprendernos por la situación y en cierto modo son hechos que ocurren en la vida real. ¿Endulzamos la vida o la enmascaramos? 

L.B: Yo creo que es necesario endulzar la vida. Todos estamos llenos de máscaras porque de otra manera no podríamos vivir en sociedad evidentemente. En la vida nos salva el humor. La vida no es fácil para nadie.
Cuerpos malditos tiene mucho que ver con los demonios interiores en este caso de Alicia, de tener demonios internos y de cómo gestionar esos demonios hacia mí o hacia las personas que le rodean.

L.P: Hay un momento en el libro donde hablas de habitar un cuerpo a medias. Podrías explicar el sentido porque yo creo que en esta frase reside un poco la clave del libro o al menos eso es lo que yo he interpretado aunque este libro tiene muchas lecturas y no trata solo de un tema.

L.B: Claro. A mí me gusta que cada uno haga la suya. Eso es lo bonito de la literatura, que cada persona le toca una cosa y hace su lectura de un libro.
Habitar un cuerpo a medias tiene que ver con la otredad, con ser mujer y ser lo opuesto al hombre y nunca ser el cuerpo correcto por una parte y en el otro sentido la constante sensación de la insatisfacción. De no ser lo suficientemente guapa, lista, preparada. Ahora se habla del síndrome de la impostura de que si eres mujer tienes ese síntoma de estar constantemente siendo juzgada por todo lo que haces.

L.P: Es una locura si te digo de que además de para adultos este libro debería ser leído por adolescentes.

L.B: No. Soy profesora de inglés y te reconozco que ellos tienen una capacidad de crítica muy importante. Conozco a una profesora que de hecho lo ha recomendado a sus alumnos para que lean este libro. Hay ejemplos relacionales  en el libro que son muy interesantes de que lo lean los jóvenes y yo sería muy feliz de que los jóvenes leyeran mi novela.

L.P: Me ha llamado mucho la atención la figura que en el libro tienen las madres.

L.B: La maternidad es otro de los temas del libro porque está muy ligada  a la identidad femenina. El sistema quiere que seamos madres a la fuerza y yo con esta historia quería que esa mala madre que nos encontramos en Cristina al principio del libro tuviera al final una voz para decir que ella tenía una serie de motivos para hacer lo que hizo y que además de ser madre es muchas cosas más. Quería con este ejemplo que se deje de demonizar a las madres por no ser lo suficientemente buena madre o entregada. En Cuerpos malditos aparecen distintas madres para mostrar que no todas las madres tienen que ser el mismo tipo.

L.P: Una lectura que se me ha hecho muy fluida pero en algunos momentos me ha dado la sensación de que más que narrar analizabas.

L.B: No tanto analizar, lo que yo si tenía claro es hacer de espejo, mostrar una realidad mediante la ficción.

L.P: Me llama mucho la atención la lucha entre cuerpo y mente que sufren los personajes en tu novela.

L.B: Ese es otro de los temas del libro, la lucha del cuerpo contra la mente. Le damos mucha importancia a lo que pensamos, somos seres híper racionales que intentamos extinguir nuestros deseos y estos no tienen que ser solo sexuales sino por ejemplo querer vivir. Es en esos deseos de vida donde Alicia esta extinguida porque ella se ha empeñado en ser la novia de Martin, en querer tener hijos aunque realmente en su interior no lo quiere.

L.P: Se hablaba de la auto ficción más que de la autobiografía con tu anterior novela. En Cuerpos malditos tenías los temas pensados o te has inspirado en la realidad.

“Mis libros surgen de preguntas para las que no tengo respuesta”

L.B: La base de esta historia es una historia que me contó un amigo mío y que le pasó a unos conocidos suyos. Chico y chica se conocen en la adolescencia, se enamoran como locos y al llegar a la veintena ya tienen planes de bodas y de tener hijos. De buenas a primera el chico muere y ella se casa con su cuñado y quiere tener un hijo porque está convencida de que así va a traer al muerto a la vida. Fue una historia que me impactó tanto que pensé en cual había sido el proceso mental de esta mujer para llegar a esa conclusión y de ahí nace este libro. Normalmente mis libros nacen de una pregunta que me hago y de la que no tengo respuesta. Tengo que reconocer que no he sido fiel a la historia porque la he utilizado como vehículo para llevar a la ficción los temas que más me interesaban como la amistad entre mujeres, la familia como nido de violencia,  la construcción de la identidad femenina y de como la mirada masculina atraviesa esa identidad. Cuando estaba escribiendo este libro conocí a una rabina, una de las tres únicas rabinas de Francia y le conste la historia que te he contado de estos chicos y me dijo que esta historia aparecía en la biblia y que además era una ley.

L.P: Eso sucede de igual manera  en el Corán. Cuando un marido fallecía, su hermano tenía que casarse con su cuñada.

L.B: En el País Vasco hasta hace unos cientos de años si yo como mujer me casaba con un hombre que tenía el mayorazgo, si el moría te quedabas junto al hermano y nadie te preguntaba nada. Es esta cosa patriarcal de entender la casa y la mujer como propiedad para hacer que la familia tradicional funcione y continúe su legado. Entonces yo pensé como sería una versión contemporánea de todo esto.

L.P: Decías hace unos momentos que “mis libros surgen de preguntas a las cuales no tienes respuestas”. Podría ser un bonito titular.

L.B: Yo creo que la gente que nos dedicamos a  escribir ficción somos gente curiosa. Yo soy una persona muy curiosa y cuando no tengo respuesta yo sé que está en algún lado y es cuando empieza mi búsqueda. Si tuviera que escribir sabiendo el final de una historia creo que no podría, que me aburriría. Yo necesito ir un poco a ciegas y ver donde me lleva la historia.

L.P: Lucía leyendo tu novela y si tengo que pensar en una palabra a mí se me viene a la cabeza “frustración”. Si la tuvieras que definir que palabra usarías o que te parece la mía.

L.B: Yo si cierro los ojos y tengo que definirla la primera que me viene a la cabeza es “violencia”. Creo que es una novela violenta pero no física sino violencia soterrada     

L.P: Lucía ha sido un verdadero placer charlar contigo y más tras haber leído tu libro.      

L.B: Muchas gracias a ti por este rato tan agradable.




Tras debutar en el mundo editorial con Partir, Lucía Baskaran tiene nuevo trabajo en las estanterías de todas las librerías titulado Cuerpos malditos. Una novela cuya lectura ha provocado que inmediatamente haya aparecido una nota mental en mi cabeza que me recuerde que tengo que leer su primera obra sin falta.

Lo reconozco, Cuerpos malditos me ha impactado, una novela que con poco más de doscientas páginas se hace corta, necesaria, aunque en algunos momentos sea  hiriente para el  espectador. Del drama surge la necesidad del cambio, de la denuncia de la sociedad en ciertos aspectos y de la autocrítica de uno mismo siendo empático con la protagonista. Todo esto y mucho más es la obra de Lucía Baskaran y  a buen seguro que puede convertirse en un libro con más de una lectura, llegar a ser centro  de atención en grupos de bibliotecas o lecturas conjuntas en clase.



Título: Cuerpos malditos. 
Autora: Lucía Baskaran.
Editorial: Temas de Hoy.
Año: 2019.
Género: Narrativa contemporánea, drama.
Páginas: 222 páginas.
ISBN: 9788499987422




Sinopsis:
¿Viste tu vida pasar por delante de tus ojos antes de morir? ¿Era yo la protagonista de alguna de esas imágenes? ¿Cuál fue tu último pensamiento? ¿Llegaste a quererme alguna vez? ¿Para quién eran esas flores?

Martín murió hace más de un año y Alicia no deja de hacerse esas preguntas, atormentada por el recuerdo de quien fuera su prometido. Apenas tiene veintiocho y ya es viuda, pero en los arcenes de su luto aguardan una nueva pareja, el reencuentro con su mejor amiga y el fantasma de una madre ausente.

Cuerpos malditos es una novela breve y áspera sobre cómo nos transforman las pérdidas. La historia de una mujer que busca rehacer su vida al tiempo que ahonda en el pasado para desenredar los motivos de su infelicidad: una adolescencia marcada por la aparición del deseo, la violencia, la dificultad para reconocer su propio cuerpo y las heridas del primer amor y del primer desengaño. 

Lucía Baskaran escribe sobre la asfixia de las familias, el cuerpo y la amistad con la brutal elegancia de quien entiende lo humano.


Impresiones:


Alicia tiene veintiocho años, ha quedado viuda y su vida se ha roto en mil pedazos. Tras la pérdida, queda superar la etapa del duelo y mientras eso sucede tiene un peculiar novio nuevo, una amiga de la infancia que representa y simboliza toda una vida de luchas internas fingiendo la mujer que debía de ser y ahuyentando los  fantasmas de lo que no era políticamente correcto. Un drama familiar y una infancia que vuelve a sus pensamientos una y otra vez conforman una novela donde la protagonista mezcla presente y pasado para confeccionar una radiografía de sus sentimientos y deseos que intentan salir a flote entre la zozobra de sus miserias y sus anhelos reprimidos.

¿Qué vida hubiera querido vivir Alicia? Llegados al punto en el que una perdida te hace alejarte del puerto donde estabas anclado, surgen los pensamientos que imaginan otra vida y que intentan arreglar demasiados cabos sueltos en las personas que giran en torno a la vida de nuestra protagonista y han supuesto en algún momento u otro algo significativo.

Brutal, desgarradora y con un estilo único, que convierte puñaladas hecha frases, en algo tan normal como la vida misma. Lucía es descarada en su historia, no tiene pelos en la lengua pero lo cuenta de tal manera que no escandaliza pero si invita a pensar que no siempre lo establecido tiene porque ser lo correcto.

Me gustan los libros así, te sacan de tu espacio de confort y te hacen reflexionar, sufrir con la historia y una vez leído algo dentro de ti no vuelve a ser igual.

Hemos invitado a la reunión literaria a muchas de las cosas que incomodan y eso hace que a base de leer, o mejor dicho devorar esta lectura, nos inmunicemos ante tanto tema tabú. El bullying, la sexualidad, el fracaso personal, el deseo reprimido, la libertad de elección, las complicadas relaciones personales y familiares, etc.


Siempre es bueno que todo eso le ocurra a otro y no a nosotros mismo pero ya que vamos a ser espectadores de lujo tomemos aire y sumerjámonos en un mar de páginas donde la autora no dará un segundo de tregua y sobre todo empapémonos  de la historia, tenemos mucho que aprender de ella.

Sin lugar a dudas, una de mis mejores lecturas en lo que llevo de año.


Autora:




Lucía Baskaran (Zarautz, 1988) es autora de la novela Partir, que compitió por el Premio Herralde y publicó con apenas veintisiete años. También ha escrito para medios como El Salto Diario, PlayGround Magazine o Kulturaldia. Actualmente reside en Donostia con la también escritora Danele Sarriugarte y un gato negro.





                                                                         

Lo conocí una vez por los pasillos de Canal Sur. Iba con una amiga que trabajaba en esa casa y fue ella quien me lo presentó a petición mía. Le llamé Don Gregorio porque en ese momento sentí más respeto que admiración hacía el personaje público. Unos minutos, unas risas y un recuerdo eterno grabado a fuego en la memoria.

Todos conocemos a Chiquito, todos hemos sido Chiquito en alguna ocasión y su legado nos ha acompañado en reuniones, conversaciones o en una despedida al estilo hasta luego Lucarrr

Por eso cuando vi el libro de Sergio Mora tuve la necesidad de leerlo, de saber, de descubrir sobre un personaje al que le llegaron como siempre los homenajes tarde, cuando no son posible su disfrute en vida.





Título: Las legendarias aventuras de Chiquito.
Autor: Sergio Mora.
Editorial: Temas de Hoy.
Año: 2019.
Género: Cómic, Biografía, Ilustración.
Páginas: 189 páginas.
ISBN: 9788499987231


Sinopsis:

Esta es la historia de un niño que pasó más hambre que el sastre de Tarzán. El relato de un joven que abandonó su Andalucía natal para irse a Japón en busca de un futuro mejor. La biografía de un hombre que fue capaz de colarse en el hogar de millones de españoles con el único deseode arrancarles una sonrisa.
Basada libremente en hechos reales, Las legendarias aventuras de Chiquito nos llevan de la mano por vicisitudes de un genio que atravesó como pocos el corazón del siglo XX, de la guerra civil a Star Wars y de la movida madrileña a los anuncios de Campofrío.
Un ser de luz que decidió presentarse ante el ilustrador Sergio Mora para revelarle su última enseñanza: que los hechos son, a fin de cuentas, algo mucho menos interesante que la verdad.

Impresiones:


Por eso cuando vi el libro de Sergio Mora tuve la necesidad de leerlo, de saber, de descubrir sobre un personaje al que le llegaron como siempre los homenajes tarde, cuando no son posible su disfrute en vida.

Dice Manu Sánchez en un artículo dedicado a Chiquito que “el surrealismo es la hiperrealidad del genio. La verdad incontestable de las cabezas rápidas que las lentas nunca alcanzan”. Por eso creo que Gregorio Esteban Sánchez Fernández natural del barrio de la Calzada de la Trinidad, Málaga fue un auténtico genio… “genio y figura” al que la fama le vino de casualidad pero muy merecida para alegrarnos los corazones y conseguir que tuviéramos unos ratos de felicidad a su costa.




Hijo de un sevillano y una malagueña tuvo una infancia de miserias y hambre, más hambre que el sastre de Tarzán. Un superviviente que con pocos años se recorría la provincia de Málaga cantando por los tablaos algunas veces por sólo un bocadillo lo que te forja tu carácter y te hace apreciar y valorar lo poco que tengas.

Datos tan curiosos como este y otros más ha ido recopilando el dibujante Sergio Mora de entrevistas, artículos encontrados en diversas fuentes de documentación y creado una biografía real con algunas pinceladas de ficción, que resulta maravillosa a la vista y a los sentidos. Pinceladas de su vida que muestran a grandes rasgos pero de forma muy contundente y yendo al grano de la información,  la vida que tuvo Chiquito y su forma de sentir las vivencias.

Recorre desde   sus inicios siendo un niño, a sus años de Torremolinos, su periplo por Japón, los años ochenta y éxito televisivo  ya con sesenta años. Es también en cierto modo un viaje por España, por sus décadas y su historia.




Un escritor, su mujer y su editora cenan en un restaurante y allí conocen a Arito, un japonés que regenta el restaurante donde están y hablando con él descubren  que fue palmero de Chiquito en su estancia en Japón. Fue tanta la admiración y fascinación que sintió por el malagueño que Arito recopiló todas sus anécdotas y se convirtió en su biógrafo, por lo que editora y escritor le proponen juntos escribir una biografía sobre el personaje.

Una mezcla de dibujos y fragmentos de biografía que da como resultado un libro muy emotivo y muy colorido con un diseño plástico que me ha parecido de gran calidad. Tengo que reconocer que la efusividad en mis palabras se debe a que me encantan los dibujos de Sergio Mora ya que su estética me trasporta a mi niñez. A aquellos primeros tebeos que mi abuelo me regalaba y que sin saber leer aún ya hacía que me inventara historias usando sus viñetas.

La vida de Chiquito es la del que ríe por no llorar. Nadie sabe mejor qué es la miseria que quien la ha vivido. Por eso Don Gregorio era un maestro de la vida, quien contaba anécdotas convertidas en chistes pero quien en el fondo daba lecciones de vida.

Chiquito es universal, es de todos y nos pertenece a todos para mayor gracias de nuestra salud humorística

Hechos y fantasía se mezclan en este libro en parte homenaje, visión idílica o romántica de la exaltación a los altares del reconocimiento de una gran personal. Disfruten de esta pequeña joya literaria y juzguen ustedes.  

Autor: 

Sergio Mora (Barcelona, 1975) es pintor, ilustrador e historietista. Ganador del Latin Grammy al mejor diseño 2016 por El poeta Halley de Love of Lesbian, recientemente ha diseñado los murales de los restaurantes del chef José Andrés en Miami y Nueva York, ambos proyectados por Philippe Starck. Además, es autor de varios libros ilustrados, entre los que destacan Typical Spanglish (2013), El niño Rock (2014), Amazing Art (2016), La caca mágica  (2017) y Moraland (2018). Las legendarias aventuras de Chiquito es su estreno como biógrafo y narrador.



                                                           
En palabras de Patricia Escalona “Feminismo es un movimiento que busca la igualdad política, económica y social entre hombres y mujeres y punto pelota” y quien quiera ver más allá de esta frase es buscar tres pies al gato o simplemente si no está de acuerdo con la misma, debería dejar de leer esta entrada o hacérselo mirar. Aunque pensándolo bien tal vez le convendría ir a una librería y llevarse a casa un ejemplar de Juegos Reunidos Feministas y aprender.

Hoy toca hablar de un libro que es una obra de ingeniería. Hay obras que son simples y cuando la miras desde varios puntos de vista y otras  perspectivas, te das cuenta que es puro arte complejo y  es precisamente es su sencillez donde reside todo el mérito. Juegos Reunidos Feministas es esa misma creación  con un trasfondo complejo y de gran mérito que encierra autentica historia y filosofía de las injusticias sufridas por las mujeres, mostrado a partir de unos simples juegos para pasar un bue rato en compañía aprendiendo  mientras jugamos y disfrutamos que de paso, es  la mejor forma en la que uno aprende.



Título: Juegos Reunidos Feministas.
Autoras: Patricia Escalona y Ana Galvañ.
Editorial: Temas de Hoy.
Año: 2019. 
Género: Juegos, Adulto, cómic.
Páginas: 124 páginas.
ISBN: 9788499987149 


Sinopsis:
A estas alturas es imposible esquivar el tema. Da igual que tu entorno sea el del activismo de género o el de la peña madridista de tu ciudad, nos apostamos los ovarios a que en el último año has discutido sobre feminismo al menos una vez al mes. A veces habrás salido con las cosas más claras. A veces habrás terminado un poquito confundida. A veces enfadada. Pero nunca indiferente.
Por eso hemos hecho este libro. Un cuaderno de actividades repleto de juegos y explicaciones para que tus discusiones ganen en material para risas y para enfados, pero sobre todo en profundidad. A través de los tres niveles en que se divide, atravesarás los conceptos teóricos que dan forma al feminismo y reconocerás los efectos del patriarcado en tu día día.
Juegos reunidos feministas es un libro para pasarlo bien sola o acompañada, pero es también un recorrido provocativo hacia el cambio. Aquí hemos venido a reír, sí. Pero también hemos venido a luchar. Y si todavía no lo crees, juega y verás. 

Impresiones:
Aviso a navegantes: Este libro no es un libro de a la vieja usanza, con unos protagonistas, una historia y un desarrollo en forma de novela donde reiréis, sufriréis, amareis y todas esas sensaciones que un buen libro deja al lector que sabe aprovecharlo.

Esta es una  obra cuyas protagonistas son las mujeres que han sufrido a lo largo de la historia por las injusticias que la sociedad ha cometido sobre ellas por el simple hecho de ser mujer. Contiene también protagonistas masculinos pero en muchos de los casos no salen bien parados y con razón pero existe un protagonista oculto que es el lector que jugando puede aprender muchas cosas que le hagan reflexionar y se sienta un poco más cómplice con lo que intenta inculcar Juegos Reunidos Feministas y que no es otra cosa que la igualdad.

Nos vamos a reír porque como dice Patricia Escalona en el encuentro que mantuvimos hace

unos días, “la risa creo que es la manera más fácil de llegar a las persona”. Sufriremos ante tanta injusticia y espero que también llegado el momento amemos, ya sea al prójimo, a este libro o a las ideas que hacen que este mundo cambie y para mejor. Al fin y al cabo siempre es mejor amar que odiar porque pocas personas he conocido que les de alegría odiar.


Dividido en cuatro apartad como son Proto Feminista, -Feminista Nivel medio, Feminista Pro y Aliados. En todos ellos habrá más juego que explicaciones porque cuando nos pongamos a jugar descubriremos que sobran las palabras y los largos discursos ante el material y las soluciones o enunciados de los juegos a los que nos vamos a enfrentar. No hay un aire de revancha en su contenido pero si de dejar ciertas ideas en su sitio unas veces de forma más seria y otras con cierto toque gamberro y subversivo. 

Un libro muy divertido, diseñado en su contenido de forma muy inteligente y que asegura diversión, buenos momentos de juegos entre amigos y aclarar y enseñar una serie de situaciones y valores que se dan en la sociedad y de la que muchos hemos sido cómplices desde el acomodamiento. 
Diccionarios de términos, test, crucigramas, sopa de letras, karaokes, laberintos y horóscopos son solo algunos de los  contenidos  del libro que una ilusionada autora esperaba de él que provocara risas y despertar alguna conciencia. 



Autoras: 

Ana Galvañ  es autora de cómics e ilustradora desde que abandonó Murcia para estudiar en la facultad de Bellas Artes valenciana. Hay quien consideraría que ese movimiento solo podía desembocar en una vida de circuitos alternativos, pero sus premios en Creacómic y Gràffica y, sus trabajos para The New YorkerThe New York Times, o El País demuestran de sobra que Ana no se iba a conformar con eso. En 2018 publicó Pulseenter para continuar, una aventura interestelar y psicodélica tan surrealista como algunas de las escenas que ha ilustrado en este libro.

Patricia Escalona lleva muchos años trabajando como editora para dar forma a libros que creía que tenían que llegar a nosotros. Tanto en la neoyorquina The New Press en la que se formó, como en el sello Miscelánea, en España, ha apostado por dar espacio a voces necesarias para la época en que vivimos. No es de extrañar que, con ese esfuerzo a la espalda, esté ya harta de enfrentarse una y otra vez a situaciones que nos llevan de vuelta al siglo XV. Y como lo que también es muy del medievo es callarse, ahora ha escrito este libro para derrocar a todo adalid del machismo. Si después de leerlo, se quedan con ganas de más y se la encuentran por la calle, invítenla a un vermut y simplemente siéntense a escuchar. Rodarán cabezas.



                                                         
No me considero machista ni por asomo pero uno se da cuenta que el costumbrismo y las injusticias heredadas durante generaciones dejan ciertos patrones incrustados en el ADN en forma de hábitos que son merecedores de una profunda reflexión por mi parte.




Lo bueno es que si el propósito de enmienda es sincero uno ya tiene medio trabajo hecho y tener conversaciones como la mantenida con Patricia Escalona hacen que el sentimiento de reconversión y reflexión en pos de un mundo algo más justo sea sin duda más firme.


Hay lecturas que deberían de ser obligatorias en las escuelas, en los institutos y facultades. Puede que en las mentes cerradas y más radicales sin ánimo de cambio y con bajo niveles morales de compromiso con la sociedad no surta ningún efecto pero se podría intentar.

Este libro puede que no sea el caso por la forma en que está concebido pero da para una lectura individual donde aflore la reflexión más íntima o una tarde-noche de risas y conversación entre amigos disfrutando de los Juegos Reunidos Feministas.


Libros en el petate: Juegos Reunidos Feministas es una grata sorpresa porque tras disfrutar de su lectura, uno descubre un diseño muy original e intuye el gran trabajo que hay detrás de esta obra. Tengo curiosidad de por qué lo abordáis desde el punto de vista de los juegos.

Patricia Escalona: Es una manera graciosa y jocosa de llegar a un tema que es complicado y que resulta tediosos en algunas ocasiones. Muchas estamos ya cansadas de ser las feministas designadas a la que preguntan o señalan preguntando “oye tú que eres feminista qué opinas de esto...” cuando todo el mundo tendría que tener su parte de feminismo y tener opinión propia sobre estos temas. Esto es lo que intenta hacer entender el libro a través de juegos y de una manera entretenida para que sea una forma más divertida de hacerlo sin que sea un texto corrido que puede ser un poco tedioso para algunas personas. Aprender jugando, un invento que no es una idea original mía pero que funciona.

L.P: Últimamente el ideal feminista está muy presente en la literatura.  Muy mal o muy bien, según como se mire, debe estar la cosa para que el tema este en el candelero.

P.E: El feminismo tuvo su segunda ola en los Estados Unidos allá por los años 60-70 y era una teoría feminista muy beligerante porque no podía ser de otra manera y luego cayó en un desprestigio cuando se empezó a asociar con mujeres con las que no se podía hablar, mujeres con un mensaje muy radical que transmitía un odio hacía los hombres. Hoy en día ha habido una visibilización del término y se ha convertido en algo de gran alcance gracias a que figuras notorias de la cultura como pueden ser cantantes, actrices y escritoras lo han abrazado como un término que es lo que es. Feminismo es un movimiento que busca la igualdad política, económica y social entre hombres y mujeres y punto pelota. Una vez que se entiende el primer concepto que es muy básico y sencillo ya podemos meternos en otras disquisiciones, pero de entrada ese concepto tan básico y tan sencillo no se entiende tan fácilmente. Estas mujeres que han hecho tanto por mostrar la realidad del concepto han conseguido que se convierta en algo más presente en nuestras vidas.

L.P: Acabas de referirte a feminismo con un término que cualquier persona puede entender que es lógico y justo pero esta palabra parece que esta estigmatizada o mal comprendida entre la sociedad. ¿A qué crees que puede deberse?

P.E: A un mal entendimiento. La primera ola del movimiento fueron las sufragistas cuyo objetivo era el derecho al voto de la mujer. La segunda ola vino en los años 70 y vino acompañada de una revolución sexual que ya se estaba produciendo en muchos estratos de la sociedad y que vino además con una reivindicación de los derechos de las mujeres que  después la academia se encargó de teorizar sobre ellos. Poco a poco esta intelectualización hizo que el feminismo se convirtiera en un término alejado de muchas mujeres que no lo entendían como tal. De repente empezaron a ver a las feministas como locas radicales que quemaban  sujetadores y que eran lesbianas. Esta tercera ola del feminismo lo que está causando es esa aproximación porque ya los referentes no son solamente aquellas filosofas de los setenta sino mujeres que todos vemos en los medios, mujeres que entiendes y compartes su mensaje, figuras de primer nivel que resultan cercanas a la sociedad y con las que incluso puedes interactuar.

L.P: Este libro arranca muchas sonrisas sobre todo con algunas palabras de las que no tenía ni idea como machirulada, machinazi o manspreading. Esto me ha hecho replantearme si tengo aún mucho que aprender sobre este tema o es que no estoy en este mundo.

P.E: (risas) Machinazi es un término de mi invención pero te puedo asegurar que estas en este mundo. El libro bebe mucho de la cultura pop y de lo que se mueve en redes y los neologismos son diarios y es muy divertido ver como se desarrollan y como adquieren su propio significado y como en ciertos círculos se emplean de esta manera para poner las cosas en su sitio. En ingles manspreading es una palabra que ahora se utiliza mucho pero hace dos años ni siquiera existía y que fue acuñada por la escritora Rebecca Solnit, autora del libro Los hombres me explican cosas y viene por una vez en la que ella se encontraba en una fiesta y hablando sobre literatura con un señor. En un momento de la conversación ella le habló sobre lo que había escrito, y explicándole sobre que versaban sus artículos, este hombre en un momento de la conversación hizo referencia a los artículos de Rebeca sin saber que era de ella y trato de explicarle con sus palabras lo que ella ya sabía.  Esto sucede mucho en conversaciones habituales donde tú estás hablando y de repente viene un hombre y repite exactamente lo mismo que tú has dicho con otras palabras.

L.P: Se aprende mucho con este libro. Por ponerte un ejemplo, con el juego de cincuenta sombras de Violeta, usando esas gafas violetas de las que habláis me he dado cuenta de que me falta mucho por asimilar y que hay mucho que cambiar aún.

P.E: Hay mucho que cambiar y muchos pequeños detalles que convertir en otras cosas. Hay que romper con ciertos hábitos y con ciertas actitudes que a  hombres y mujeres les pueden parecer  normales pero tenemos que revisar nuestras propias actitudes desde el lenguaje hasta ciertas cosas que son inherentes  a nuestro comportamiento porque es lo que hemos vivido desde pequeños y por mucho que tú estés implicado con cambiar hay detalles que no te das cuenta y sigues haciéndolo de la mima manera que te han enseñado y has absorbido de la sociedad.

L.P: ¿Se podría decir qué es más un libro para hombres que para mujeres, o al menos más necesario?

P.E: Yo creo que no. Creo que es para todos porque tiene diferentes niveles de conocimiento y está dirigido a todas las personas que creen en el feminismo como la próxima revolución social junto a la ecología que va a suceder en el siglo XXI y a cualquier persona que tenga un mínimo interés en eso y en cómo puede avanzar la sociedad hacia un modelo más justo, más compasivo. Si tienen esas inquietudes, este es su libro.

L.P: Este libro me ha despertado curiosidad por algunos datos y a través de él he llegado a saber que Perú es el país del mundo  donde mueren dos mujeres al día o por poner otro ejemplo en Argentina muere una mujer cada 30 horas o incluso que el asesinato de hombres hacía mujeres está situado en un 28% y el de mujeres hacía hombres se sitúa en un 7%. Para que luego digan que no es necesaria una ley de violencia de género.  Razones más que suficientes para que en la calle exista un libro como este pero puedes darnos alguna más si la hay.

P.E: A parte de abrir los ojos y despertar conciencias que creo  que es bastante razón para este libro la otra, te lo creas o no, es la risa porque creo que es la manera más fácil de llegar a las personas o por lo menos mejor que a través de un enfrentamiento dialéctico.

L.P: Vemos discriminación e injusticias en casa, en la vida diaria, en el trabajo, en los medios y quería preguntarte si en el mundo editorial también la hay.

P.E: Uffff también. Yo formo parte de una organización que se llama Mujeres del libro que se dedica a intentar descubrir la brecha salarial en el mundo editorial que sabemos que existe pero del que es muy difícil conseguir datos y demostrarlo debido al a falta de transparencia. El ochenta por ciento de la fuerza laboral que compone el mundo editorial somos mujeres y tan solo un veinte por ciento son directivas. Esto demuestra que algo falla y hay algo ahí que no está funcionando bien.

L.P: Del libro llama mucho la atención muchas cosas como frases, personajes y otras curiosidades pero si hay algo que me ha llamado mucho la atención ha sido el apartado de las obras robadas. ¿Qué te ha llamado la atención a la hora de buscar información para este libro?

P.E: Pues no tengo ningún recuerdo especifico porque yo iba pensando en ejemplos de injusticias y los iba colocando en juegos. En el caso que más te ha llamado la atención a ti fue gracias a mi hermano que es profesor de literatura y  me comentó que el libro Canción de cuna no lo había escrito su autor, lo había hecho su mujer pero se atribuyó la autoría su marido. Cada chispa de idea que me venía a la cabeza sobre una injusticia cometida a alguna mujer se convertía en parte de un juego.

L.P: Te he puesto ese ejemplo no porque lo considere el más importante pero si me ha hecho reflexionar sobre cuantas obras hechas por mujeres en todo el mundo habrán quedado para la posteridad obviando a su verdadera autora.

P.E: Incontables porque esto ha sido una tónica general en la historia ya que a la mujer no se le ha dado importancia. Por ponerte un ejemplo, si buscas pintores barrocos en un buscador, los diez primeros resultados son hombres. Pero y Artemisia Gentileschi o Sofonisba Anguissola donde están, porque eran mujeres que también eran artistas y tenían la importancia o estaban al nivel de Caravaggio. Es verdad que había menos porque las circunstancias mandaban y la facilidad para acceder a esos lugares privilegiados en el arte para ellas era más difícil por la circunstancias de la mujer en la sociedad pero las que lo consiguieron no están lo suficientemente reconocidas.

L.P: ¿Qué les gustaría a las autoras de Juegos Reunidos Feministas conseguir con este libro?. Hay que recordar que aunque no está aquí con nosotros, Ana Galvañ también ha contribuido a él

P.E: Pues muchas risas y mucho aprendizaje. Nos gustaría que hubiera interés y curiosidad, que la gente se eche unas risas jugando entre los amigos y si conseguimos despertar alguna conciencia pues fenomenal. Ana es la ilustradora y se comprometió con este libro por el contenido y ha hecho un trabajo de maravilla, dándole un punto de sentido del humor que es loable y fantástico.

L.P: Patricia también eres editora. ¿Dónde se sufre o se disfruta más como editora o como escritora?

P.E: Yo estoy sufriendo como escritora. Como editora no sufría nada o tal vez en algunos momentos puntuales pero como escritora el nivel de exposición y de lo que requiere ser autor es algo que yo nunca me planteé ni quería hacer pero aquí me encuentro y creo que vale la pena, primero por el entusiasmo del equipo editorial y después porque había algo que decir.

L.P: Patricia ha sido todo un placer y reconocer que como hombre este libro y esta charla ha resultado muy enriquecedora y por lo tanto agradecerte tu tiempo.


P.E: Gracias a ti, he pasado un rato muy agradable.



A estas alturas es imposible esquivar el tema. Da igual que tu entorno sea el del activismo de género o el de la peña madridista de tu ciudad, nos apostamos los ovarios a que en el último año has discutido sobre feminismo al menos una vez al mes. A veces habrás salido con las cosas más claras. A veces habrás terminado un poquito confundida. A veces enfadada. Pero nunca indiferente.
Por eso hemos hecho este libro. Un cuaderno de actividades repleto de juegos y explicaciones para que tus discusiones ganen en material para risas y para enfados, pero sobre todo en profundidad. A través de los tres niveles en que se divide, atravesarás los conceptos teóricos que dan forma al feminismo y reconocerás los efectos del patriarcado en tu día día.
Juegos reunidos feministas es un libro para pasarlo bien sola o acompañada, pero es también un recorrido provocativo hacia el cambio. Aquí hemos venido a reír, sí. Pero también hemos venido a luchar. Y si todavía no lo crees, juega y verás. 








El pasado 7 de Febrero tuve la suerte de poder hablar con la autora Elisa Levi que se encontraba de visita por Sevilla para promocionar su primera novela titulada Por qué lloran las ciudades. Una novela muy interesante que demuestra que juventud no está reñida con razón y reflexión. Dos palabras que unidas a inconformismo dan para hablar sobre muchos temas incomodos durante horas como pueden ser la muerte, el suicidio, la desilusión, la esperanza, la felicidad, la amistad y un largo etcétera más..  Yo solo tuve veinticinco minutos pero fueron suficientes para convencerme que el libro de Elisa me había calado mucho más hondo de lo que podía suponer y que por más años  que uno haya vivido, siempre puede venir una persona con menos calendarios de experiencia y que te abra ventanas a la reflexión como es el caso de Levi con su obra. 

Fue un placer hablar con Elisa y reconozco que ha comenzado a recorrer un camino difícil este del mundo editorial pero creo que están por venir muchos titulares en prensa y círculos literarios con su nombre como protagonista.






Denis se ha suicidado y ahora Ada está sola. Sola entre sus hermanas y su madre y su padre y los chistes sin gracia de su entorno, sola en la habitación que comparte con su pareja y frente al lexatín que nunca falta en la cartera. Sola en Japón, donde ha tenido que viajar como única albacea de quien fuera su mejor amigo.
Nostalgia, tristeza y melancolía afloran por las calles de Tokio mientras acompañamos a Ada en su deambular por preguntas que seguramente tampoco sabríamos responder: ¿Dónde encajan los ausentes?
¿Cuál es la promesa de aquellos que se quitan la vida? ¿Quién ha sabido sostenerle la mirada a la felicidad?Hay quien elige palabras rimbombantes para hablar de la primera novela de una joven autora. Elisa Levi es joven y este es su debut narrativo, pero más que una revelación o una bengala intermitente, lo que ha escrito es una oda al desencanto. Algo esencial.




Libros en el petate: La protagonista de Por qué lloran las ciudades es Ada, una chica con un puñado de preguntas tristes que se hace a lo largo de la novela. Después de conocer al personaje me hago la pregunta obligada de qué tiene Ada de Elisa.

Elisa Levi: Tengo que decir que la novela es ficción absolutamente pero es verdad que sin querer al escribir proyectas cosas tuyas en los personajes y yo tiendo a hacerlo mucho pero digamos que es mi yo llevado al límite aunque te repito que es ficción absoluta. Tienen mucho de mí todos los personajes, incluso aunque sean personajes pequeñitos.

L.P: Qué te lleva a crear una historia como esta. Un libro que está lleno de momentos, de ideas que siempre han estado ahí pero que pocas veces se quieren admitir y menos reflexionar porque en la mayoría de los casos resulta muy incómodo hacerlo.

E.L: Es como una oda al desencanto y al paso de dejar de ser una niña y de vivir con mis padres agarrada a mi entorno familiar, a pasar de repente a ser una adulta. Es en ese momento cuando te preguntas cosas que van a marcar tu vida y te enfrentas a una soledad en la que llegas a cuestionarte si hay respuestas a todas esas preguntas. Es el camino de emprender una vida sola y ser  adulta y tener que cuestionarme cosas.

L.P: Cuando una autora pasa de la poesía a la novela siento la curiosidad de preguntar cómo te has encontrado en ese cambio de género.

E.L: Ha sido algo muy natural o al menos yo lo he sentido como algo muy natural. Creo que hay momentos de la vida en la que la poesía te llega pero que de repente  te abandona. Yo con la poesía siento que vivo en un abandono continuo y ahora cuando he pasado a la narrativa lo he vivido mucho más cómoda, sin apartar la poesía porque en la novela hay mucha poesía pero desde otro punto de vista que es la palabra de Ada, pero ha sido un proceso completamente natural, lo he vivido como una transición donde me he visto preparada para pasar a la narrativa y para adentrarme en una historia con sus personajes, sus giros y todo lo que ello conlleva.

L.P: En este libro como bien dices, quedan restos de esa poeta que eres.

E.L: Creo que la poesía es algo muy vinculado a la intimidad del autor y de las vivencias del propio autor y al cambiarlo de voz, en lugar de ponerlo en la voz de Elisa Levi la he puesto en la de Ada, me ha servido para guiar la historia y para saber más del personaje. Me ha servido como un ejercicio de creación del personaje. No ha sido algo consciente en el que haya pensado que este personaje tiene que escribir poesía.

L.P: Este libro confirma un poco esa frase que dice que “las familias nos vienen impuestas y los amigos los elegimos nosotros”.

E.L: Absolutamente. Mi generación, o al menos la gente que yo tengo a mi alrededor que es de mi edad hemos notado mucho ese cambio que supone el despegue del entorno familiar para pasar a buscar mi propia familia y estoy encontrándola en mis amigos. El vivir solo y estar en un lugar solo, te hace elegir a tu propia familia que suelen ser los amigos más cercanos a los que incluso llegas a querer más que a tu propia familia.

L.P: Tenemos como personajes a Ada y a Denise, pero hay un secundario que tiene bastante importancia que es el Lexatín. Se podría decir que la ansiedad es uno de los males de este siglo.

E.L: Absolutamente. La ansiedad es algo que ha estado siempre pero que se le ha dado poca voz y se le ha identificado poco y ahora se está hablando con naturalidad de ella. La ansiedad ataca de formas muy diferentes, desde un ataque de pánico a ronchas en la piel y tiene tantos aspectos que es difícil identificar pero que se hable de ello y que asumamos que es un mal de nuestra sociedad actual, fruto de la vida ajetreada que llevamos y a la que nos enfrentamos en nuestro día a día, creo que es muy importante.

L.P: Cómo es ver tu vida como si fuera una película porque me ha resultado muy curioso esos fragmentos que aparecen a lo largo de todo el libro.

E.L: Yo siempre he estado muy vinculada al cine porque estudié comunicación audiovisual y creo que era un elemento más que servía para empaque al personaje de Ada. De la misma forma que el tic que tiene en las manos que le sirve para comunicarse mejor con ella misma, creo que el hecho de que ella se imagine que le sigue una cámara es la visión que ella quiere proyectar de una visión externa de la sociedad.

L.P: La muerte es esa asignatura pendiente de la que nadie quiere hablar y de la que tu hablas con total libertad en el libro. Hablas también de un tema como el suicidio de una forma que además crea debate.

E.L: Tengo que reconocer que me daba miedo hablar del suicidio y plantearlo como trama central del libro pero me ha servido para generar un criterio propio sobre ello. Dentro de nuestra propia libertad es un tema que cuanto más lo hablemos, con más naturalidad se hable de ello en los medios de comunicación de forma más libre, podremos alejar los motivos que llevan a una persona a decidir acabar con su vida. Creo que es una parte más de nuestra libertad, la libertad no esto bonito y en ella también esta  elegir si queremos optar por el suicidio llegado a un punto de nuestra vida.

L.P: Es un tema difícil porque no todo el mundo es capaz de reconocer o hablar de un tema así con total naturalidad.

E.L: El hecho de que esté vinculado con una especie de tabú hace que no  nos permita pensar en ello y lo convertimos en algo más grande de lo que es, algo que queremos ocultar y se forman juicios de valor alrededor que proclaman si eres un valiente o un cobarde por ello y no es ni lo uno ni lo otro, tienes un problemas y es una fase más del problema.

L.P: Un libro muy valiente por su contenido y por ello me pregunto si te has mordido mucho la lengua.

E.L: La verdad es que no. Creo que he escrito lo que he querido, lo que he sentido y con toda mi honestidad.

L.P: Me ha resultado exótico que desarrolles la novela en la ciudad de Tokio. Es protagonista por algún motivo.

E.L: Yo quería situar a la protagonista en un lugar donde tuviese problemas para comunicarse y donde su forma de sentir o de concebir las emociones fuese totalmente diferente y en Tokio estas circunstancias las manejan de una forma muy diferente a como se hace aquí en España o en Europa en general. De esta forma plantear un personaje que se está planteando su vida  en un entorno tan distinto a ella también me suponía un reto como escritora porque yo no tenía la posibilidad de ir a Tokio a informarme por lo que ha sido un proceso de investigación y de aprendizaje que lo he volcado en la protagonista  pero que también me ha servido a mí para liberar ciertas cosas.

L.P: Al final tenemos un carta de Denis a modo de despedida que me ha parecido magnifica y de una sensibilidad increíble que es toda una declaración de intenciones. Te ha costado mucho escribir esta carta.

E.L: Absolutamente, es como un manifiesto. El final era algo que a mí me preocupaba porque tenía que redondear esa historia porque es algo tan  importante para mí al ser mi primera novela, que tenía que encontrar un final que se adecuase a las expectativas que yo tenía de esa historia. Todo esta responsabilidad me hizo pasar unos meses raros porque no sabía cómo acabar la novela o qué giro darle y fue entonces cuando de repente me llegó y lo hice en casa todo de una tirada. Me puse en la piel de Denis y fui lo más sincera que pude.

L.P: Leyendo el libro me ha surgido la duda de sí llegó Denis a traicionar la amistad de Ada en algún momento.

E.L: Nunca, creo que Denis podría haber hecho cualquier cosa que Ada siempre se lo hubiese perdonado y hubiese sabido gestionar su decepción o su duelo sola, para que no le afectase con su relación con Denis.

L.P: El mundo no es tan bonito como parece o al menos hablamos de generaciones distintas donde la anterior le ha dicho a la siguiente que el mundo es de color de rosas y ahora vemos a esta generación que ha recogido el testigo como algo desencantada del futuro que le prometían. Este libro es rebelde, revelador, etc. Puedes definirlo.

E.L: Yo diría que este libro habla de la crudeza de  las emociones sin juicios. Considero que mi generación está muy acostumbrada a aparentar en las redes sociales, a pintar una vida que es muy feliz cuando realmente a  lo mejor no lo es tanto y donde no cabe la tristeza porque si hablas de tristeza eres noticia. No tiene porque ser todo así ya que dentro de la búsqueda de la felicidad, la gente de mi generación que tenemos entre 20 y 30 años estamos en la búsqueda de encontrarnos cómodos. Hemos vivido una educación que ha sido mejor que la de nuestros padres y de repente entramos en la universidad, llega la crisis y te ponen el cartel de que no puedes dedicarte a esto que estudias. Esto nos lleva a preguntarnos qué hacer con toda esta decepción que hemos vivido y creo entonces que es un libro que habla de la crudeza de darte cuenta de que tienes que hacer algo con tu vida porque nada va a llegar de fuera y que todas las oportunidades que te había prometido no existen y tienes que salir tu solo adelante.

L.P: Pues yo me reitero en mi opinión. Creo que es un libro muy valiente que deja un regusto gratificante porque te hace reflexionar sobre todas esas cosas que cotidianamente no quieres pensar para no agobiarte y que de vez en cuando está bien que alguien te las ponga delante y te diga oye piensa en esto porque esto también forma parte de tu vida y por más que lo niegues no va a desaparecer.

E.L: Hay que quitarle también hierro al asunto y así no significara tanto. Puedes pensar que estas triste y que no pasa nada, simplemente hagamos algo con ello.

L.P: Por ejemplo ponerle solución.

E.L: Efectivamente, así también lo vivo yo.

L.P: Pues Elisa ha sido todo un placer y me ha encantado charlar contigo de tu libro.

E.L: Igualmente, ha sido un placer.

(fragmento de la presentación de Por qué lloran las ciudades en librería Caótica a cargo del escritor Daniel Ruiz García)