Con la reseña de Los abismos de Iban Petit finaliza mi andadura como parte del jurado en la categoría
de novela, de los Premios Guillermo deBaskerville en su edición 2017, organizada por la página Libros Prohibidos.
Echando la vista atrás, debo reconocer que han sido cinco
lecturas muy interesantes y que sin la participación en este premio, puede que nunca
me hubiera acercado a ellas. Me quedo con detalles tan importantes como el
conocer a escritores no tan mediáticos, con un talento enorme y con obras con
un denominador común, dan pie a la reflexión y están cargadas de sentimientos que invitan
constantemente a la reflexión y hoy en día está bien que la lectura nos haga
salir de nuestra zona de confort para disfrutar en algunos casos y tener momentos de autoevaluación en otros.
Autor: Iban Petit.
Editorial: Expediciones Polares.
Año: 2016.
Género: Drama, Narrativa contemporánea.
Páginas: 256 páginas.
ISBN: 9788494597718
Sinopsis:
Sorprendente y conmovedora. Narrada con un pulso apasionante Los abismos nos presenta la historia de tres generaciones de mujeres, de tres vidas de descubrimientos y de retos diarios, de sobresaltos que irrumpen y lo cambian todo. Una historia en la que la soledad, la incertidumbre y la pérdida se entremezclan con la tenacidad, con el amor y, sobre todo, con el asombro.
Esta es una novela llena de precipicios, de saltos al vacío, de noches en vela y de reflexiones brillantes. Una novela construida con precisión que nos habla de lo que somos a partir de lo que fueron quienes nos precedieron y que de forma certera nos dibuja diferentes rostros de la mujer desde la segunda mitad del siglo XX hasta la actualidad. Y todo ello con la literatura como hilo conductor.
Impresiones:
Comienzo esta reseña con sentimientos encontrados. Por una
parte no me gustaría hacer esta opinión sobre Los abismos ahora, puesto
que es un libro narrado de forma tan especial, que una segunda lectura daría para
hablar largo y tendido del libro y con una tercera sin lugar a dudas dormiríamos
con él debajo de la almohada.
He necesitado avanzar en la narración para que uniendo
detalles, momentos y escenas me haya dado
cuenta poco a poco que los mensajes estaban ahí, sólo había que captarlos y
mirar con perspectiva el conjunto desde un ángulo más abierto. Pequeños
detalles que por sí solos no dicen tanto pero que a la larga nos deja un poso
en la mente que nos arroja a los pies de algo grande. Quizás ese haya sido el
problema con este libro, una forma de narrar
del autor un tanto ambiciosa, que a ratos me hacía pelearme con la historia,
para después, con cada escena portentosa sentir el éxtasis de la lectura. Sin
grandes despliegues descriptivos, Iban Petit es capaz de hacernos viajar de
país en país, de épocas oscuras a otras con más libertad pero donde siempre la
mujer ha tenido que sobreponerse para salir adelante. Una comida, un café a la
mesa con Octavio Paz, Borges y otros más son momentos que el autor nos hace
vivirlos como si estuviéramos allí mismos con la fuerza de la palabra, de una
conversación. Otro de los puntos fuertes de esta obra, sus referencias a la
literatura, a los autores, mostrando detalles, anécdotas, citas y alguna que
otra situación que a los amantes de los libros no puede dejar indiferentes. Son
tantas y tan buenas que uno desearía que fueran más.
Tres mujeres, (abuela, madre, hija), tal vez cuatro en
distintas épocas, distintos lugares y situaciones que les hacen regir el camino
que deben seguir o revelarse ante ellas. De forma indirecta nos vamos dando
cuenta de una verdad que siempre está ahí, pero que en la mayoría de los casos
parece que necesita ser recordada a cada instante con cada noticia o a través
de un drama. El papel de la mujer en la sociedad, un protagonismo que en
ciertos momentos se quiere llevar al de actriz secundaria pero que en Los
abismos lo enmarca todo triplicando sus protagonistas y dejando a los
personajes masculinos en simple aparición necesaria. Con un hilo invisible
veremos que las decisiones de una, influirán en las otras pero siempre con un
denominador común, el de no rendirse.
Una obra que es un homenaje a las mujeres luchadoras, a los
libros, los cuales en el fondo sirven de nexo de unión entre ellas y entre el
lector. Puede que el ritmo y el salto entre personajes me haya desorientado en
cierto modo pero las referencias literarias harán que vuelva más de una vez a
releer pasajes de esta novela para encontrar en su palabras de forma pausada
porque me gusta leer y la literatura.
Un libro nunca será para nosotros el mismo libro leído en
épocas diferentes. Con esta joya incluida en los abismos os dejo con el mensaje
de que dentro las hay incluso mejores. Os atrevéis a descubrirlas.
Autor:
A comienzos de 2014 le concedieron una beca para dedicarse un año a escribir su primera novela. Fue publicada un año y medio más tarde, se tituló Anotaciones circulares y resultó finalista del festival Premier Roman de Chambéry (Francia).