Sin duda, el verano no es la mejor época del año para salir al campo o para fijarse en las plantas introducidas en nuestras ciudades. De ahí que aquellas especies que tienen su óptimo vegetativo durante la época estival sean generalmente más desconocidas que las que florecen en otra época del año, en la que las salidas campestres son más habituales.
Eso ocurre con las dos protagonistas de esta entrada, Teucrium spinosum y Malvastrum coromandelianum.
La primera se considera introducida segura en las islas de Tenerife y Gran Canaria (confirmar en http://www.gobcan.es/cmayot/medioambiente/medionatural/biodiversidad/especies/bancodatos/Lista_Especies_Silvestres.pdf). A pesar de que se conoce al menos desde su cita en la obra magna de Webb y Berthelot (Phitografia Canariensis, 1835-50), ha sido poco tratada en trabajos posteriores. Se trata de una planta de aspecto extraño, ya que a la presencia de espinas se une su crecimiento verticilado, lo que le da un aspecto de pequeño árbol de navidad espinoso. En Gran Canaria puede localizarse viviendo en cardales nitrófilos entre Tamaraceite y Teror, justo donde lo encontraron hace más de 150 años los ya mencionados Webb y Berthelot. Curioso caso de persistencia en una cita. Es una planta oriunda del cuadrante suroccidental de la Península Ibérica, así como Italia e Israel.
La otra implicada es Malvastrum coromandelianum. Una especie citada para Gran Canaria, Tenerife y La Palma y considerada igualmente como Introducida Segura. Su origen es la américa tropical, y en la ciudad de Las Palmas es relativamente abundante en jardines poco cuidados y bordes de carreteras (pueden verla también en el blog del amigo Carlos Suárez: http://casuaro.blogspot.com/2010_10_01_archive.html). Como a él, a mí también me costó su determinación, y sólo gracias a la ayuda prestada por Antonio García Gallo y Alfredo Reyes (un máquina), pude conocer de qué especie se trataba.
Espero que a partir de ahora prestemos más atención a las plantas que aprovechan los calores del estío para florecer. Si crecieran en la playa seguro que eran conocidas por todos.
Aspecto general y flor y fruto de Teucrium spinosum
Aspecto general de la planta y detalle del fruto y de la flor cerrada, en Malvastrum coromandelianum
Eso ocurre con las dos protagonistas de esta entrada, Teucrium spinosum y Malvastrum coromandelianum.
La primera se considera introducida segura en las islas de Tenerife y Gran Canaria (confirmar en http://www.gobcan.es/cmayot/medioambiente/medionatural/biodiversidad/especies/bancodatos/Lista_Especies_Silvestres.pdf). A pesar de que se conoce al menos desde su cita en la obra magna de Webb y Berthelot (Phitografia Canariensis, 1835-50), ha sido poco tratada en trabajos posteriores. Se trata de una planta de aspecto extraño, ya que a la presencia de espinas se une su crecimiento verticilado, lo que le da un aspecto de pequeño árbol de navidad espinoso. En Gran Canaria puede localizarse viviendo en cardales nitrófilos entre Tamaraceite y Teror, justo donde lo encontraron hace más de 150 años los ya mencionados Webb y Berthelot. Curioso caso de persistencia en una cita. Es una planta oriunda del cuadrante suroccidental de la Península Ibérica, así como Italia e Israel.
La otra implicada es Malvastrum coromandelianum. Una especie citada para Gran Canaria, Tenerife y La Palma y considerada igualmente como Introducida Segura. Su origen es la américa tropical, y en la ciudad de Las Palmas es relativamente abundante en jardines poco cuidados y bordes de carreteras (pueden verla también en el blog del amigo Carlos Suárez: http://casuaro.blogspot.com/2010_10_01_archive.html). Como a él, a mí también me costó su determinación, y sólo gracias a la ayuda prestada por Antonio García Gallo y Alfredo Reyes (un máquina), pude conocer de qué especie se trataba.
Espero que a partir de ahora prestemos más atención a las plantas que aprovechan los calores del estío para florecer. Si crecieran en la playa seguro que eran conocidas por todos.
