La reproducción de las orquídeas en laboratorio ha evolucionado mucho y hoy es fácil encontrar a la venta multitud de plantas exactamente iguales, gracias a los sistemas de clonado (por extracción de células meristemáticas) lo que nos permite disfrutar a precios económicos de especies de cualquier parte del mundo. Desde luego esas técnicas quedan fuera del alcance de los aficionados, pero cada vez son más los que se atreven al cultivo de semillas in vitro, otro sistema de reproducción que facilita la obtención de muchas plantas de la misma especie, mediante el cultivo de las mismas en diversas mezclas alimenticias que incluyen siempre el agar-agar, una especie de gelatina obtenida de algas marinas.
Encyclia cordigera var. alba Cattleya bowringiana
No es un proceso ni mucho menos sencillo y se basa en una esterilización estricta de todos los materiales, semillas y medios usados en su preparación. Cualquier contaminación accidental durante el proceso, significa el fracaso en la obtención de las plantas por la colonización de hongos de las semillas o de las plántulas. Hay muchas páginas donde explican paso a paso como hacerlo bien. Como la mayoría de aficionados, no nos atrevemos a intentarlo, podemos optar por comprar Frascos o Flask que se encuentran fácilmente a la venta en Webs y Exposiciones y que nos ofrecen por poco dinero, disfrutar en casa del crecimiento de multitud de pequeñas orquídeas dentro de un frasco de cristal hasta que alcancen el tamaño necesario para poder sacarlas y proceder a su plantación.
Las fotografías, son de algunos frascos que compré a "The Orchid Lab" (Theorchidlab) en la última ExpOrquídea. En su página tenéis algunas indicaciones sobre el mantenimiento y plantación posterior, que os resumo: Mantener los frascos cerrados hasta el momento de la plantación en un lugar luminoso (sin sol directo) entre 17 y 32 grados Celsius. Abriremos el frasco cuando las plantas lleguen a la tapa, dejen de crecer o veamos signos de contaminación (aparición de moho en el medio de cultivo o en las plantas).
Si consideras que ha llegado el momento de abrir el frasco (no tengas prisa si están sanas y tienen espacio, a veces llegan a florecer dentro del frasco) porque las plantas ya son manejables, saca las plántulas con cuidado y lávalas bajo el grifo de agua hasta retirar toda la gelatina. Luego selecciona las mejores y descarta las más débiles o pequeñas que tienen menos probabilidades de sobrevivir. Da un baño en alguna solución desinfectante a las elegidas, déjalas secar un poco y luego plántalas individualmente en pequeñas macetas nuevas. Coloca unas bolitas de arcilla de drenaje en el fondo y utiliza sólo musgo sphagnum empapado en agua y escurrido. Déjalas unas semanas en un sitio con buena luz y pulveriza con frecuencia las hojas y vigila que el musgo esté húmedo. No abones en ese período. Cuando hayan crecido un poco más, trasplántalas a nuevas macetitas y ten un poco de paciencia, hasta que el tamaño alcanzado, te permita tratarlas como orquídeas adultas.
Miltonia flavescens
Este método, te permite conseguir fácilmente, muchas plantas de esa o esas especies que te gustan a precios muy económicos. Eso te servirá para aumentar tu colección y también para intercambiar con otros aficionados o simplemente regalar algunas a tus amigos. Habitualmente, los grupos de aficionados acuerdan una compra conjunta entre varios, que permite repartir luego las plantas y tener mayor variedad de especies, en vez de encontrarte al final del proceso con 50 plantas de la misma especie. Pero, sobre todo, es una forma de vivir la experiencia de ver crecer nuestras orquídeas desde que apenas son un pequeño brote verde en la gelatina de cultivo, hasta llegar al momento en que florezcan. Además, los frascos con las plantas son bastante decorativos y verás como llaman la atención de los visitantes de tu casa o invernadero. Anímate a probar, sólo hace falta ... un poco de paciencia.
Rodriguezia decora
En las dos fotografías siguientes, puedes ver un tarro contaminado. Se observa a la derecha, el crecimiento de hongos que van colonizando el medio de cultivo. Si observas contaminación, abre el frasco lo antes posible y evalúa si es leve y puedes salvar las plantas o si no son viables. Vigila con frecuencia, porque en el ambiente de los frascos, si aparecen hongos su reproducción es muy rápida y en pocos días se habrán estropeado las plantas.
Encyclia saltensis
Ref.: http://theorchidlab.blogspot.com.es/