Créame que unos y otros no se hablan. Pero hoy hasta comparten diseño. Los de Berlusconi:
Los comunistas (los de verdad, los de antes):
El resto de berlusconianos tampoco da tregua ni cuartelillo
[secchioni equivale a
nerd]:
El resto de la prensa no se mata mucho. Advierte uno cierta restricción en los titulares en contraste con la tradicional obsecuencia de las portadas italianas cuando arranca un nuevo gobierno. Normal. Nadie levanta el asunto de fondo: si este gobierno cuenta con la suficiente legitimidad democrática, más allá de las formalidades administrativas. Deben tener un miedito…
La Repubblica y sus regionales también titulan y miran al techo:
Sólo un pequeño diario resiste ahora y siempre al invasor… aunque no le quito razón si duda de sus intenciones porque hasta ahora eran la periferia inteligente del berlusconismo:
Aunque ser inteligentes no les da razón, al menos plantean uno de los debates hoy debidos, más obligatorios que nunca. Es una de las cosas que el periodismo debe hacer.