El tiempo ha pasado volando y hemos llegado a los seis meses o
medio año, no entiendo cómo está pasando todo tan deprisa.
Cada día mi pequeña está más bonita y nos
pasamos el rato achuchándola y dándola millones de besos.
Este último mes ha estado plagado de
pequeños hitos que nos han emocionado, pero especialmente a su hermano que está
deseando que corra detrás de él y que le hable (ya veremos luego si piensa lo mismo)
En datos del pediatra Irene mide ya 70,5
cm, muy por encima del percentil más alto, y pesa 7100 kg, aquí se mantiene en una
línea del percentil entre el 30-50.
Ha comenzado a hacer los 5 lobitos y casi
nos dice adiós con la mano. Se mantiene sentada sin apoyo aunque alguna vez se
le olvida poner la mano y acaba esmorrandose contra el suelo, pero es más dura
que las piedras y no llora.
Sigue durmiendo fenomenal, cosa que no nos
cansamos de agradecer su padre y yo, aunque el despertar de entre las 3 y las 5
de la mañana lo sigue manteniendo. Es una niña dormilona que si no la despierto
para llevarla al cole (los días que está el abuelo) puede estar durmiendo hasta
las 10 de la mañana desde las 9 de la noche más o menos (salvo ese único
despertar de madrugada).
La gusta mucho chupetear la fruta y las
papillas también la encantan, hemos empezado a darla purés y también la gustan mucho
y con el currusco de pan se entretiene un montón de rato.
Donde hemos visto un pequeño parón o
incluso retroceso ha sido en el tema gateo, en los meses anteriores mostraba un
mayor interés por estar boca abajo e incluso comenzaba a meter rodillas, ahora
no quiere estar boca abajo, prefiere estar sentada y arrastrar su culito
(exactamente como hizo su hermano).
Coge objetos con las dos manos y se los
pasa de una a otra, también ha empezado a rasgar papel y es una acción que le
saca más de una carcajada.
Estos últimos días ha comenzado a decir
claramente la sílaba ma, y cuando coge carrerilla o la dices "mamá"
ella te contesta con un "mamá", se perfectamente que no es que me
está llamando, que es un balbuceo de imitación, pero a mí me da igual porque me
parece precioso, además normalmente los bebés comienzan con el pa-pa-pa pero
ella ha preferido el ma-ma-ma.
A Eric le llama a gritos o chillidos y se
pone muy nerviosa si ve que es la hora de que vuelva del cole y no le ve
aparecer por la puerta, cuando vamos a recoger a su hermano al colegio y le ve la falta tirarse del carro, es auténtica devoción lo que siente por su hermano.
Sigue siendo una niña muy tranquila que no llora salvo que esté muy cansada, lo que si que hemos notado este último mes que está empezando a extrañar y que cuando tenemos reunión familiar al principio se pone un poco nerviosa pero le dura tan sólo un par de minutos.
