Hace unas semanas tuve la suerte de poder ir hasta los
campos de manzanos de Naturnes, Nestlé, en Lleida. Fue una experiencia maravillosa no solo por la compañía sino también por la cantidad de cosas que pude aprender.
Acostumbrada a los campos de cereal de mi Castilla ir a unos campos frutales era toda una 'innovación'.
Tengo que decir que el trato, mimo y cariño con el que nos recibió la
familia Real Piqué, dueña de la finca, fue inmejorable. Allí pudimos conocer a varias generaciones, desde el abuelo hasta el nieto pasando por los hermanos
Ramón y Carlos que llevan actualmente el negocio.
En concreto esta explotación produce melocotón amarillo, peras y manzanas golden para los tarritos de fruta de Naturnés.
¿Y qué fue lo que más me sorprendió?
- Lo más llamativo fue conocer que
existen dos tipos de fruta (sin contar la ecológica). La que se produce pensando para
consumo infantil y la de consumo adulto. No tienen nada que ver.
La fruta que va a consumir un niño lleva a sus espaldas muchísimos controles y un dato importante no puede llevar más de
10 ppb de residuos pesticidas (10 miligramos de cualquier principio activo en 1000 kg).
¿Sabéis cuanto se admite en la fruta de consumo adulto? entre
100 y 75.000 ppb. Es decir que aquella madre que decide ir a la frutería del barrio a comprar ella misma la fruta para luego elaborar en casa la papilla a su hijo está comprando fruta de adulto. Fruta que puede tener residuos pesticidas admitidos pero no para los alimentos infantiles.
10 ppb (los polvos negros del fondo del tarrito)
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La fruta infantil se recoge más tarde que la fruta de adulto, aprovechando al máximo su maduración al sol y en el propio árbol para darle el grado justo de dulzor y de almidón (conservante natural que lleva la fruta). Las manzanas, melocotones, peras... de adulto se recogen muchísimo antes y se deja en cámaras para que se conserven más tiempo. La fruta infantil se recoge y se envía en seguida a la fábrica para la elaboración de la comida. Del árbol al tarrito, en un pis pas.
- Otro dato interesante, y que no se suele conocer, es que
la fruta está controlada en todo momento. Desde una campaña hasta la siguiente (elección del campo, florecimiento, formación del fruto, cosecha, elaboración y control final). Los técnicos de Nestlé se encargan de realizar seguimiento al producto para comprobar que cumple con las normas específicas que impone la UE, en cuanto a alimentos para consumo infantil, y las suyas propias que son mucho más exigentes.
Si en algún momento en la cosecha se detecta algún tipo de anomalía se descarta.
Técnica para saber el grado de dulzor y almidón de la fruta
- Los campos deben estar
alejados de núcleos de población. Algo que ya me quedó claro cuando visité los campos de cereal de Nestlé.
- La fábrica está situada en
Sevares, Asturias y para elaborar los tarritos de fruta solo utilizan fruta, pelada, triturada y cocinada como haríamos en casa, pero con una batidora más grande. Sin conservantes ni colorantes, azúcares añadidos, almidones (salvo los propios de la fruta), gluten o aceite de palma.
También pude recoger manzanas directamente del árbol (importante cogerlas con rabito), conocer las técnicas 'naturales' para eliminar la mosca y el gusano utilizando feromonas y disfrutar comiendo tan ricas manzanas.
Trampas con feromonas para atrapar al macho de las moscas