Cocinas de Mundo nos lleva a Badajoz, y aunque paso al menos dos veces al año por esa provincia de España, pocas veces puedo detenerme todo lo que me gustaría e investigar su gastronomía. Por eso he pedido ayuda a Rosa y me ha comentado de un dulce de Semana Santa que ella hace y antes que ella, su abuela y su madre, que viene que ni pintado en esta fecha. Así que, me he puesto a ellas y se las traigo.
Ingredientes:
250 ml de Aceite suave
Cáscaras de naranja
Harina, la que precise
25 gr de Levadura fresca
1 cucharada de Levadura en polvo
Zumo y ralladura de 1 naranja
Ralladura de 1 limón
1 chupito de Anís
1 cucharadita de Sal
1 cucharada de Matalauva (anís en grano)
250 gr de Azúcar
150 ml de Agua
En primer lugar freímos el aceite con la cáscara de naranja, retiramos del calor y le añadimos la matalauva.
Diluimos la levadura en el agua tibia.
Mezclamos los líquidos e incorporamos las ralladuras, el zumo y el azúcar revolviendo bien para que se diluya.
Vamos añadiendo la harina tamizada con la levadura en polvo, poco a poco hasta conseguir una masa aceitosa que se desprende de las manos.
Tomamos porciones que vamos moldeando y poniendo en placas forradas de papel de hornear y las dejamos reposar tapadas hasta que doblen su volumen.
Calentamos el horno a 200º y espolvoreamos azúcar por encima de las bollas (si queremos las adornamos con algún fruto seco e incluso con un huevo)