En las sesiones de grabación de Get Back.
Inauguro esta nueva sección, con uno de los músicos más importantes que nos ha dado la música, que no es otro que George Harrison. El que fuese miembro de The Beatles, y que durante su trayectoria en el grupo fuese subiendo de nivel, disco a disco, de manera impresionante, hasta ponerse codo con codo con Lennon y McCartney en cuanto a composición se refiere, algo que muy poquitos pueden decir.
En cuanto a su etapa en solitario, para mi el All thing must pass de 1970 es uno de los mejores discos que se han hecho, canciones que ya estaban preparadas en el final de los Fab Four, pero que ya no tenían cabida porque el grupo moría y los empaquetó y sacó a la luz, una vez finiquitados los 4 magníficos. Después singles muy buenos, dentro de discos algo irregulares. También destacar su unión con otros monstruos como Tom Petty, Bob Dylan, Jeff Lynne y Roy Orbison en los Traveling Wilburys.
Sin embargo, uno de mis temas preferidos compuesto por George, no es otro que While my guitar gently weeps del disco blanco, 1968, dónde ya le acompañó en la grabación su amigo (si, amigos siempre fueron, aunque se quitaran las novias, hablaremos de Patty Boyd) Eric Clapton, tremendo guitarrista, que le da al tema esa excelencia que destila.
Cuando mi guitarra gime (o llora suavemente) ha sido versionada y tocada muchas veces, pero yo os voy a poner 3 vídeos que para mi son los mejores, primero la tocada por George Harrison y Eric Clapton en el Concierto por Bangladesh en 1971.
Y en cuanto a las versiones realizadas me quedo con 2, la primera la de la Jeff Healey Band en el directo de Montreux en 1997, extraordinaria en su interpretación, con un punteo extraordinario de Jeff Healey, que recordemos era ciego. La grabaron en estudio en su álbum de 1990 Hell to pay.
Y por último, un vídeo que desde que lo puso el amigo Paco (te echamos de menos) lo habré visto 50 veces (y no engaño) donde interpretan el tema Tom Petty, Jeff Lynne, Steve Winwood, Dahni Harrison (hijo de George) y un Prince que hace uno de los sólos de guitarra más alucinantes que haya visto, ante la cara de asombro del hijo de George, porque Prince es un enorme guitarrista. Esto fué en un tributo a George en 2004.