No es que el personaje fuera santo de mi devoción, pero el otro día viendo This is it, documental a más gloria y gracia de Michael Jackson, me quedé enganchado observando lo curiosa que es la naturaleza humana. Para empezar, queda claro en la película, que ser famoso o multimillonario no te da ser feliz, todo el tiempo vemos a una persona acomplejada, apocada y que oculta sus muchos problemas queriendo satisfacer a los demás y esperando su aceptación.
Es curioso que la frase que más se le escucha es la de "dios os bendiga", "god bless you". También me sorprende el grado de perfeccionismo, fruto seguramente de los muchos años dedicado al star business. Asistimos pues durante casi dos horas a la relación entre unas personas que idolatran al cantante con el que trabajan y a un ídolo apocado, con baja autoestima y quizás temeroso de no ser aceptado. La conclusión a la que uno llega es que quizás, tema defraudar como seguramente así ha pasado, a los que cuando le conocen esperan un semidios que en realidad no es más que otra persona. Es entonces muy difícil aceptarse y madurar.