1.- ¿Por qué escribes?
Escribo porque todo lo digiero a
través de las palabras, porque me ayuda a pensar más hondo y a sentir más claro.
Escribo para darle una salida a la alegría y al rencor. Escribo para rescatarme
de la confusión, para no dar nada por sabido y para no sentirme sola. Para
tener un espacio inmune a la mentira, a la autocompasión y a la
autocomplacencia, un lugar donde me siento más valiente y honesta.
2.- ¿Cuáles son tus costumbres, preferencias, supersticiones o manías a
la hora de escribir?
Escribo en cuaderno, corrijo
–mucho, mucho- en ordenador, siempre con mi tabaco de liar a mano. Un poema
solo lo doy por terminado cuando pasa la prueba de que lo haya olvidado y
vuelva a leerlo con ojos casi nuevos, como si yo fuera otra.
3.- ¿Cuáles dirías que son tus preocupaciones temáticas?
La memoria, las injusticias, el
amor, el fracaso y las segundas oportunidades, las contradicciones…
4.- ¿Algún principio o consejo
que tengas muy presente a la hora de escribir?
Buscar la sencillez y la claridad
(que son lo contrario de lo simple y lo fácil); que lo anecdótico trascienda y
pueda pasar a ser historia común. Que yo aprenda algo nuevo en el proceso de
escritura.
5.- ¿Eres de las que se deja llevar por la historia o de las que lo
tienen todo planificado desde el principio?
Mitad y mitad. Tengo claro de qué
quiero hablar, luego me dejo llevar hasta que algo inesperado me sorprende y
entonces sé que eso era lo que tenía que aprender en ese momento.
6.- ¿Cuáles son tus autores o libros de cabecera?
Muchos. Yehuda Amijai, Sharon
Olds, Szymborska, Harry Martinson… tengo especial querencia por los poetas
polacos, nórdicos y norteamericanos. Y aprendo siempre de mis contemporáneos:
David González, Gsús Bonilla, Jorge Riechmann, Cristina Morano, Inma Luna,
Quique Falcón… Ahora estoy recuperando la lectura de españoles y sudamericanos:
León Felipe, Blas de Otero, César Vallejo, José Agustín Goytisolo, Olivero
Girondo…
7.- ¿Podrías hablarnos de tu último proyecto? Bien lo último que hayas
publicado o lo último que hayas escrito o estés escribiendo.
En el año 2007 publicó su primer
libro de poemas, La alambrada de mi boca
(Editorial Baile del Sol), cuya segunda edición apareció en el 2009. En la
misma editorial se reeditó su libro de relatos En días idénticos a nubes, y publicó su segundo poemario, Alfabeto de cicatrices (segunda edición,
2013). En 2012 vio la luz Entre
paréntesis (Casi cien haikus), con la editorial La Baragaña y en 2013 Las sumas y los restos, “V Premio de
Poesía Blas de Otero- Villa de Bilbao 2012” , publicado por la editorial Devenir.