Aquellos amables lectores que aún se pasan de vez en cuando por aquí habrán
notado que mis entradas escasean cada vez más. Durante unos años, este blog fue
un espacio vivísimo de intercambio, un lugar de reunión para gente tocada por el
virus de la lectura. Pero parece que la era dorada de los blogs ha llegado a su
fin, tocada de muerte por las redes sociales y el deseo de inmediatez. A medida
que los lectores y comentaristas han ido desapareciendo, yo también he perdido
interés por seguir escribiendo aquí. Como he repetido a menudo, los lectores son
los que dan vida a un blog. Sin ellos, mejor haría uno en retirarse a escribir
su diario: ahí sabes seguro que tienes al menos UN lector interesado.
Sin
embargo, de vez en cuando me asalta el deseo de compartir con alguien
curiosidades librescas que me han llamado la atención, o reflexiones que
quisiera contrastar. Así pues, aunque no excluyo seguir apareciendo por aquí de
vez en cuando, he decidido probar una nueva vía: la newsletter.
Lectores curiosos por Elena Rius será un pariente cercano de este blog; hablaré de
libros y de lectura, pero también de otras cosas (arte, cultura, cosas que
pasan) que están en mi radar. No sé aún con qué periodicidad lo haré. Todo
dependerá de que haya alguien al otro lado para conversar. Por eso, me gustaría
que los fieles seguidores de este blog -confío en que todavía quede alguno- se suscribiesen a esta nueva publicación.
Prometo responder a todos sus comentarios. Y, por supuesto, es gratis.
Aquí les dejo el enlace. Todos serán muy bienvenidos.
¡Empieza una nueva aventura!
He de confesar q la resistencia bloguera vivimos esto como una pequenia deserción. Bueno, por esa resistencia hablo por mí, quedamos pocas, como dices. No me gusta ese nuevo sistema y ver los domingos matin mi inbox llena de newsletters, prefería meterme donde quería, no q me lo metieran con cuchara semanalmente. Tengo la sensación que es "un trabajo" (una chore) para quien publica, una cita semanal q "han de hacer", no como en el blog q publicas cuando te pasa por ahí... Seré yo la rara.
ResponderEliminarY me encanta q sea gratis, pq personalmente creo q esa plataforma fue creada para q la gente testee las aguas y acabe cobrando por la suscripción. Es el capitalismo babies. Todo un rollo.
Pero ya te sigo! :)
besos
di
Te comprendo, Di. Yo también he tenido muchas dudas. Durante un tiempo, pensé que, dado el declive del universo bloguero, simplemente debía dejar morir el blog y ya está. Pero, de vez en cuando, me descubro a mí misma redactando mentalmente un post. Un post que sé que no voy a publicar porque no me estimula pensar que nadie (o casi, hay honrosas excepciones, como la tuya) va a leerlo. Así que voy a probar este otro método. Sin presión: no cobro nada, pero tampoco me comprometo a nada. Escribiré lo que me apetezca, cuando me apetezca. ¡A ver qué pasa! Seguimos leyéndonos...
EliminarBueno, era un poco broma, pero decirte solo "buena suerte en la siguiente etapa" me parecía aburrido :):) Me encanta lo de redactar posts mentalmente (es literalmente así!!!) y esto es solo otro formato, al final es lo mismo, lo q pasa es q nos da pena q se haya acabado lo del bloguerío, con lo chulo q fue en su día (aunque he de decirte q si de rebote caigo en alguno, hay gente aún con 100 comentarios! No sé quienes son ni nada, pero debe haber alguna aldea gala por ahí).
EliminarMuchas ganas de leerte donde sea, y ya sé q no haces resenias ni recomendaciones, pero de vez en cuando algún post como aquel del anio pasado plissss... saqué unos cuantas buenas lecturas de este anio ahí... :)
Me da mucha pena tu marcha, Elena. Te seguiré a la newsletter, pero con otra identidad. Si algún día te escribo (y suelo escribir :) ), me presentaré en condiciones.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
Encantada de que continúes conmigo, Dorotea. ¡Son ya muchos años! Seguimos en contacto por esa otra vía. Un abrazo.
Eliminar