domingo, 24 de septiembre de 2023
Isaac Bashevis Singer: Keyle la Pelirroja
lunes, 9 de mayo de 2022
Isaac Bashevis Singer: El seductor
- Su prosa depurada y dinámica.
- Sus personajes y las interacciones que éstos mantienen entre ellos.
- Ciertos giros argumentales.
- Sus últimos capítulos. Introducen algún que otro elemento abruptamente, pero cierran con tino múltiples arcos y subtramas.
- Su humor, fino o cáustico según se tercie.
- El sustrato psicológico que despliega.
- Su trasfondo misántropo y pesimista.
- Sus críticas a la comunidad judía y, en concreto, las que dirige a los religiosos, por hipócritas o por intransigentes según se tercie.
- Las agudas observaciones que hace en torno a la ciudad de Nueva York (y América en general).
- Le falta empaque.
- No me parecen verosímiles las disertaciones de corte teológico de muchos personajes (algunos de los cuales admiten saber poco de religión).
- En ocasiones, Singer repite información que ya había dado previamente. Aunque supongo que estas reiteraciones se deben a que El seductor se publicó originalmente por entregas, pueden llegar a molestar.
- Igual que me sucedió con Escoria, del mismo autor, pienso que a esta novela le falta concesión. En ningún momento se hace larga, pero el mensaje que transmite es demasiado explícito.
domingo, 27 de marzo de 2022
Isaac Bashevis Singer: Una ventana al mundo y otros relatos
Título versión inglesa: Job and Other Stories
Año de publicación versión inglesa: 1972
Traducción: Carlos Lagarriga
Valoración: Entre recomendable y está bien
Una ventana al mundo y otros relatos recupera seis narraciones breves del premio Nobel Isaac Bashevis Singer. Todas, exceptuando "El huésped", inéditas en nuestro idioma hasta la fecha. En general me han parecido destacables, si bien pienso que algunas son mejorables.
Por ejemplo, me atrevería a decir que "El último regalo" es algo plana. Recuerda al Paul Auster más rutinario, lo cual es indicativo de calidad monocroma. Asimismo, "Job" me ha encantado, porque abunda en ideas vinculadas con el pesimismo filosófico al que me adscribo. Sin embargo, creo que el formato que Singer emplea para esta historia no es el adecuado.
Sea como fuere, merece la pena leer los textos del polaco. Tienen premisas la mar de sugerentes y pasajes logradísimos; sus reflexiones de corte misantrópico, amén de las congojas existenciales y espirituales que supuran, deslumbran por su lucidez; por no hablar de que las pinceladas de autoficción y las estrategias metaliterarias que emplean se antojan sumamente audaces.
También de Isaac Bashevis Singer en ULAD: Aquí
lunes, 4 de marzo de 2019
Isaac Bashevis Singer: El certificado

Título versión inglesa: The Certificate
Año de publicación versión inglesa: 1992
Traductor: Carlos Lagarriga
Valoración: Entre recomendable y está bien
También el argumento de la novela es reminicente de otros trabajos de Singer: como ya he adelantado, la acción transcurre en Varsovia, y hay callejeo y enredos amorosos a cascoporro. Por lo general, la historia es interesante y está bien llevada, aunque quizás se le podría reprochar que le sobra alguna subtrama, o que tiende a repetir eventos y situaciones. Por cierto, entiendo que dicha reiteración está justificada: vivir a salto de mata y participar de un proceso burocrático para conseguir un dichoso certificado es lo que tiene. Sin embargo, me hubiera gustado que el autor paliara la sensación de bucle, de falta de progreso, que por momentos se tiene cuando se está leyendo este relato.
El componente judío de El certificado tiene un peso importante. No en balde, hay quien afirma que esta es la novela «más judía» de la bibliografía de Singer. Me lo creo: los términos en hebreo que salpican estas páginas son tantos que hay un prolijo glosario de definiciones al final del libro. Personalmente, me gustó que el escritor no se limitara a victimizar al pueblo judío, pese a que tanto el contexto histórico en el que transcurre El certificado como su argumento se prestaran a ello. De modo que aquí hay una denuncia al antisemitismo y, al mismo tiempo, una feroz autocrítica al judaísmo y al fanatismo de algunos de sus practicantes.
La ambientación es uno de los aspectos más logrados del relato. Los que conozcan la coyuntura histórico-político-social de la época la disfrutarán especialmente. Igualmente destacaría la sensibilidad de Singer a la hora de apelar a lo universal en el hombre, su maestría al plasmar la psicología de los personajes con apenas unas pinceladas y el ya mencionado estilo, dinámico pero atento al detalle.
Pese a todas estas virtudes, no puedo recomendar del todo El certificado. Y es que a este texto no le hubiera ido mal una revisión final, que puliera aquí y allá las reiteraciones del argumento o los puntuales gazapos del estilo. En definitiva, esta es una novela disfrutable que, no obstante, le deja a uno la sensación de que podría haberse mejorado.
También de Isaac Bashevis Singer en ULAD: Shosha, La familia Moskat, La destrucción de Kreshev, Escoria, Una ventana al mundo y otros relatos, El seductor, Keyle la Pelirroja
lunes, 14 de enero de 2019
Isaac Bashevis Singer: Escoria
Poco más que añadir. Pese a sus defectillos (un argumento reiterativo y una extensión algo exagerada para lo que se nos está contando), Escoria vale la pena. A su manera, recuerda a la magistral Memorias del subsuelo, tiene una prosa correcta, buena ambientación y un protagonista interesante. Tampoco es una novela que caiga en el olvido nada más acabarla. Eso lo consigue un final algo efectista, pero que no resta seriedad al conjunto y que, de hecho, cierra la narración con un broche memorable. Lo tengo claro: insistiré con Singer.
sábado, 9 de septiembre de 2017
Moyshe Kulbak: Los zelmenianos

Título original: Zelmenyaner
Traducción: Rhoda Henelde y Jacob Abecasis
Año de publicación: 1931 (libro 1) y 1935 (libro 2)
Valoración: Recomendable (o algo más)
domingo, 24 de abril de 2016
Colaboración: TochoWeek #7. La familia Moskat de Isaac Bashevis Singer
Título original: The Family Moskat
Año de publicación: 1950
Páginas: 816
Traducción del ingles: Juan José Guillén
Valoración: muy recomendable, difícil
También del mismo autor en ULAD: La destrucción de Kreshev, Shosha, Escoria, El certificado, El seductor, Keyle la Pelirroja, Una ventana al mundo y otros relatos
lunes, 10 de diciembre de 2012
Der Níster: La familia Máshber
sábado, 30 de abril de 2011
Isaac Bashevis Singer: Shosha

Año de publicación: 1978
Idioma original: yiddish
Calificación: Recomendable
¿Aaron Greidinger? Sí, lo conozco. Se crió aquí, era hijo del rabino. Prometía mucho cuando era un niño, siempre estudiando y con esos libros tan gordos a cuestas. Parecía que se iba a romper la espalda cualquier día. Y mírelo ahora. Un mantenido. Escritor, se hace llamar. ¡Ja! En mis tiempos, la profesión de escritor era algo honorable. Cada libro o cada obra de teatro era un acontecimiento, algo que había te revolvía por dentro, no sé si me entiende. Algo que uno guardaba en su memoria toda la vida, porque enseñaba algo nuevo. Pero lo que Aaron escribe no vale ni el papel en el que está impreso. Si es que ha llegado a publicar algo alguna vez... Porque siempre habla de su próxima obra y nunca termina ninguna. Si su padre pudiera verlo... qué vergüenza.
Y la vida que lleva. ¿Sabe usted la vida que lleva? Aquí todo el mundo habla y al final toda Varsovia sabe lo que pasa. Son los años treinta, los que hemos vivido la Gran Guerra estamos de vuelta de todo, no sé a quién pretende sorprender haciéndose el transgresor con su vida lividinosa. Pero déjeme que le cuente: tiene relaciones con Celia, la mujer de uno de sus mejores amigos ¡y mayor que él! También está liado con una comunista, Dora, un verdadero cáncer para este país. Y con una actriz americana (judía, sí, pero americana. Habla yiddish como si masticara un zapato), ¡que también está casada! Y, por si fuera poco, también se trajina a la criada, Tekla, cuyo novio está vaya a saber dónde. Qué poca vergüenza.
Y ahora dice que se quiere casar con Shosha. ¡Shosha! Ah, ¿no conoce a Shosha? Es una de las hijas de Bashele, una vecina. De lo peor del barrio, ya le digo. El marido de Bashele las abandonó cuando las crías eran aún pequeñas y se lió con otra mujer. Vaya panorama. Pero Shosha... jugaba con Aaron cuando ambos eran niños. Él es uno o dos años menor que ella, no recuerdo bien, pero ya de crío era mucho más listo. Ella es más tonta que un nabo. Casi no sabe leer ni escribir y la echaron de la escuela por zoquete. Además, cuando era niña tuvo una enfermedad extraña y dejó de crecer. Tiene más de veinte años y parece una cría de ocho. Y mentalmente se ha quedado igual, todos en el barrio sabemos que es retrasada, pero no se lo decimos a Bashele. Lo que le faltaba: tener semejante carga en casa y saber que todos los vecinos nos damos cuenta de que su hija es subnormal.
Con ella dice Aaron que se quiere casar, que es el amor de su vida. ¡Ay, qué risa! ¡Si es incapaz de ir a la compra sola, porque se pierde! ¿Cómo va a ser una esposa? Ni siquiera podrá darle hijos, es imposible que crezca nada en ese cuerpecillo de muñeca. A saber qué intenciones tiene Aaron. ¿Quiere que le diga lo que pienso? Quiere que todo el mundo piense que es un buen hombre y que va a cuidar de ella. Pero qué va. Lo que quiere es tener una criada que no moleste y poder seguir acostándose con todas esas mujeres experimentadas ¡y casadas! Si lo supiera su padre...
También del mismo autor en ULAD: La destrucción de Kreshev, La familia Moskat, Escoria, El certificado, El seductor, Keyle la Pelirroja, Una ventana al mundo y otros relatos