San Martiño de Tours en el Pórtico del Paraíso

Es patrón de los soldados, tejedores y fabricantes textiles.

'Descubrir la calidad del San Martín soldado con el pobre que ocupa la hornacina renacentista del tímpano que suponemos estuvo destinada, como en el modelo compostelano, al Pantocrátor, hasta las reformas, nunca bien documentadas, del siglo XVI. 

Ocupa este lugar privilegiado como patrón de la Catedral y del Obispado y desde el siglo XIX en una cercanía oportuna con una imagen de Santiago sedente, colocada sobre un pedestal a los pies del parteluz y por tanto ambos santos unidos en la verticalidad del eje del pórtico.

Es una talla de madera policromada, de mano muy diestra y con una disposición elegante. Copia con exactitud la imagen procesional que Gregorio Fernández trabajó para la Iglesia Vallisoletana de San Martín. Ya hace muchos años en 1984 subrayamos en un artículo esta relación, el que esto escribe y el inolvidable José González Paz "El san Martín caballero de la Catedral orensana puede ser de Gregorio Fernández." (La Región 11 de noviembre de 1984).

Pero es ahora una vez limpio cuando su valor se hace mayor. La policromía con delicados esgrafiados de principios del siglo XVII hace más bella esta talla evidentemente vallisoletana y como me insinúa mi amigo el subdirector del Museo Nacional de Escultura de Valladolid, Manuel Arias, atribuible a los Sierra, Tomás o Pedro de la Sierra, que tan de cerca siguieron a Fernández con calidad sobresaliente y a quienes también Martín González atribuyó el emotivo busto de la Dolorosa de Nuestra Catedral.

El San Martín de Valladolid es la primera obra documentada de Gregorio Fernández, realizada en 1606 y costeada por un hermano de Agustín Costilla, pastelero avecindado en Palencia, que había muerto en América. Así que la réplica de Ourense será de hacia 1610. Una importante escultura, de algún modo ahora revalorizada, para evocar y orar a nuestro patrón".

(Miguel Ángel González García, El Faro de Vigo)

Con amigos de Aalst, hermados por el patrón

Hoy día de San Martiño, fiesta patronal de la ciudad de Ourense (y su diócesis), nos hemos encontrado con nuestros amigos André-Michel Vermeersch y Milein, su esposa, que también celebran la fiesta de Sint-Maarten. 

Son de Aalst (Bélgica): allí es día grande, en el que los niños reciben juguetes y dulces. Hay asimismo una gran feria anual. 
Desde nuestra mutua vinculación al Rotary Club, y tras su instalación en las inmediaciones de a Pobra de Trives, dónde regentan un Hotel con encanto, les conocemos y tratamos. 

Al final del improvisado encuento Milein nos obsequió con un dulce presente de su tierra: ¡algo más que chocolate!

Fijáos en su iconografía.

Uno de los fines prioritarios de aquella centenaria organización de servicio, extendida por todo el mundo, es la paz, del que incluímos este pensamiento: “¿Qué es la paz”? se preguntaba aquella mujer maravillosa, reciente santa, Teresa de Calcuta. Y se respondía: “El fruto del silencio es la oración, el fruto de la oración es la fe, el fruto de la fe es el amor, el fruto del amor es el servicio y el fruto del servicio es la paz”.

Aalst -capital del Flandes Imperial-, en la católica Bélgica / Flandes oriental, es hoy es un importante centro industrial, comercial y mercado del lúpulo. Delante, en la plaza, está la estatua del fundador de la primera imprenta de estas tierras, Dirk Martens. Su Colegiata de Sint Maartin, gótica del siglo XV, tiene un tabernáculo con esculturas de Hieronymus Duquesnoy. 

Hay, además una tabla pintada por P.P. Rubens en 1626, encargo de la Fraternidad de San Roque con el santo patrono de la peste con el 'uniforme de peregrino'. La tabla sirvió como modelo para la pintura de mayor porte del altar consagrado al santo.

Para finalizar, aquí os dejo una foto perteneciente al grupo de San Martiño de la Catedral del pórtico del paraíso, que tomamos días antes de la que incluímos arriba: es el Mendigo - Cristo: con su escudilla, bastón y pata de palo, el que pide al caballero San Martiño recibiendo la mitad de su lujosa vestimenta... (y el que tenga oídos para oír que oiga...).

San Martín y el mendigo (Cristo) del Pórtico del Paraíso recién restaurados la semana pasada por Vania y su equipo.