Publicado por lanacion.com. Fuentes: Agencias AFP, EFE y AP
El balance preliminar anual de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe prevé una importante caída en el producto de todos los países de la región y el crecimiento del desempleo.
SANTIAGO DE CHILE.- El ciclo de prosperidad y alto crecimiento en América Latina llegó a su fin y la Argentina lo sentirá el año próximo cuando su expansión a "tasas chinas" sufra una importante merma. Eso permite afirmar un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que proyecta para 2009 el menor crecimiento regional en seis años, con una expansión de 1,9%, desde el 4,6% registrado este año.
Aunque en todos los países de la región habrá una caída en el producto por la crisis mundial, en la Argentina será más profundo: según los cálculos de la Cepal, de una expansión de 6,8% en 2008 pasará a un crecimiento de 2,6% el próximo año. También Uruguay verá caer fuertemente su expansión, desde un 11,4% al 4 por ciento.
En la región, el cambio de escenario tendrá como consecuencia un aumento en la tasa de desempleo desde el 7,5% actual a niveles entre 7,8 a 8,1%, con un incremento en el mercado informal. El efecto directo, indica la Cepal, será un aumento de la pobreza, que ya afecta a 182 millones de personas.
"Estamos ante el final de un período con escasos precedentes en la historia de la región", dice la Cepal en su balance preliminar anual presentado hoy en Santiago, sede del organismo dependiente de las Naciones Unidas.
Por otra parte, se señala que la mermada expansión seguirá sostenida por las condiciones relativamente favorables del mercado de las materias primas.
El ciclo de bonanza, con un crecimiento promedio regional de 5% anual durante los últimos años, estuvo acompañado por una mejora de los indicadores del mercado laboral y una disminución de la pobreza en la región, que volverán a resentirse a partir de 2009.
Pero 2009 tiene un horizonte distinto: la región, como el resto del mundo, sentirá los efectos de la crisis, cuya magnitud, para la Cepal, aún escapa de la posibilidad de cálculo.
"La profundidad y duración de la recesión dependerán de la eficacia de las medidas de estímulo de la demanda implementadas para compensar la caída del gasto privado, así como de la vuelta a la normalidad de los mercados crediticios", se advierte en el documento.
Según la Cepal, las medidas adoptadas por la Reserva Federal (Fed) estadounidense y los bancos centrales de otros países deberían servir para que las economías desarrolladas superen la etapa más profunda a partir del segundo semestre de 2009, aunque aún no hay certezas.
Por tal razón "no puede descartase un escenario más pesimista", en el que se acentúe la recesión y la restricción crediticia se prolongue, advierte el organismo internacional.
La crisis afectará a América Latina por una esperada reducción del volumen y el precio de sus exportaciones, como consecuencia del descenso en la cotización de las materias primas, motor del crecimiento regional.
Se espera, además, una caída de las remesas enviadas por sus trabajadores emigrantes, fundamental para la mayor parte de las economías del Caribe, Centroamérica y México, y una baja de la inversión extranjera directa y de la demanda de servicios turísticos. Los países latinoamericanos enfrentarán también mayores dificultades de acceso y un mayor costo del financiamiento externo.
La Cepal rescata como consecuencia positiva de la crisis la reducción de los niveles de inflación, cuya escalada alcista afectó a la mayoría de los países de la región este año. Se estima que el indicador baje desde 8,5% a 6% en 2009.
El informe advierte también sobre un deterioro de los niveles de distribución de la riqueza y aconseja a los países de la región adoptar "soluciones coordinadas" para enfrentar la crisis, sobre todo con medidas destinadas a impulsar la demanda, y fomentar el comercio y la integración regional. lanacion.com. Fuentes: Agencias AFP, EFE y AP.
El balance preliminar anual de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe prevé una importante caída en el producto de todos los países de la región y el crecimiento del desempleo.
SANTIAGO DE CHILE.- El ciclo de prosperidad y alto crecimiento en América Latina llegó a su fin y la Argentina lo sentirá el año próximo cuando su expansión a "tasas chinas" sufra una importante merma. Eso permite afirmar un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que proyecta para 2009 el menor crecimiento regional en seis años, con una expansión de 1,9%, desde el 4,6% registrado este año.
Aunque en todos los países de la región habrá una caída en el producto por la crisis mundial, en la Argentina será más profundo: según los cálculos de la Cepal, de una expansión de 6,8% en 2008 pasará a un crecimiento de 2,6% el próximo año. También Uruguay verá caer fuertemente su expansión, desde un 11,4% al 4 por ciento.
En la región, el cambio de escenario tendrá como consecuencia un aumento en la tasa de desempleo desde el 7,5% actual a niveles entre 7,8 a 8,1%, con un incremento en el mercado informal. El efecto directo, indica la Cepal, será un aumento de la pobreza, que ya afecta a 182 millones de personas.
"Estamos ante el final de un período con escasos precedentes en la historia de la región", dice la Cepal en su balance preliminar anual presentado hoy en Santiago, sede del organismo dependiente de las Naciones Unidas.
Por otra parte, se señala que la mermada expansión seguirá sostenida por las condiciones relativamente favorables del mercado de las materias primas.
El ciclo de bonanza, con un crecimiento promedio regional de 5% anual durante los últimos años, estuvo acompañado por una mejora de los indicadores del mercado laboral y una disminución de la pobreza en la región, que volverán a resentirse a partir de 2009.
Pero 2009 tiene un horizonte distinto: la región, como el resto del mundo, sentirá los efectos de la crisis, cuya magnitud, para la Cepal, aún escapa de la posibilidad de cálculo.
"La profundidad y duración de la recesión dependerán de la eficacia de las medidas de estímulo de la demanda implementadas para compensar la caída del gasto privado, así como de la vuelta a la normalidad de los mercados crediticios", se advierte en el documento.
Según la Cepal, las medidas adoptadas por la Reserva Federal (Fed) estadounidense y los bancos centrales de otros países deberían servir para que las economías desarrolladas superen la etapa más profunda a partir del segundo semestre de 2009, aunque aún no hay certezas.
Por tal razón "no puede descartase un escenario más pesimista", en el que se acentúe la recesión y la restricción crediticia se prolongue, advierte el organismo internacional.
La crisis afectará a América Latina por una esperada reducción del volumen y el precio de sus exportaciones, como consecuencia del descenso en la cotización de las materias primas, motor del crecimiento regional.
Se espera, además, una caída de las remesas enviadas por sus trabajadores emigrantes, fundamental para la mayor parte de las economías del Caribe, Centroamérica y México, y una baja de la inversión extranjera directa y de la demanda de servicios turísticos. Los países latinoamericanos enfrentarán también mayores dificultades de acceso y un mayor costo del financiamiento externo.
La Cepal rescata como consecuencia positiva de la crisis la reducción de los niveles de inflación, cuya escalada alcista afectó a la mayoría de los países de la región este año. Se estima que el indicador baje desde 8,5% a 6% en 2009.
El informe advierte también sobre un deterioro de los niveles de distribución de la riqueza y aconseja a los países de la región adoptar "soluciones coordinadas" para enfrentar la crisis, sobre todo con medidas destinadas a impulsar la demanda, y fomentar el comercio y la integración regional. lanacion.com. Fuentes: Agencias AFP, EFE y AP.