¿Por qué bostezamos?
Bueno, yo bostezo porque hace más de dos años que no dormimos bien, y es que no puedo parar. En un principio, se creía que el bostezo sólo era una forma de refrigerar y oxigenar el cerebro. Cuando estás cansado, mueves menos la caja torácica, y la respiración es más superficial. Cuando se bosteza, gran cantidad de aire fresco llega a los pulmones, es un "chute" de aire momentáneo, que compensa ese rato en el que las respiraciones han sido menos eficaces, debido al cansancio físico.
Pero ¿por qué se contagian los bostezos?
Cuando vemos a otra persona, o animal, bostezar, muchas veces bostezamos unos segundos después. Lo mismo si sólo lo escuchamos, o lo vemos por tele. O leemos una descripción de un bostezo. O leemos la palabra "bostezar"(¿Has bostezado ya?). Hay algo en nuestro cerebro que se dispara, y no nos podemos contener.
Una teoría es que los bostezos (y otras conductas) se contagian para sincronizar las actividades de los individuos de un mismo grupo. Así, cuando uno tuviera sueño, bostezaría, los demás con él, y decidirían todos irse a echar la siesta. Pero parece que es algo más complicado.
Los estudios indican que el contagio del bostezo está relacionado con la habilidad de Teoría de la Mente. Las personas que tienen mejores resultados en los test que miden esta habilidad, también se contagian de los bostezos de los demás con mayor frecuencia. Al contrario que las personas con la Teoría de la Mente poco desarrollada (gente con autismo, por ejemplo), que se contagian muy poco. Así que la capacidad de contagiarse está relacionada con lo que llamamos empatía, la capacidad de ponerse en el lugar del otro, de sentir las emociones que está sintiendo otro individuo sólo con verle.
No sólo los humanos se contagian de los bostezos de otros. También lo hacen los chimpancés, los macacos y los babuínos. Y los perros.
Se cree que los perros, debido a su evolución conjunta junto con las personas, han podido desarrollar esta capacidad, y además responder no sólo a los bostezos de otros perros, sino también a los de los humanos.
Se han realizado varios experimentos con perros, a los que se les han puesto vídeos, grabaciones del sonido o gente bostezando en persona. No sólo los perros tenían tendencia a contagiarse de los bostezos (ya fueran en vivo y en directo o en grabaciones o imágenes de vídeo), sino que si el bostezo era fingido no se les pegaba. Sólo con oír el bostezo, ya tenían mayor tendencia a bostezar también. En los experimentos "en vivo", hasta un 70% de los perros se contagiaban.
Pero entonces se pensó que el contagio podía ser simplemente una conducta de imitación, igual que los corderos que saltan cuando otro cordero salta. Nada de empatía, simplemente tendencia a copiar gestos. Para distinguir este comportamiento, se ideó un experimento, en el que se ponía al perro una grabación de gente desconocida que bostezaba, y en otro momento a su dueño que bostezaba. Los perros bostezaron más cuando vieron a sus dueños bostezar, que cuando vieron a un extraño. Esto demuestra que no es sólo un reflejo de imitación, sino que es necesario la pertenencia al grupo social para que se despierte el contagio.
Por otra parte, se piensa que los perros, cuando oyen a su dueño bostezar, en su mente "ven" la imagen de su dueño bostezando. Ésta imagen sería la que "despertaría" el contagio, y no sólo el sonido. Cuando oyen a un desconocido bostezar, no podrían "verlo", puesto que desconocen cómo es, y no se les pegaría ese bostezo, que no habrían "visto".
Así que ¿pura imitación? ¿o verdadera empatía?
Y tú ¿eres empático? ¿cuántas veces has bostezado mientras leías esta entrada? (Y espero que no fuera de aburrimiento... ;) )
Y tu perro ¿bosteza si tú bostezas? Porque los míos no...
Vía "The Thoughtful Animal"
Bibliografía:
Joly-Mascheroni, R., Senju, A., & Shepherd, A. (2008). Dogs catch human yawns Biology Letters, 4 (5), 446-448. DOI:10.1098/rsbl.2008.0333
Matthew W. Campbell, & Frans B. M. de Waal (2011). Ingroup-Outgroup Bias in Contagious Yawning by Chimpanzees Supports Link to Empathy PLoS ONE, 6 (4) : 10.1371/journal.pone.0018283
Harr, A., Gilbert, V., & Phillips, K. (2009). Do dogs (Canis familiaris) show contagious yawning? Animal Cognition, 12 (6), 833-837 DOI:10.1007/s10071-009-0233-0
O’Hara, S., & Reeve, A. (2011). A test of the yawning contagion and emotional connectedness hypothesis in dogs, Canis familiaris Animal Behaviour, 81 (1), 335-340 DOI: 10.1016/j.anbehav.2010.11.005
Yoon, J., & Tennie, C. (2010). Contagious yawning: a reflection of empathy, mimicry, or contagion? Animal Behaviour, 79 (5) DOI:10.1016/j.anbehav.2010.02.011
Silva, K., Bessa, J., & de Sousa, L. (2012). Auditory contagious yawning in domestic dogs (Canis familiaris): first evidence for social modulationAnimal Cognition DOI: 10.1007/s10071-012-0473-2
Teresa Marías www.psicologiaveterinaria.es