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jueves, 3 de mayo de 2012

Ejercicio y estrés en perros ¿qué relación tienen?


Últimamente (por esas extrañas coincidencias de la vida) he estado leyendo/oyendo hablar mucho sobre la relación entre el exceso de ejercicio físico y el estrés en los perros. He leído en algunos blogs, y he oído decir a algunos profesionales que ellos no recomendaban el ejercicio físico en perros (algunos hablaban de deportes como agility o canicross, pero otros incluso incluían aquí el tirarle la pelota al perro) porque aumenta la adrenalina, y con ello el nivel de estrés y la ansiedad en los perros.

Primero vamos a hablar del estrés en los perros, y qué lo produce.

El estrés es una reacción del cuerpo de los animales ante una situación que necesita de una activación corporal. Una activación corporal es cualquier situación que necesite del individuo una reacción. Puede ser buena (tipo "hay donuts para merendar, ¡yuju!"), neutra (darse una carrerita para llegar al autobús) o  negativa ("como no corra, me come el tigre").


Independientemente del tipo de reacción que lo provocó, existen dos tipos de estrés. El estrés "bueno" o Eustrés, que es una activación corporal momentánea y proporcionada al nivel de activación requerido. Luego está el estrés "malo" o Distrés, que es el que se produce cuando tenemos una situación de activación que se prolonga mucho en el tiempo, o que se repite durante un largo periodo.

El mayor problema que tiene el estrés, es que es acumulable. Cuando tenemos una activación, segregamos adrenalina inmediatamente, y esta hormona produce aceleración en la respiración y en el ritmo cardíaco, y el organismo se prepara para actuar. Pero también produce la segregación de la hormona cortisol. El cortisol permanece en la sangre unos veinte minutos, y luego, normalmente, vuelve a niveles basales. Eso quiere decir que después de una emoción, o un susto, tardamos (de media) unos 20 minutos en tranquilizarnos.

Pero eso sólo ocurre si PODEMOS tranquilizarnos. ¿Qué pasa si no nos dejan descansar?


Si poco después de esa activación corporal, necesitamos otra, el proceso vuelve a repetirse. Pero esta vez, el cortisol subirá más alto, y permanecerá más tiempo en sangre. Si tenemos una temporada con mucha necesidad de activación (exámenes, por ejemplo) los niveles de cortisol no pueden bajar, y permanecen elevados durante largo tiempo. Aquí es donde comienzan a aparecer los efectos negativos del estrés. Baja el sistema inmune, se ven signos de ansiedad, de incapacidad para relajarse (insomnio, conductas esterotipadas), los niveles de testosterona aumentan, aumentando así la irritabilidad/agresividad... un montón de efectos negativos.

¿Qué pasa con el ejercicio físico?

El ejercicio físico es un activador natural. Si se practica de forma predecible y moderada, no sólo no aumenta el cortisol, sino que lo disminuye. Si cualquiera de nosotros sale a correr por las tardes, sabe que antes de empezar a correr, nota ya la activación (porque anticipamos el ejercicio), y al principio a uno le suben las pulsaciones, aumenta el ritmo de la respiración y el cardíaco... todos los síntomas de la adrenalina. Si corremos al ritmo y la longitud a la que estamos acostumbrados, el cuerpo se estabiliza, y cuando acabamos nos notamos cansados, relajados y con sensación de bienestar.


Pero ¿qué pasa si este ejercicio físico no es regular? Si no estamos acostumbrados a correr, tendremos una subida de adrenalina más fuerte, que nos dejará agotados. Lo mismo si aumentamos el ritmo de la carrera, o la longitud, de forma brusca. El cuerpo no está acostumbrado a esa intensidad, y tirará de las reservas para seguir corriendo. Si lo hacemos así un día, acabaremos agotados y con agujetas. Si lo repetimos día tras día, o sólo corremos una vez por semana... pues todo esto se acumulará y nos producirá mucho estrés. Esto es lo que les pasa a los atletas profesionales, si no se tiene cuidado. Si se les pide máximo rendimiento todos los días, acaban quemados, lesionados y estresados.

Con los perros pasa lo mismo. Según los estudios, los perros tienen una tolerancia al ejercicio físico (correr) muy grande. Con entrenamiento, distancias de hasta 160 km no sólo no aumentaban los niveles de cortisol basal, sino que los disminuían.

Pero lo dicho: con entrenamiento. En otro estudio, se compararon los efectos de hacer ejercicio con el perro una o dos veces por semana, durante varias horas ("este finde lo saco al campo y lo agoto"), contra los efectos del mismo tipo de ejercicio, pero durante veinte minutos, a la misma hora, todos los días. Mientras que el primer grupo tuvo un aumento en los niveles de cortisol, el segundo los disminuyó.

Y no sólo afecta la cantidad de ejercicio, o si éste es continuado. Lo que más afecta, es cómo se comporte el dueño durante el ejercicio. Si el dueño considera el ejercicio como una sesión de adiestramiento, da órdenes y corrige al perro, los niveles de cortisol aumentarán. Si en cambio juega con el perro, sin hacer caso a que el perro obedezca, ni regañarle, el cortisol disminuirá. Y si está compitiendo, y pierde, el perro tendrá los niveles de cortisol más elevados si el dueño lo pasa mal y le regaña. Si pierde, pero su dueño "lo quiere igual", el cortisol disminuirá (igual que cuando ganan y el dueño premia al perro).


Si tu perro se emociona "demasiado" con el ejercicio, tienes dos alternativas. Puede que no sea "demasiado", sino que sea demasiado intermitente (por mucho que nos guste algo, todos nos cansamos si repetimos lo mismo 100 días seguidos), o es que tu perro tiene estrés por otras razones. Puede que el sitio donde hagas ejercicio le de miedo, los perros a su alrededor sean extraños o... ¿has pensado que a lo mejor eres tú el que lo pone nervioso?


Resumiendo: haz ejercicio con tu perro, juega con él. ¿Quieres hacer deporte? Hazlo. Entrena con tu perro, a diario un rato. No le des palizas de un día para luego pasar de él el resto de la semana. Y no le regañes si no llega "a nivel". Debe ser un juego para los dos. Si le ves estresado, no le hables, no le chilles. Acaríciale, deja que se apoye en tí.

Corre, salta, haz agility, tira la pelota, pelearos por un nudo... divertíos. Tu perro estará menos estresado.
Y tú también.


Bibliografía: 


Arokoski, J., Miettinen, P., Säämänen, A.-M., Haapanen, K., Parviainen, M., Tammi, M. & Helminen, H. 1993. Effects of aerobic long distance running training (up to 40 km · day<sup>−1</sup>) of 1-year duration on blood and endocrine parameters of female beagle dogs. European Journal of Applied Physiology and Occupational Physiology, 67, 321–329.
Beerda, B., Schilder, M. B. H., Hooff, V., A.r.a.m, J., Vries, D., W, H. & Mol, J. A. 1998. Behavioural, saliva cortisol and heart rate responses to different types of stimuli in dogs. Applied Animal Behaviour Science, 58, 365–381.
Durocher, L. L., Hinchcliff, K. W., Williamson, K. K., McKenzie, E. C., Holbrook, T. C., Willard, M., Royer, C. M. & Davis, M. S. 2007. Effect of strenuous exercise on urine concentrations of homovanillic acid, cortisol, and vanillylmandelic acid in sled dogs. American Journal of Veterinary Research, 68, 107–111.
Effects of Exercise and Human Contact on Animal Welfare in a Dog Shelter. 2011. Veterinary Record, 169, 388–388.
Horváth, Z., Dóka, A. & Miklósi, Á. 2008. Affiliative and disciplinary behavior of human handlers during play with their dog affects cortisol concentrations in opposite directions. Hormones and Behavior, 54, 107–114.
Jones, A. C. & Josephs, R. A. 2006. Interspecies hormonal interactions between man and the domestic dog (Canis familiaris). Hormones and Behavior, 50, 393–400.
Lefebvre, D., Giffroy, J.-M. & Diederich, C. 2009. Cortisol and behavioral responses to enrichment in military working dogs. Journal of Ethology, 27, 255–265.
Mehta, P. H., Jones, A. C. & Josephs, R. A. 2008. The social endocrinology of dominance: Basal testosterone predicts cortisol changes and behavior following victory and defeat. Journal of Personality and Social Psychology, 94, 1078–1093.
Scholz, M. & Reinhardt, C. V. 2006. Stress in Dogs: Learn How Dogs Show Stress and What You Can Do to Help. Dogwise Publishing. 


Teresa Marías www.psicologiaveterinaria.es

martes, 21 de febrero de 2012

Canicross


Hace mucho que quería escribir esta entrada, sobre este deporte "con tu perro". Me parece un deporte muy sencillo, divertido y que promueve la relación entre dueño-y-perro, ejercita al perro (y al dueño) y puede ayudar al perro a superar muchos problemas de comportamiento.

¿Qué es el canicross?

El canicross es, en el fondo, correr con tu perro. La diferencia entre este deporte, y que tú cojas a tu perro por la mañana y salgas a correr tal cual, es pequeña pero importante. En el canicross se busca que el perro colabore con el corredor, tire de él, y no sólo que corra a su lado.

Como el perro va a tirar del corredor, con bastante fuerza normalmente, se necesita un equipamiento mínimo, para ayudar al perro a tirar con mayor eficacia y evitar lesiones tanto para el corredor como para el perro.

¿Qué  necesitamos?

Equipo completo de canicross: línea de tiro, cinturón y arnés,

Un arnés de tiro. No valen los arneses normales de paseo, debe ser especial, porque estos arneses no rozan cuando el perro corre, mientras que los normales de paseo sí lo hacen.
Una línea de tiro. Esto es una correa un poco especial. Debe medir menos de dos metros, ser resistente, y tener una zona elástica. Esto es importante para evitar que los tirones que de el perro nos produzcan lesiones.
Un mosquetón. Para unir la línea de tiro al cinturón del corredor.
Un cinturón de canicross. Este cinturón lo lleva puesto el corredor, va unido a la línea de tiro, y ayuda a amortiguar los tirones del perro, puesto que es ancho y va acolchado.
Puedes comprar todo el equipamiento en tiendas especializadas, en internet está speedogs, por ejemplo. Todo el equipo cuesta unos 80€.

Simplemente con ésto (y unas zapatillas de deporte) podemos empezar a correr.

Como para cualquier deporte humano o canino, es importante empezar a entrenar, e ir de poquito a más. Al cabo de unos días podremos correr con nuestro perro la distancia de competición, normalmente alrededor de 10 km.

Hay que ser conscientes de que no corremos solos, que corremos con nuestro perro. Llevar agua para los dos, y si le vemos mínimamente cansado, o la temperatura sube por encima de los 25ºC, andar con mucho ojo, que los golpes de calor en los perros son desgraciadamente muy frecuentes.

La técnica es ligeramente distinta a simplemente correr. Hay que tener en cuenta que el perro tirará de nosotros, así que hay que ir algo más ligero, pasar más tiempo en el aire, para que el perro tire mejor. En las cuestas arriba podremos dejar que el perro nos ayude más, pero en las cuestas abajo habrá que frenarlo, porque su centro de gravedad es más bajo que el nuestro, y podemos acabar sin dientes, o por lo menos sin tobillos o rodillas.

Podemos entrenar solos, o unirnos a un club de canicross de la zona. Como se está volviendo popular, seguro que hay uno cerca de donde vives. Puedes mirar por internet, o presentarte en una prueba para ver cómo es, y preguntar a la organización o a los participantes. Sólo ir a mirar ya es un espectáculo en sí.

¿Qué perros pueden correr?

Cualquiera. Ahora mismo (en España) todavía es un deporte muy amateur, y corren perros de todas clases, normalmente entre los 10 y los 50 kg. La gente que busca un perro para competir suele correr con el tipo de perro que también se usa para las carreras de trineo: huskies y sus cruces o perros de caza (tipo braco). Pero si el perro está sano, y tiene más de 1 año, puede correr. Pongo la foto de algunos de los participantes del grupo Mushing Toledo, para que los veáis.

Equipo de Mushing Toledo, en Cerceda

El Reglamento:

Si quieres competir, debes ser mayor de edad, tener la equipación mínima, y un perro de más de un año que tenga sus vacunas al día y pase el control veterinario. Para las carreras populares, que suelen tener unos 2km de duración, se puede ser menor de edad (aunque debe estar autorizado o correr con un adulto) y el perro debe tener más de 6 meses.  Si el perro es agresivo, debe correr con bozal, de tipo cesta.

Y poco más.

Este deporte me parece una pasada. No se necesita mucha equipación, ni grandes dotes para el adiestramiento. Se trata de hacer ejercicio y pasárselo bien. Y los perros lo adoran. Sólo hay que pasarse por una salida de carrera, y verlos. Tiran, lloran, se abalanzan... los perros adoran correr. Y adoran estar con su dueño. Y las dos cosas juntas... ¡Lo mejor!

El próximo día 4 de Marzo hay una carrera en Cercedilla.
¿Os apuntáis?

Por cierto, mucha de la información y las fotos las he sacado de la página del club de canicross "Correcaninos" . Podéis pasaros por allí para más información, y por el blog de Javi, "Clickdogging" o el del grupo "Mushing Toledo"para saber lo que se siente, de primera mano.

Yo ahora no puedo correr (mis perros geriátricos no pasarían ninguno el control veterinario, y yo puede que tampoco). Pero probablemente me pase por Cercedilla a ver la carrera y charlar con los amigos.
¡Ánimo Nerea-y-Lurra, ánimo Javier-y-Cora!


Teresa Marías www.psicologiaveterinaria.es

viernes, 18 de marzo de 2011

Enseñando a nuestro perro a tirar de una bici

En el bikejoring, nuestro perro tira de la bici
Montar en bici es un ejercicio estupendo, y si puedes correr con tu perro, que te haga compañía, tire de tí en las cuestas, y gaste energía, todo a la vez ¿puede pedirse algo más? Esto es el bikejoring, por lo visto.

Llevo unos días investigando el tema, por dos razones:
1. Se acerca la primavera, pica el gusanillo de salir por ahí, y si puede ser mi Guardabosques con el Pollito en una bici y yo con los perros en otra, pues me parece un plan estupendo.
2. Tengo una clienta con un husky muy necesitado de ejercicio, y me preguntó cómo veía el tema (a tí va dedicado este post, Diana).

Así que dejo un resumen-traducción "libre"de unas recomendaciones vía clickertraining.com, del artículo "Fun with your dog: Mushing on a bike" de Robin Shen. Que conste que todavía no lo he probado, más allá de poner a mi perro a tirar de un tronco, con la bici todavía no hemos probado, pero ¡estamos deseando!

Paso 1: Diversión, no castigo
Cuando se adiestra a un perro de tiro, nada de castigo de ninguna forma. Nada de collares, ni normales, ni de ahogo, ni de pinchos, ni siquiera haltis. Vamos a coger bastante velocidad, y con un frenazo o un enredo con la correa podemos hacer muchísimo daño a nuestro perro. Sólo va a llevar puesto el arnés de tiro y la línea, aunque en el momento que paremos y le desenganchemos por supuesto que necesitaremos el collar y correa habituales. El mushing (tiro de trineo o similar) debe ser divertido para el perro, puesto que a los perros les encanta correr y tirar. Si al perro no le gusta, mejor no forzarle y buscar otro entretenimiento. Lo normal es que directamente alucinen y les encante.  Si el perro se equivoca, puedes decirle "no" o "mal" pero nada más allá.

Paso 2: valora el estado físico de tu perro
Para poder tirar de la bici, el perro debería pesar por lo menos 15 kg, tener por lo menos un año de edad (incluso año y medio para razas muy grandes). Antes de esa edad puedes entrenar corriendo y tirando de cosas sin peso, pero nada muy fuerte.
¿Y la raza? La raza no importa, pero la forma del cuerpo sí. Cuanto más se parezca físicamente tu perro a un husky, mejor. El parecido se mide estructuralmente, no en tipo de pelo o su color. Debe tener un cuerpo proporcionado, y estar sano. Sus extremidades deben ser robustas, y no tener problemas de salud en sus articulaciones, o deformidades de ningún tipo. El mushing es un ejercicio bastante fuerte, y produce mucho desgaste en tendones, músculos y articulaciones. Si el perro no está sano al empezar, lo más probable es que lesione en algún momento. De todas formas, si sólo vas a montar en bici por pasear, y no para competir, puedes ser más laxo en estos temas, siempre que vigiles bien al perro, y pares o aflojes el ritmo al menor signo de cansancio o problema.

Paso 3: ¿le gusta a tu perro tirar?
Si a tu perro le gusta tirar de la correa, ya sabes que sí. Si has educado a tu perro a no tirar, echa a correr a su lado, y mira si se emociona y corre delante de tí. Si es así, bien. Si tu perro corre detrás de tí, o quiere pararse, o tienes que ir arrastrándolo, a lo mejor no es el mejor perro para este ejercicio.

Paso 4: el arnés de tiro, la línea y cómo montarlo todo en la bici
Compra un arnés de tiro. No vale cualquier arnés de tienda de animales, los arneses de tiro son diferentes, para cargar el peso del tiro en el pecho, y no en el cuello. Los venden por internet, no son excesivamente caros. Tienes que medir muy bien el contorno de tu perro, y que le quede bien ajustado, para que no se haga daño al tirar. En las páginas web suele haber una guía sobre cómo medir al perro para que le quede bien ajustado.
Arnés especial de tiro
Lo importante es que la línea sea resistente, con los mosquetones de buena calidad (no queremos que uno falle y salgamos todos volando), debe tener dos mosquetones, uno en cada extremo, para unirla a la bici y al perro. Si la línea es un poco elástica, mejor, tanto para el ciclista (menos tirones en la bici) como para el perro. La línea debe medir unos 2 metros, para que el perro esté cerca de tí y lo puedas controlar, pero no justo delante que lo atropelles cada vez que paréis. Puedes unir dos perros a la bici, pero no más, que sales volando.
Dos formas de unir el perro a la bici, con más o menos amortiguación
Luego puedes unir esta línea directamente a la bici, aunque no es muy recomendable, pues si el perro deja la correa algo floja se te puede meter por la rueda y darte un batacazo. Lo mejor es meter el primer tramo en un trozo de tubería de pvc, en una manguera, o comprar un adaptador especial para la bici, que pasa recto por encima de la rueda delantera, así ni se desgasta la línea ni se mete por la rueda. También se puede poner doble correa ajustada al manillar, una la línea, de correa normal, y un trocito más corto elástico o de muelle, para minimizar los tirones.
Adaptador para atar el tiro a la bici, éste es comprado
En http://www.speedogs.com/bikejoring.html tienen de todo, arneses, líneas de tiro y adaptadores para atar el perro a la bici y que no se meta el tiro en la rueda. También tienen prácticos "kits" (No me han pagado, es que es la mejor web que he visto por ahora).

Paso 5: comenzar el adiestramiento, enseñar las órdenes
Pon el arnés y la línea de tiro al perro, y atar a la línea de tiro algo que pese. Un tronco, una caja, ... algo que no asuste al perro, y que pueda arrastrar cómodamente. Anímale a tirar y a correr a tu lado mientras arrastra el peso. Premia mucho hasta que el perro se adapte. Si el perro se para a olisquear, di "no" o "mal" y anímale a seguir corriendo, así evitarás que lo haga cuando estés encima de la bici, y sea más difícil controlarle.

Con este peso le enseñaremos lo básico, "hike" es tirar hacia adelante, "geee" girar derecha, "haw" izquierda,  y "sooo"parar. Estos son los "palabros" tradicionales, si no te gustan, los cambias por lo que te salga del cuerpo y ya está. Una recomendación: palabras cortas y repetidas para acelerar, una palabra larga y en tono bajo para parar. Estas órdenes deben enseñarse con adiestramiento positivo (mejor con el clicker) antes de subirse en la bici, si no quieres acabar en el suelo.

Paso 6: la bici
Debe ser resistente, y tener buenos frenos. Cualquiera de montaña o para BMX debería valer. Mejor si algo más pequeña que tu talla normal, por si tienes que frenar poniendo los pies en suelo. Que no sea muy cara, porque la vais a vapulear pero bien.

Paso 7: ¿Preparados, listos?
Antes de unir al perro a la línea, revisa que no le duela nada, que no tenga agujetas del día anterior, que no cojee. A los perros les gusta tanto tirar que pueden acabar hechos  polvo, pero seguir queriendo correr. Si es así, tomaos un par de días de descanso.
Si el perro está bien, ponle el arnés, y ata la línea primero a la bici, y luego al perro. Con la bici tumbada, y el perro bien sujeto. Una vez te has subido a la bici y estás preparado, puedes soltar la línea. Parece una recomendación tonta, pero al tercer día, con el perro todo emocionado, no lo haces, el perro da un supertirón, y ¡todos al suelo descalabrados!

Paso 8: ¡Adelante! ¡hike, hike, hike!
Pedalea un poquito, y alegremente grita ¡hike!, agárrate fuerte y ¡disfruta!
Puedes ayudarle pedaleando en las cuestas arriba, frenando en las cuestas abajo. Para girar, ayuda frenando un poco, dando la orden de giro y entonces giras la rueda de la bici. Con un poco de práctica, todo irá "sobre ruedas".
Mantente en silencio excepto para dar las órdenes y premiar cuando haga algo bien, si no el perro "apagará" sus oídos, y dejará de oírte.
¡A correr!
Precauciones:
Este ejercicio es muy intenso, no salgas a correr por encima de 25-30º, dependiendo de la humedad o la intensidad del recorrido, o puedes matar a tu perro de un golpe de calor. A veces hay que salir muy temprano para que haga el suficiente fresco, sobre todo con perros de pelo largo y espeso. Si le ves muy jadeante, o cansado, para, bebed y mojaos. Si el perro se para y tiene problemas para andar, se le ve mareado, pierde el equilibrio o tiene la temperatura más alta de lo normal, llévalo al veterinario enseguida.
Este ejercicio hay que entrenarlo, empieza con 1-2 km y ve subiendo poco a poco, si no quieres romper al perro. Los perros no conocen límites, y pueden seguir corriendo hasta desplomarse. Ofrece agua a cada km, más a menudo si hace calor, y vigila las patas de tu perro, que no se haga heridas. Si es así, vuelta a casa andandito.
No dejes nunca de prestar atención al perro y al camino. Si se lía la línea, o pillas un bache... se va muy rápido, los tirones son muy fuertes, y las caídas también. Os podéis hacer mucho daño. Los perros sin experiencia suelen pararse a hacer pis o defecar, en mitad del camino y de repente, en los primeros 200-500 m. Estate preparado para el frenazo, dile que "no" o "mal" y anímale a seguir adelante, alejando la bici.
Ponte gafas. Los perros al correr lanzan mucha tierra, más cuanto más rápido corren.
Evita el asfalto todo lo posible, ve por caminos de tierra. El asfalto revienta las almohadillas, es duro en la musculatura, y hay demasiado tráfico.

Pues hasta aquí por hoy. Espero animar a gente a practicar este deporte con su perro.
¡hike, hike, hike!