Misterio por aparecer

La investigación del crimen era todo un misterio. El cadáver, la sangre derramada, el arma, la nota y hasta el lugar del asesinato ¡Todo había desaparecido! 
¡Pero el mayor enigma era que el sospechoso siguiera tan sonriente, tan bromista y tan suicida como siempre! 

El misterio

Para el ciego todos los libros son de misterio.
Prefiere los libros usados; y entre más antiguos, mejor.
Va leyendo entre líneas, arrugas e incluso olores, la historia detrás de aquellos que han leído cada ejemplar.

El misterio de la novela de misterio

Termina de escribir la novela de misterio e investigación criminal cuando el escritor cae en cuenta que no quiere publicar la novela. 

Lo que realmente desea es matar a su vecino... 
...siguiendo el detallado plan descrito en su novela. 

¡Vaya! ¡No termina uno de conocer a la gente! ¡Y menos a uno mismo! 

Misterio a la mano

La clarividente está intrigada. Ella, antes, era un fiasco ya que inventaba miles de mentiras y destinos falsos. Pero ahora, en los clientes que van a visitarla ve historias en movimiento que se despliegan ante sus asombrados ojos. ¡Y no sabe qué significan aquellas extrañas palabras Android, iPhone, Google, Facebook, Twitter, Whatsapp... en las pequeñas pantallitas que aparecen en la palma de todas esas manos!

Caso por "revolver"

La investigación del crimen se veía demasiado fácil. Por eso el detective discretamente desapareció el cadáver. 

Autor del crimen

Siguen el rastro de sangre hasta encontrar el cadáver. 
- ¡Sangre azul! Dicen asombrados. 
- No es sangre. Aclara el especialista. Es tinta. 
El investigador, el analista del laboratorio ¡y hasta la víctima muerta! voltean a ver con sospecha al escritor de esta historia de misterio. 

Encubrimiento

Siendo Investigador privado y además psíquico para mí es muy fácil resolver crímenes. Simplemente entrevisto al fantasma de la víctima. 
Pero en este caso el muerto no quiere cooperar. 
Estoy seguro de que está encubriendo a alguien. Así que insisto intentando que me diga quien lo mató. 
Porque él no estaba solo. 
¿Quién más estaba allí? 
Entonces la luz se hace en mi cerebro. 
¡Por supuesto! ¡El asesino fue...! 
... 
Lo último que escucho es un ruido a mis espaldas, desde el espejo... 

La muerte cara a cara

A la muerte le parece interesante ver, en la cara de las personas que llegan, las múltiples y extrañas emociones que para ella son un misterio. 
Hasta que finalmente llega el momento en que encuentra un espejo y tiene que enfrentar su propia muerte. 

Pironomicón

Al terminar de escribirlo, quemó el libro. Para leerlo sólo era necesario el título, el cual había quedado escrito con letras de fuego. 

Canto, encanto y desencanto de las sirenas

El verdadero peligro de las sirenas no es el canto, ni el de sentirse atraído y caer bajo sus encantos. 
El verdadero peligro de las sirenas es el desencanto al darnos cuenta de que las promesas de sus voces son meras ilusiones. 
Lo terrible es saber que en realidad ellas son terrenales. Casi como nosotros. 

Nadie tiene cuartada

Nadie tiene cuartada. Murmura pensativo. No sé para qué contratan a un detective si en Fuente Ovejuna nadie nunca tiene cuartada... 

Máquina del misterio

Puse en funcionamiento la máquina del misterio. Se escucharon extraños ruidos tanto en su interior, como a kilómetros de distancia. Una sutil niebla cubrió el lugar y un sentimiento indescriptible fue llenando el alma de los presentes. Suspirando, apague la máquina. Una vez más no supe cuál era la finalidad del extraño mecanismo. Y también una vez más tampoco supe si lo había apagado o si seguía encendido.

Gore literario

Se encontró el texto todo despedazado, sólo los signos; completamente iletrado...

El suspenso del final del cuento...

"Y vivieron felices para... " 
Continuará en nuestro próximo microcuento.

Misterio del cadáver letrado

Encontraron el cadáver del escritor de novelas de misterio con palabras escritas por todo el cuerpo. 
No sabían si llamar al detective o al editor. 
Finalmente este último dictaminó que el texto era la genial obra póstuma del afamado autor. 
Por otro lado, el investigador privado llegó a la conclusión de que el asesino era la vieja, abandonada y resentida máquina de escribir.

El contexto del texto

El microcuento era mínimo, pero para entenderlo era necesario conocer la biografía del autor, el momento histórico en que vivió, así como las obras, autores y personajes incluidos en las referencias ocultas en el texto, el cual consistía en una sola misteriosa palabra que no aparecía en ningún diccionario.