"El problema de que te dejaran en general, y en concreto que te dejaran Katherines, era que resultaba absolutamente monótono."
Título: El teorema Katherine
Autor: John Green
Lugar de publicación: Nueva York
Editorial: Vintage Español
Año: 2014
Páginas: 313
Personajes: Colin, Hassan, Lindsey, 19 Katherines (en la sombra)
Temática: novela juvenil romántica, ciencias, matemática, amor, romance
Localización espacio-temporal: Gutshot, s. XXI
Resumen oficial:
Según Colin Singleton existen dos tipos de persona: los que dejan y los que son dejados. Él, sin duda, pertenece al segundo. Su última ex, Katherine XIX, no es una reina, sino la Katherine número diecinueve que le ha roto el corazón.
Para escapar de su mal de amores, y con el propósito de hallar un teorema que explique su maldición de las Katherines, Colin emprende junto a su amigo Hassan una aventura que le llevará a Gutshot, un pueblecito de Tennessee, y a la sospecha de que en la vida la inteligencia no siempre es la mejor compañera de viaje.
Mi opinión:
¿Qué se había fumado John Green en el momento de escribir esta novela? En serio, una puta locura. O sea, ¿en qué pensaba el autor al escribirla?. Os dejo cuatro opciones:
1. Estaba muy aburrido
2. Le encantan las matemáticas y como no se atrevía a escribir un libro sobre el tema lo metió con calzador en este libro "romántico"
3. Su vida amorosa era una auténtica mierda y así conseguía desahogar su frustración
4. Sus padres no le querían
Para no pasarme de cruel, os diré que este libro me ha parecido "entretenido" sin más pretensiones que esas, y un calco de su otra novela "Ciudades de papel" si le quitamos lo emocionante. De hecho creo que ha utilizado la misma plantilla y ha cambiado los nombres de los protagonistas y ya tenemos "otro producto" que vender.
O sea, no. No puedes pretender "medir" el amor y predecir lo que va a suceder en una relación de pareja, de amor, romántica, mediante fórmulas matemáticas. El amor es espontáneo, da sorpresas, en él descubres nuevas formas de ver la vida. Una relación puede ser una montaña rusa de emociones o muy plana y monótona, pero siempre es "imprevisible", por el mero hecho de que los sentimientos lo son. Si no, ¿de qué iban a vivir los psicólogos?, pobrecitos ellos (vale, entiendo que justamente esto quiere dar a entender el autor, pero...en fin...que no...).
Respecto a los personajes, por si no lo habéis notado todavía, confieso que he ODIADO a Colin ( y esa palabra se queda muy corta). Me ha hecho rabiar, agobiarme, aburrirme, me han dado ganas de darle dos yoyas bien dadas. Y no porque sea una especie de "genio infantil", sino porque es un "soso", un "aburrido", un inmaduro total, una lapa con las chicas y con su amigo, un patético que en lugar de poner en marcha su vida ,de vivir, se dedica a coger una cuerda, atarla al cuello de cualquier otra persona, y esperar que esa persona viva por él y tire de la cuerda, cual carruaje de caballos pero con el burro de conductor. Qué digo conductor, el se estiraría a echarse una siesta mientras los caballos van a su antojo.
En una relación, no se puede "pretender" que la chica tire del carro sola (o el chico 2, o la chica 2) mientras el otro se estira en el suelo esperando que lo arrastren toda la vida.
El único personaje que salva la novela es Hassan (a pesar de su postureo islámico), su amigo árabe (?), con sus salidas y sentido del humor. De hecho es que si no existiera este personaje cogería una cerilla y quemaría todos los ejemplares de esta novela para que nadie tuviera que sufrirla nunca. Bueno, no, mejor aún, la recomendaría a todos los que me caen mal (jijiji).
Lo bonito de todo esto es que aparece en escena Lindsey, esa chica diferente y espontánea, especial, que se preocupa por todos y que lo cambia todo, o por lo menos la vida de este indeseable de Colin. Ella hace "entender" al chico que la vida es algo impredecible, que el futuro no está escrito, y que una relación puede ser diferente a lo esperado (de hecho siempre lo es, ya sea para bien o para mal, hasta que no conoces mejor a una persona no puedes saber lo que va a ser tu relación con él/ella).
Cuando pienso en Lindsey, me hace desear una 2ª novela, es decir, "El teorema Lindsey" (sí, hombre, con 19 Lindseys más por descubrir...) Va, no, no os odio tanto XD
Pero como no todo va a ser una tortura (véase el rollazo matemático de las gráficas con el apéndice final incluído, que, en serio, ¿hacía falta?), os dejo con un mensaje positivo para ver la vida de otro color y dejar atrás ese gris que nos muestra Colin (que, para más inri, es el 2º Colin que conoce Lindsey...sí, lo sé, sin comentarios):
"...pensó en la distancia entre lo que recordamos y lo que pasó, la distancia entre lo que predecimos y lo que pasará. Y Colin pensó que en aquella distancia había espacio suficiente para reinventarse a sí mismo, espacio suficiente para convertirse en alguien que no fuera un prodigio, para rehacer su historia de forma diferente y mejor (...) para renacer una y otra vez (...) porque si algo había aprendido en Gutshot, era que no se puede impedir que el futuro llegue."
POSDATA1: Colin, si yo fuera Katherine, cualquiera de ellas, incluso si yo fuera Hassan, te habría dejado. Por pesado, básicamente.
POSDATA2: Mi momento "Eureka" ha llegado al finalizar la novela XD (si la habéis leído, lo entenderéis).
POSDATA3 (de parte de Hassan): Sois unos Kafir
POSDATA4 (conclusión): PALOMINOS (esto sólo lo entenderéis si la leéis antes, cosa de la que no quiero ser responsable XD)
Puntuación: 2,5/5
(Colin, ¿porqué existes? ¬¬)