domingo, 27 de enero de 2013
RÍOS DE TIEMPO
martes, 2 de agosto de 2011
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—Sí, ¿oiga? Llamo por lo del anuncio.
—Buenas noches. ¿Sería tan amable de decirme en qué medio lo vio? ¿Prensa, televisión, tal vez?
—Er..., sí, fue en un papel, por la calle. Una de esas octavillas.
—¿Y en qué ciudad, si es tan amable?
—¿Es necesario? Bueno, sí, claro: supongo que sí, ¡qué tontería! En Madrid. La recogí del suelo hará unos diez días. Llamo porque quiero hacerlo.
—¿Diez días? No ha tardado mucho.
—No, bueno... Pero estoy decidido. Lo he pensado bien y estoy decidido. En realidad esto es lo que quería desde siempre. Cuando vi el anuncio lo tuve claro. No tenía ni idea de que se podía, ya sabe, hacer algo así. Lo tengo claro.
—Puedo resolver cualquier duda que tenga en este momento, si lo desea.
—No tengo dudas, de verdad. Es lo que quiero hacer.
—¿Sabe que tendría que renunciar a vivir en su ciudad?
—He visitado su página web y me he informado bien de todo. Lo de la luz, la comida y todo eso. De verdad, estoy interesado en seguir adelante. He reflexionado mucho. No tengo familia, ¿sabe? Ya sé que debo irme, renunciar a los amigos...
—Perfecto. Aún así, permítame que le explique el procedimiento: en primer lugar, voy a hacerle un cuestionario, que estudiaremos en profundidad. En caso de que su perfil sea el idóneo, le llamaríamos para una primera entrevista. Una vez superada ésta...
—¿El perfil idóneo? ¿Es que hay muchos candidatos? No creo.
—...Le decía que, una vez superada, le citaríamos para un segundo encuentro, ya con su Encargado. Si todo va bien, esa entrevista podría ser definitiva.
—Entiendo.
—¿Podría responderme a unas preguntas, por favor? ¿Seguimos adelante, entonces?
—Adelante, claro, sí. Pero, un momento: ¿cuánto tiempo duraría todo el proceso de selección? Me refiero... ¿semanas? ¿Meses?
—Eso es muy variable, depende de cada Encargado.
—Bueno, en mi caso no creo que tarden mucho, de verdad creo soy perfecto para..., que encajo. No tardarán mucho en aceptarme.
—De todos modos, con una decisión tan firme, acaso el tiempo ya sería lo de menos, ¿no cree?