Crueldad, obsesión e intriga
"Un sanguinario asesino tiene en vilo a la policía, que no posee ninguna pista sobre su identidad, sus motivos o ni siquiera quién puede ser su próxima víctima. Tan solo se sabe que oculta su rostro tras una macabra máscara en forma de rana y que sus métodos son extremadamente violentos"
Lo primero que hay que decir es que es un manga con un alto componente gore y cruel. Con Museum nos enfrentamos a una historia no apta para todos los públicos ni para todos los estómagos. El dibujo, que se encuentra en una difusa línea entre lo simple y lo realista ayuda mucho a que las escenas sangrientas afecten, y van directamente de la mano por los métodos de asesinar que implanta el autor en las acciones del antagonista de la historia, que no se cortará un pelo en matar de la forma más cruel posible siempre y cuando vaya acorde con la persona a la que asesina.
Y si aquí tenemos la primera hebra del hilo de la historia, cuando el protagonista empieza a tirar de él verá como se ve inmerso en una historia absorbente y obsesiva en la que puede perder mucho más de lo que en principio podría esperar y que te mantiene en vilo en la segunda y tercera parte del título. Porque el manga consta de 3 tomos de los cuales yo podría dividirlo en tres partes o actos: el primero o cómo el protagonista entra en contacto con la historia del asesino, el segundo o cómo el protagonista se ve metido de forma personal en el caso, y el tercero cómo acaba todo (más una historia corta que merece la pena)
Este título es una de esas pocas sorpresas que nos traen las editoriales al año, títulos poco o nada conocidos pero que al leerlos te parecen lo mejor que ha salido en mucho tiempo al mercado. Eso me ha parecido este Museum, un título que para mí y de forma personal se ha introducido de cabeza en uno de los títulos del año
Y qué pena que el autor de momento no haya sido más prolífico, pero habrá que estar atento a ver si saca algo más. Ojalá. Muy recomendable. Ojalá más mangas como éste.