Otro año pasa, y otra Pascua más festejada en familia. Casi , casi, que no nos juntamos! Es que estoy con tanto trabajo que termino con la lengua afuera de tanto hornear. Y como tengo el sí fácil terminamos juntándonos y pasándola super bien. Y todos ayudaron , cada uno un poquito y todo fue muy ordenado. Salvo a la hora de servir la comida! Es que somos tantos que al primero que le servimos, cuando terminó la ronda ya se le había enfriado la comida, pero nadie se quejó y todo estuvo riquísimo. Tenía ganas de vivir una pascua en pasteles celestes y verdes, y esto es lo que quedó. Había un huevito decorado para cada comensal y cada uno, adentro tenía un mensaje . O sea que todos rompimos nuestros huevos y leímos en voz alta, el mensaje que nos había tocado, fue muy divertido. A mi me tocó lo siguiente, "Todo lo que sabemos del amor, es que el amor lo es todo" :-)
De postre preparé un Cheesecake de Oreo que no se hornea, ideal para cuando queremos dejar descansar el horno. Tenía que elegir algo que les gustara a todos, tanto chicos como grandes. Y la verdad es que estuvo muy rico y suave. Después disfrutamos de una rosca exquisita que hizo Caty, realmente se mereció un aplauso! Por suerte hizo dos, y aún hoy estamos comiendo trocitos de ella.
Cheesecake de Oreos sin hornear
400 gs queso crema americano
180 gs queso crema
200 gs crema (nata)
170 gs azúcar
4 yemas
180 gs azúcar
24 gs gelatina
4 paquetes de galletitas Oreo(110 gs cada uno)
2 paquetes de galletitas mini Oreo para decorar
100 gs manteca (mantequilla)
Pasar por la procesadora dos paquetes de galletitas hasta que se hagan una arena fina. Calentar la manteca hasta derretirla y mezclarla con las galletitas. Poner un aro de torta de esos desmontables , sin el piso del molde, sobre el plato en el que vamos a servir la torta. Poner una tira de acetato sobre las paredes internas del molde para que sostenga el relleno de nuestra torta, y volcar todo el arenado aún tibio. Apisonarlo sobre el fondo y llevarlo a la heladera para que se endurezca. Poner a calentar a gelatina diluida en tres veces su volumen de agua. O sea que por cada cucharada de gelatina le ponemos tres cucharadas de agua(se entendió ,no?). El agua para diluir debe estar fría. Dejarla en baño María hasta que comience a transparentar. En un bowl colocar los quesos y mezclar con ganas hasta que se tornen cremosos. Colocar el azúcar en una ollita y llevar al fuego hasta que se forme un almíbar flojo . Este es el punto en el que las burbujitas del centro les cueste explotar, lo hacen más lentamente. Volcar el almíbar sobre las yemas en forma de hilo mientras batimos con batidora eléctrica. No dejar de batir nunca y hacerlo hasta que las yemas se aclaren. Luego batir la crema a medio punto, o sea cuando empieza a hacer dibujitos el batidor. Volcar la gelatina sobre las yemas batidas a blanco, mezclar bien e incorporar los quesos. Mezclar bien otra vez y agregarle la crema semi batida y por último partir las galletitas restantes en trozos no muy pequeños y mezclar todo. Volcar toda la preparación sobre la base ya fría. Llevar a la heladera por unas horas y decorar con las galletitas mini Oreo. Para servir, obviamente quitar el acetato!