No lo puedo evitar, me encantan las especias, las hierbas aromáticas, los sabores nuevos! y desde que descubrí los currys, tengo que reconocer que es de esos sabores a los que no me puedo resistir.
Además algunos de sus ingredientes, son de aquellos que debo usar mucho, como el jengibre (antiinflamtorio natural, por no hablar de sus múltiples propiedades), la cúrcuma (antiinflamatoria y anticancerígeno natural)... Había probado de pescado, pero como lo que yo más como son verduras, me animé a probar un día con verduras, y estaba exquisito..Que buen plato, combinado con un poquito de arroz integral, o quinoa.. y una ensalada de primer plato, es una comida completa y deliciosa. No sabéis como disfruto!
Bueno, y otro de mis descubrimientos, fueron las hojas de curry, cuando me compré el libro de cocina India y vi que en casi todas las recetas se utilizaban, pensé y donde voy a conseguirlo??!! Tenía casi todos los ingredientes, pero me faltaba eso....Pero, las conseguí, en las tiendas del centro, las encuentro frescas en ramas y luego las seco en casa... y son deliciosas le dan un sabor único al plato, espero que podáis conseguirlas también!!
Este curry lo hice sin leche de coco, pero si le agregáis un poquito de leche de coco, la salsa queda más cremosa y le aporta un poquito de grasa saturada (de la buena), que nunca viene mal en las dietas de las personas vegetarianas. Y además es que el coco le da un sabor aún más rico!! Esta vez no le puse, no me gusta abusar, aunque yo tengo mis niveles de colesterol tan bajo (el bueno y el malo), que mi doctora me anima a aumentar un poquito mi consumo de las pocas grasas que puedo tomar.
Ya sé que no es un tajine sino un curry, pero no podía resistirme a estrenar uno de mis tajines, que ya lleva mucho tiempo guardado y sin sacarlo a la luz..jaja.
Aquí os dejo mis otros currys y recetas Indias hasta el momento..
Os cuento como lo preparé. Esta vez lo hice con estas verduras, pero se puede hacer con las que más os gusten, y tengáis....Berenjena, calabaza, calabacín, nabo, zanahoria..
Ingredientes
- 2 calabacines grandes con piel (yo ecológicos)
- 1/2 calabaza cacahuete (yo ecológica)
- 2 nabos grandes
- 1 cebolla roja
- 2 dientes de ajo
- 5 cm. de raíz de jengibre
- 2 cucharadas de aceite de girasol (yo virgen extra)
- 2 cucharadas de aceite de sésamo (yo virgen extra)
- 6 u 8 hojas de curry (opcional)
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 2 cucharadas de salsa de tomate casero o tomate natural
- 1/2 cucharadita de comino
- 1/2 cucharadita de pimientas
- 1/2 cucharadita de cilantro molido (optativo)
- 1/2 cucharadita de semillas de mostaza molida (optativo)
- guindilla fresca o seca al gusto (optativo)
- caldo vegetal o agua filtrada
- cilantro o perejil fresco
Elaboración
- Lavamos bien las verduras.
- Pelamos el nabo. Cortamos el calabacín por la mitad a lo largo y partimos en medias lunas de un tamaño ni demasiado grande ni pequeño, como de cuchara. Cortamos la parte de la calabaza de cacahuete, que no tiene hueco, la partimos por la mitad y hacemos trozos parecidos a los de calabacín. Partimos también el nabo del mismo tamaño.
- Pelamos y cortamos la cebolla roja en trozos no demasiado pequeños. Ponemos el aceite de girasol y sésamo en una cacerolla, calentamos y sofreímos la cebolla.
- Pelamos los ajos y el trozo de jengibre y los rallamos. Añadimos cuando la cebolla esté transparente.
- En un mortero, ponemos las semillas de mostaza, cilantro, pimienta y comino si no es molido, machacamos. Añadimos al sofrito junto a las hojas de curry y la guindilla (si le ponemos), para que se sofrian (podemos también hacerlo en una sartén con un poco de aceite, y añadirlo a la cacerola).
- Añadimos entonces las verduras, y rehogamos un poco.
- Agregamos entonces el tomate, removemos.
- Vertemos el caldo vegetal o agua, cubriendo las verduras. Añadimos la cúrcuma.
- Dejamos cocer hasta que las verduras estén tiernas, un poco antes de finalizar la cocción, ponemos el cilantro o perejil fresco, para que no pierda sus propiedades y para que quede más verde y bonito.
- Podemos acompañar con arroz integral o quinoa o trigo sarraceno o incluso pasta.