Si hay bibliotecas especializadas en ciencias, en ciertos tipos de literatura, en investigación... ¿Por qué no puede haber una especializada en literatura escrita por mujeres? Ojo, que no estamos hablando sólo de novelas o ensayos, sino de cartas, diarios, listas de la compra, notas a los hijos... Si los científicos pueden tener todo el material que necesitan en una sola sala, ¿por qué no va a tenerlo una doctora en literatura que quiera analizar las cartas de Emily Dickinson, esas que nunca se han publicado para el gran público? Por poner un ejemplo entre millones, vamos.
A mí me parece una idea estupenda.