Mostrando entradas con la etiqueta abuelas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta abuelas. Mostrar todas las entradas

21 de abril de 2017

SUPERABUELAS CON SUPERPODERES



Hay recuerdos de la infancia que nunca se olvidan... Recuerdos que van unidos íntimamente a personas muy significativas en nuestra vida. Guardamos en nuestra memoria detalles que pueden parecer muy sencillos, pero que por algún motivo han quedado grabados en nuestra memoria. Hoy recuerdo todavía como los pequeños de mi familia nos reuniamos cada otoño alrededor de una caja que mi abuela traía y de la que sin abrirla salían sensaciones tan mágicas que aun hoy, tanto yo, como aquellos pequeños y pequeñas  recordamos como un suceso extraordinario que venia  sin duda de un ser mágico y extraordinario, mi abuela...Mi superabuela.


La pequeña Carmen, la protagonista de la historia que os traemos hoy, comparte con nosotros  recuerdos que atesora y que la llenan de felicidad cada vez que vienen a su memoria, como seguramente os suceda  a muchos de vosotros. Cada fin de semana visita a su abuela Carmen, una abuela con superpoderes muy especial.


La Superapuela Carmen vive con otras Superabuelas que también tienen superpoderes. La Superabuela Carmen tiene el poder de hacer unas croquetas realmente mágicas, tan mágicas que te transportaba a un lugar parecido a la felicidad. La Superabuela María  tenía el poder de hacer volar la imaginación con tan solo abrir un libro. Lucía, otra de las Superabuelas, con tan solo una aguja y un dedal y su poder c-o-s-e-l-o-t-o-d-o había hecho felices con solo sus manos a cientos de personas. La Superabuela Celia tenia el poder de tejer con tanto amor que mantenía calentitos los sueños de grandes y pequeños. La Superabuela Concha tenía un poder  tan mágico que con tan solo sus abrazos,  sus  cosquillas te duraban días, incluso meses. El más dulce era el superpoder de la Superabuela Catalina con su interminable y mágica fuente de torrijas. Y el que más enternece a Carmen es sin duda el superpoder de la Superabuela Carmelita, una superabuela capaz de olvidarlo todo y disfrutar de las buenas noticias mil veces….


Carmen disfruta escuchando cada día  las historias de estas Superabuelas tan especiales, hasta que un día un suceso inesperado le hará descubrir que la fantasía es más real de lo que parece…. Os invitamos a descubrirlo abriendo las páginas de “Superabuelas con superpoderes” y disfrutar de esta entrañable historia que os hará buscar en vuestra memoria aquel superpoder que hacía a vuestras abuelas tan especiales. Recuerdos que las mantendrán vivas para siempre.

Las abuelas de antaño, como las de hoy, tienen ese poder mágico para los niños que las hacen tan especiales. Las abuelas de hoy no solo son aquellas que siempre tienen una chuche en su bolsillo mágico o nos consienten casi todo… Hoy más que nunca, vivimos rodeados de Superabuelas capaces de levantarse muy temprano para llevarnos al cole y recogernos al mediodía, ayudarnos con nuestros deberes, prepararnos el desayuno, el almuerzo y hasta la cena, cuidarnos cuando nuestros padres están de viaje o en el trabajo, velar junto a nosotros cuando estamos enfermos, pasear y disfrutar con nosotros en el parque, o leernos  una y otra vez ese cuento que tanto nos gusta… Las Superabuelas tienen grandes poderes: el del amor, la paciencia y  la entrega desinteresada, pero sobre todo, el don de habernos transmitido los valores que hoy nos hacen ser lo que somos. Y es que la ternura y el amor con el que lo hacen todo las convierten en seres tan  mágicos que las hará vivir para siempre en nuestra memoria.

El libro “Superabuelas con Superpoderes”, la segunda obra de nuestro compañero, amigo y coautor de este blog José Carlos Román, es un auténtico homenaje a las abuelas  que se entregan a diario para hacer nuestra vida y la de nuestros padres más fácil, añadiendo a todo ese toque, esa pizca de ternura que las hace tan especiales.

La segunda obra de José Carlos Román, tan creativa y poética, unido a ese toque de humor que la hace tan divertida y tan emotiva al mismo tiempo desemboca  en ese desenlace inesperado y fabuloso  que os aseguramos os emocionará, porque ¡quién no ha tenido o tiene una abuela con superpoderes! La magia y creatividad de la prosa de José Carlos Román  es un autentico soplo de aire fresco, una tierna caricia en el panorama actual del álbum ilustrado, atrapando a niños y adultos con sus historias tan cercanas.

Las ilustraciones que acompañan esta maravillosa historia corren a cargo de Cristina Quiles, encargada de dar vida a estas maravillosas e inolvidables mujeres, dotandolas a través de sus pinceles de la ternura que ser merecen. Los colores calidos y los detalles tan entrañables que fluyen de entre sus acuarelas nos hacen sonreir y emocionarnos como los niños que aún somos, recordando lo felices que nos hicieron nuestras Superabuelas con sus superpoderes.

"Superabuelas con superpoderes" ha sido editado por Editorial Amigos de Papel. Este Sábado 22 de Abril se presenta en la libreria Baobab de Sevilla a las 12.00 horas. Os esperamos!

LUIS

11 de mayo de 2015

EL ABUELO DE ZULAIMAR




En la actualidad la figura de los abuelos está muy presente en la vida de niños y niñas, ya que lejos de vivir aquellos su jubilación de otro modo, son los encargados en muchas ocasiones cuidar a los pequeños y vivir una segunda paternidad.

Este hecho convierte a nuestros abuelos en figuras imprescindibles hoy día, figuras esenciales que forman parte de juegos y experiencias que quedarán grabados en la mente de los más pequeños eternamente. Personas de referencia que sin duda nos marcarán para siempre.


La  portada de “El abuelo de Zulaimar” , el  maravilloso cuento que hoy os presentamos, nos cautivó ya antes de abrir sus páginas. Una preciosa postal llena de ternura que sirve de introducción a una particular historia de amor hacia los abuelos que ya no están con nosotros.  La ternura con la que la protagonista observa el espacio vacío que tenía que ocupar la figura del abuelo es todo un canto al amor y la admiración hacia nuestros mayores.

Zulaimar no tenía abuelo pero todas sus amigas tenían uno. Echaba de menos todo lo que ellas hacían con ellos: ir al parque, tomar helados, trazar caminos en la arena e incluso inmensos castillos que llegaban hasta el cielo. Por eso se le ocurrió pedir prestado uno de ellos a sus amigas... pero la respuesta no fue todo lo positiva que ella esperaba.


De este modo comienza la historia de Zulaimar, una historia llena de fuerza, entrañable y tierna, que lejos de entristecernos nos fuerza a creer en la creatividad y la imaginación como elementos que nos pueden hacer más felices. Y es que Zulaimar, lejos de amilanarse, construirá a su propio abuelo con el que vivirá miles de aventuras.


Una historia creada por Juan Carlos Méndez Guédez  que está cargada de momentos memorables, llenos de ternura y alegría. La pequeña Zulaimar nos enseña cómo frente a la soledad hay que reinventarse y utilizar la fuerza que nos puede dar creer en nosotros mismos, en este caso utilizando la imaginación y la creatividad como armas imprescindibles, frente a la tristeza. Y es que esa capacidad creativa que todos llevamos dentro puede poner freno a situaciones hostiles que podemos vivir, pero sobre todo crear belleza y ternura. Zulaimar y su abuelo con olor a sandía lo consiguieron. 


Con ilustraciones de Elsa Klever, "El abuelo de Zulaimar“ ha sido editado por la prestigiosa editorial gallega OQO.

LUIS

29 de enero de 2015

LA ABUELA DURMIENTE


"Mi abuela duerme.
Mi abuela duerme todo el día.
Mi abuela duerme todo el día desde hace un mes......"


Si pienso en mi infancia vienen a mi mente momentos inolvidables. Sin duda tuve una infancia feliz porque los adultos que me rodeaban así la hicieron. Muchas cosas aprendí de ellos, de sus silencios y de sus risas, de sus miradas, de sus cuidados, de sus consejos, de la ilusión que trasmitían con pocas cosas en el bolsillo.  A veces olvido hacer los deberes que me mandaron, sí soy muy vago, lo sé. Pero creo que hoy están, allá donde el viento se esconde, orgullosos de mí.

 Y ese orgullo es una emoción reciproca porque hoy soy lo que soy gracias a ellos, a su recuerdo y a lo que me transmitieron.

En mi mente no solo hay momentos que son imborrables. Hay un sinfín de sensaciones y emociones que aún hoy permanecen en mí  que quedarán y me acompañarán siempre. Los recuerdos pueden ser traicioneros, al principio pueden entristecerte, pero si lo miras bien luego se convierten en un bálsamo para el alma. 



Hace tiempo escuché a José Saramago en una entrevista, recordar a su abuelo abrazándose a los árboles en su despedida. Fue una entrevista emotiva que ensalzaba el valor de lo que había aprendido de él y de lo que había significado en su vida; de la importancia de la memoria y de los recuerdos. Hablaba en presente de él y de sus consejos. Y es que hablar en presente tenía un significado claro para el escritor, que resumía el final de esta charla  hablando sobre la importancia de no olvidar a aquellos que no están ya con nosotros ya que ellos permanecen vivos mientras existe alguien que pueda recordarlos.


Hoy os traemos un libro que habla de todo eso. De la importancia de nuestros mayores que hoy se han convertido para muchos niños y niñas en más que abuelos. “La abuela durmiente” nos acerca a  la importancia de los recuerdos junto a nuestros abuelos y nos enseña a apreciar lo  que hemos vivido junto a ellos para que no caigan en el olvido.

Un texto emotivo y poético que nos invita a reflexionar con una inusitada ternura sobre el tema de la pérdida y las ausencias desde el punto de vista de un niño. Pero  lejos de transmitirnos la tristeza que ese trance nos causa, esta tratado con una sensibilidad muy difícil de conseguir en este tipo de obras que tratan temas tan espinosos como el de la muerte de un ser querido. ¿Y por qué? pues porque el tema principal, más que la ausencia es el amor y la ternura hacia nuestros abuelos y seres queridos que ya están donde el viento se esconde...

“La abuela durmiente”, con texto de Roberto Parmeggiani e ilustraciones de Joao Vaz de Carvlaho, ha sido editada por Editorial Kalandraka.

LUIS

4 de diciembre de 2012

ABUELAS DE LA "A" A LA "Z".

 
¿Puede haber algo que entrañe más dulzura que una abuela? ¿Algo que evoque más recuerdos de los momentos felices de nuestra niñez? Pensad en ellos y seguro que aparecerá en alguno de ellos vuestra abuela cantando, cocinando, tejiendo, o a lo mejor, leyéndoos algún cuento. 

Esos momentos son en los que yo recuerdo a mi abuela que, aunque no reía mucho por los avatares que le había regalado la vida, siempre estaba atenta a nuestros cuidados, proporcionándonos cariño a raudales. Y aunque ya no está con nosotros, sus recuerdos hacen que siga viva dentro de nuestra memoria...

Y de las abuelas sabe mucho Raquel Díaz Reguera que nos trae en este maravilloso álbum editado por Lumen, un catálogo de 29 abuelas que surge de la pasión de la escritora e ilustradora por el mundo de las abuelas, al considerarlas un pilar tan importante en la infraestructura familiar.


Raquel nos trae a los tipos de abuelas que ha conocido a lo largo de su vida, bien a través de las suyas o las abuelas de los demás. Como ella misma explica en el libro, las abuelas que en este álbum podemos encontrar pueden estar repartidas por todos los confines de la tierra y los más afortunados pueden trotar algunas tardes sobre las rodillas de alguna de ellas o quedarse dormidos en su regazo. Pero todas tienen una cosa en común: han tachado muchos, muchísimos días en el calendario y tienen nietos, o sobrinos nietos, o niños revoloteando a su alrededor, cosa que las hacen merecedoras de este título.


Podremos reconocer entre estas simpáticas abuelas a la abuela "consiguelotodo", que con su caña de pescar caprichos pesca cualquier deseo de sus nietos, la abuela "cocinilla" que con sus recetas conquistan los paladares de los nietos más exigentes (sin duda, esa era la mía). También conoceremos a la abuela "tejedora de cuentos" que conoce todas las palabras del mundo y sabe colocarlas en el lugar oportuno, por eso son infalibles a la hora de inventar personajes e historias que parecen reales, o la abuela "melancólica", a la que cada palabra, cada gesto, cada comida, cada calle le evoca algún recuerdo y cada recuerdo trae consigo un suspiro o cientos de ellos.


Podrás reconocer también, si es como la tuya, a la abuela "desmemoriada" que puede recordar perfectamente lo que desayunó un domingo de hace ciento veinte años, pero sin embargo no se acuerda nunca de tu nombre. Ese es el tipo de abuela en la que se ha convertido mi propia madre, que ahora disfruta de sus nietos, como en su tiempo lo hizo la suya con mis hermanos y yo.

Las abuelas "lunáticas" son esas que no parecen vivir con los pies sobre el suelo. En sus casas los gatos tienen tres patas y los burros pasan volando por delante de las ventanas. ¿Y conocéis a alguna abuela "regalona"? seguro que sí, porque son aquellas que piensan que no hace falta ningún motivo especial para regalonear, basta con tener delante a un niño, a la vista algo deseable y envolvible y un rollo de papel celo en el bolso.

Y así, podríamos seguir describiendo a los distintos tipos de abuelas que aparecen en este libro, en los que seguro identificaréis a la vuestra en alguno de ellos, como la abuela "curapupas", la "repostera", la "sabelotodo", la abuela "por carta" o la que más nos ha gustado a nosotros, la abuela "reina", aquella que resultaría de concentrar en una sola abuela todas las sabidurías y todas las habilidades de todas las abuelas existentes y de las que quedan por existir.


Pero ojo, no os engañéis, que no todas las abuelas son tan entrañables. A lo mejor habéis tenido la mala suerte de toparos en vuestro camino, por ejemplo, con alguna abuela "bruja", aquella a la que no les gusta los niños, bueno, en realidad los detestan y a los únicos a los que pueden soportar durante un corto período de tiempo, sin que su presencia les produzca urticaria, es a los nietos propios. O las abuelas "tiquismiqis" cuyo lema es: cada cosa en su momento y en su lugar. A éstas les gustan los niños limpios y repeinados, a ser posible, sentaditos y silenciosos. Hay alguna de esas abuelas a las que no nos gustaría conocer jamás, pero afortunadamente son las menos.


Sin duda eéte es un libro entrañable, lleno de entrañables personajes, donde además podréis descubrir los secretos mejor guardados de cada una de las 29 abuelas que la autora tan prodigisiomamente ha ilustrado. Sus gustos, sus inconfundibles objetos y en páginas especiales del libro, lo que las distingue a cada una de ellas, como sus casas, las mascotas que suelen tener, sus frases o dichos más comunes o la tipología de besos que dan según así sean.


Amigos, realmente éste es un álbum que no puede faltar en vuestras estanterías, por la dulzura que desprende, la ternura con la que está escrito y la belleza con la que está ilustrado. Un libro cargado de poesía y sentimiento, el sentimiento que desprenden esas entrañables mujeres a las que llamamos abuelas y que podremos volver a traer a nuestros recuerdos en cada una de las páginas. Solo tenemos que buscarla y si cerráis los ojos y os concentráis, seguro podréis hasta volver a revivir su olor o su dulce voz....

Y de la belleza de este libro se ha hecho eco también la prensa. Aquí os traemos algunas de las entrevistas que ha concedido la autora a raíz de la publicación de "Abuelas de la A a la Z" el pasado noviembre:




 Reportaje en "El País"



Arquetipos de abuelas, de la A a la Z (video de EFE):