Escrito por Luis Roca Jusmet
El primer largometraje de Carol Rodriguez Colás es un buen regalo para los espectadores. Es una película muy fresca, que respira mucha veracidad. Se nota que tanto la directora como su hermana Marina, la guionista, beben de su propia experiencia biográfica. Trata de la amistad, del clasismo, de la necesidad de asumir los orígenes... Entretiene, emociona, hace pensar: combina, por tanto, muy buenos ingredientes. Muy buena interpretación del cuarteto protagonista, muy creïbles en sus papeles. Me ha gustado también la banda sonora, de Francesc Giner y Clàudia Torrente
Me parece interesante esta muestra de la periferia de Barcelona, que forma parte de la Cataluña real, aunque para muchos sea invisible.