lunes, 28 de septiembre de 2009

MODERN TIMES

Lo más interesante de los festivales o encuentros es sin duda la gente que uno conoce. En ese sentido, volví de Rosario cargado de libros y con la certeza de haber conocido a un puñado de personas sensacionales. Que además escriben muy bien! En breve organizaré la barra lateral para que aparezcan algunos de sus blogs. E iré subiendo poemas.
Empiezo con el dominicano Homero Pumarol. Leímos juntos en el bar Tercer Mundo, y en Pachamama, y anduvimos de bares también. Pego acá abajo un poema, pero no dejen de entrar a la página de El Hombrecito, su banda de spoken word, y escuchen Poetas de Ciudad Nueva, verdadero hit en el festival.

Modern Times

Bob Dylan sacó un nuevo álbum
Que se llama Modern Times
Y tú acabas de perder otro trabajo.

Aguantaste nueve meses esta vez
Y ni siquiera conseguiste liquidación
Y dicen que Dylan duró más de 3 años componiendo
Los nueve temas que contiene el álbum,
Que ya se vende como arroz en todas partes del mundo.

Indudablemente para ambos son tiempos modernos,
Pero claro que es más interesante escuchar
Lo que tiene que decir Dylan al respecto,
A quién le interesa el despido de un empleado
sin hijos ni esposa ni perro que alimentar.

Seguro bebías demasiado o usabas drogas,
Lo que en Dylan es una virtud.
Piensa que ese junkie de ojos claros
Ya andaba por las carreteras con los Beatniks
Y que los Beatles ya le habían dedicado un tema en Revolver
Y que hace mucho es famoso en el mundo entero
Y tiene más de un disco de oro colgado en las paredes de su casa
Y un álbum que te gusta mucho llamado Blonde on blonde
Y que ya había tenido muchas rubias como ángeles en la cola de su motor
Y que hace tiempo dejó de andar en motor por un terrible accidente al que sobrevivió para seguir cantando y componiendo y tocando en Europa y Estados Unidos
Y que ya había pasado del folk al blues al jazz al rock al country
Cuando tú no eras ni siquiera una idea en una casa alquilada.

Y casi cuarenta años después pierdes
El último empleo que has sido capaz de mantener nueve meses,
En un país donde Dylan nunca fue ni será popular.

Tal vez no lo creas,
Pero Bob Dylan sacó un nuevo álbum
Que se llama Modern Times.

Homero Pumarol

Nació en 1971, en Santo Domingo, República Dominicana. Se tituló en leyes por la Universidad Nacional Pedro Henriquez Ureña; además estudió escritura creativa en New Mexico State University (Estados Unidos) y cursó un año en el programa de la Escuela de Letras de Madrid.

Publicó sus primeros poemas en ediciones baratas autofinanciandas de menos de mil ejemplares; Cuartel Babilonia y Second Round corresponeden a esta época. Más tarde, 20 poemas suyos titulados Fin de carnaval quedaron finalistas en el concurso latinoamericano de poesía convocado por internet, estos poemas fueron publicados recientemente en Argentina por editorial Vox (y si estás en Bahía, se lo podés pedir a Milton, que te lo lleva a tu casa!).

viernes, 25 de septiembre de 2009

BOOK DE FOTOS




Junto al fotógrafo y novelista Carlos Ríos, y su asistente, crítica, poeta y coiffeur Ana Porrúa, fuimos al monumento a la bandera a hacer unas fotos enmascarado, mientras esperábamos a Yanko González Cangas y a Rosabetty Muñoz, que se tomaban unos vinos dentro del monumento, en un copetín ofrecido a la comunidad chilena, por ser el día de la bandera (chilena).
Ahí fui sorprendido por una horda de desaforados escolares fanáticos de la lucha libre y la poesía contemporánea argentina, con quienes posé gustoso.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

VIDEO DEL FESTIVAL DE POESÍA DE ROSARIO

Volví del XVII Festival de Poesía de Rosario, donde la pasé fantásticamente bien. Ya les iré contando, y subiré poemas de algunos de los amigos con los que me crucé ahí. Ahora les dejo el link de Eterna Cadencia, donde Patricio Zunini subió completo el "Díptico para ser leído con máscara de luchador mexicano", y se puede ver el video en el que lo estoy leyendo, en la plaza del Centro Cultural Bernardino Rivadavia, durante la Maratón de Poesía que cerró el Festival.

lunes, 14 de septiembre de 2009

EN BREVE

Se viene POEMA PARA SER LEÍDO CON MÁSCARA DE LUCHADOR MEXICANO (estamos practicando)

sábado, 12 de septiembre de 2009

RAMIRO


Recuerdo ahora que en algunas clases en Normal escuchamos este tema. Porque hablábamos de collage, de arte siglo XXI, porque algunos alumnos no lo conocían (y quedaban maravillados), porque otros sí lo conocían (y volvían a quedar maravillados), por nada, porque sí, porque en una escuela de arte cómo no vas a escuchar a Ramiro Musotto, porque si Maradona hacía jueguito con una tapita de gaseosa, con esa misma tapita Ramiro te tocaba lo que fuera, porque venía a Bahía en un mes y cómo no ir a verlo al teatro, al playón, o a cualquier parte, porque después de escucharlo crecía algo así como un entusiasmo en la clase, y nos sentíamos más creativos, o con más ganas de hacer, no se. El tipo tenía ese poder. Perdón: lo sigue teniendo.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

LA PALABRA JUSTA

En 1968 Francisco Urondo lee (y organiza) la poesía argentina de los últimos veinte años. En un pasaje dice que "la poesía argentina es sustantiva". Uno no puede dejar de pensar en Sartre y en su frase-slogan: nombrar es denunciar. Pero si bien esa es la lectura cantada, por contexto de época y de ideas, al leer "poesía sustantiva" yo me pregunto por el adjetivo, y pienso en Huidobro, en su verso-máxima: "el adjetivo / cuando no da vida, mata". Y en este poema, de los últimos de Urondo, cuando el verso se vuelve argumentativo, conversacional, instalado en un registro de cierta sobriedad, busco, entre esos sustantivos que nombran la realidad de la cárcel y la militancia, que de algún modo se plantean la relación (a esa altura conflictiva en toda latinoamerica) entre poesía y política, o entre los poetas y el resto de la sociedad, o entre urgencia revolucionaria y demora de la escritura, y encuentro esta dosificación de adjetivos: concreto, Revolucionaria, legítimo, Divina, viejo, y por último, peronista (no cuento Happy, porque viene en frase armada, ni los primeros Viejo porque funcionan como nombre). Si en los sustantivos se puede ver qué realidad se nombra y cómo se la nombra, es en los adjetivos (y en la precisa economía que los distribuye en el poema) donde están el sostén ideológico y el programa de acción sobre esa realidad.

¿SOY EL POETA DE LA REVOLUCIÓN?

¿Soy el Poeta de la Revolución

acaso, como dice

por ahí - bromeando -

un compañero de cárcel? No. El poeta

de la Revolución es el Pueblo; pero el

pueblo concreto, de persona a

persona; el Viejo Ponce que

ayer cumplió años y casi
le revienta el corazón de alegría
cuando le cantaron La Marchita

Revolucionaria del Pueblo. La cantaron
como si fuera el Happy Birthday, y se fumó

un habano legítimo, regalado

por Fidel al Chicho, y por éste a

un amigo, y del amigo a mí y de mí al Viejo

Ponce, por la Gracia Divina. Ponce,

el viejo gladiador peronista,
es el Poeta de la Revolución.


Francisco Urondo

jueves, 3 de septiembre de 2009

PREVIEW

Adelanto fragmento de un poema que estoy escribiendo. Es apenas borrador, así que con clemencia. El título tentativo de todo el texto sería algo así como Poema para ser leído con máscara de luchador mexicano, aunque no se. Por lo pronto, el comienzo:


I – La era del Karaoke

Los cactus han brotado en el verano, uniformes e instantáneos. Se los ve

desde el bar Oro Preto, en el declive de una tarde bochornosa.

Se oye hablar de palmeras, y de playas donde el agua es de un celeste cristalino

y de cardúmenes que se abren como estallidos multicolores,

se oye el hielo derretirse en unos vasos de cuello largo,

y motores que regulan en el semáforo de la avenida

y los primeros acordes del tema musical de Titanic.

Están en un extremo de la peatonal Drago, frente al bar Oro Preto,

están entre los cactus, bajo el cartel azul y verde que dice MOVISTAR,

delante de un mundo iluminado por celulares y sonrisas ploteadas en el vidrio.

¡DUPLICATE! ¡RECARGAME! ¡SOMOS MÁS! Pero ellos no son parte

de la campaña de MOVISTAR, tampoco lo son los cactus,

aunque una mujer le dice a otra: mirá qué lindos

los cactus que puso MOVISTAR. Pero los cactus, verdes, instantáneos,

uniformes y estampados sobre una gruesa lona vinílica, no forman parte

de la campaña publicitaria de MOVISTAR, están ahí

para simbolizar el desierto

aún presente en la ciudad, están ahí

para recordarnos que el desierto

sigue ahí, bajo el cemento. Aunque es cierto

que son lindos y que los artistas

se inclinaron por la misma tonalidad de verde que los creativos de la transnacional. Ahora,

desde una mesa en la vereda del bar Oro Preto,

asistimos al hundimiento del Titanic, que este grupo

( dos sikus, dos parlantes, una quena,

un amplificador TONOMAC, una flauta de pan)

interpreta con entusiasmo andino entre cactus de lona vinílica,

ante un cardumen multicolor de celulares

que se recargan y se duplican en la pecera telefónica.

El Titanic, en la versión electro-kolla, más que hundirse, se disuelve

en trinos de quena y siku, y he aquí a los músicos,

sobrevivientes tenaces del naufragio de un continente, en los estertores

de la era del karaoke, con sus ropajes que juzgamos típicos, aunque no sepamos

típicos de qué, de pie y agradeciendo la llovizna

de aplausos que no bien

toca el desierto se evapora.


Y como broche de oro, fuera de poema, con la esperanza de contribuir a la confusión general, esta versión de El Humahuaqueño que me pasó Anita:




lunes, 31 de agosto de 2009

ERKE, CHARANGO & BOMBO

Se vienen las III Jornadas HumHA organizadas desde el área Historia del Arte del Departamento de Humanidades de la Universidad Nacional del Sur, que se realizarán desde el miércoles 2 al sábado 5 de septiembre próximos en la Casa de la Cultura. Este año el tema convocante es Representaciones e identidades. Pueden ver todo el programa acá.
Y a propósito de representaciones e identidades, les dejo este texto sorprendente sobre El Humahuaqueño (que bailé disfrazado de coya en la primaria)


¿
Erke, charango y bombo?


El colectivo de la l
ínea 60 recorría las últimas cuadras que le restaban por la avenida Santa Fe, antes de girar hacia la derecha. Entre sus pocos pasajeros, sentado "del lao del sol" porque aquel otoño venía fresco, un moreno de rasgos marcadamente mestizos garabateaba signos musicales sobre un papel pentagrarnado. Era Edmundo Zaldívar (h.), a quien los directivos de Radio El Mundo hacia donde él se dirigía le habían encargado componer algún "aire norteño" capaz de insuflar nuevo interés entre los cultores de la música criolla, en vista de que los antes muy festejados dúos tradidonalista de carácter cuyano-pampeano parecían haber comenzado a perder buena parte de su repercusión popular.

Edmundo ten
ía su obra "colectiva" prácticamente terminada. Sólo faltaba pasarla en limpio, porque los barquinazos del vehículo no respetaban plicas ni armaduras de clave y más bien se encargaban de introducir sus propias alteraciones en la melodía. Algunas dudas rondaban al joven músico. Una de ellas era e! modo de finalizar su obra; sin ignorar que, en caso que algún colega se dignara "hacer" su tema, lo "haría" en todo el sentido de la palabra, cambiando partes a su gusto, como era casi de rigor en el ambiente. ¿Qué era, finalmente, el "aire norteño" que Zaldívar había compuesto? ¿A qué especie coreográfica o lírica tradicional podía ser técnicamente asimilado? Sin duda, al huayno boliviano. Pero no era pentatónico salvo en su introducción, que evocaba los arpegios del arpa y se ajustaba el Modo B de la clasificación de los esposos D'Harcourty tanto su fraseo como su juego rítmico- melódico presentaban una regularidad a la que los auténticos huaynos eran ajenos. Todo ello justificaba, por lo pronto, un cambio de rótulo.

Antes de bajar del colectivo, barajaba ya, entre otros t
ítulos opcionales, el de "El humahuaqueño". El flamante autor "Cacho" para los amigos sólo conocía el Norte argentino a través de las charlas de su padre con don Ricardo Rojas, y el nombre de Humahuaca resonaba en sus oídos con eco de antigales a flor de tierra, cholas carnavaleras de lindo mirar" y proliferación exuberante de instrumentos musicales. Él había nacido en Buenos Aires y, en todo caso, era buen conocedor de estilos y marotes viejos. Pero esto de meterse con el Norte... (Al fin y al cabo pensó— sólo se trataba de cumplir con un encargo profesional sin mayores trascendencias.)

Al llegar, sus compa
ñeros del conjunto "Motivos de mi Tierra" que dirigía Pancho Cárdenas lo terminaron de convencer. El tema se tituló "El humahuaqueño" y fue identificado como "carnavalito". Lo estrenó Elida Lacroix en la misma radio. Poco después, Joaquín Pérez Fernández lo llevó a dar la vuelta al mundo formando parte de la música de su ballet. La repercusión del tema fue impresionante. En pocos años fue grabado en los más diversos idiomas por una verdadera multitud de artistas internacionales.

A esa altura de las circunstancias, ya resultaba imposible convencer al p
úblico especialmente al argentinoque "erke, charango y bombo" como rezaba textualmente la letra del "carnavalito" era una asociación instrumental tan insólita como absolutamente inexistente, debida a la inspiración y a la fantasía de un compositor afortunado.

Edmundo Zald
ívar no sólo había creado un nuevo género (lo que no es poco mérito para un músico): "El humahuaqueño" llegó a convertirse en una especie de himno popular de la propia humahuaca, pasando a integrar el repertorio de las orquestas campesinas y las comparsas carnavaleras.


Fragmento de
Catálogo ilustrado de instrumentos musicales argentinos, de Rubén Pérez Bugallo, Ediciones del sol, Buenos Aires, 1993.


viernes, 28 de agosto de 2009

SÁBADO 29

miércoles, 26 de agosto de 2009

VUELVE ARCHIVO CABALLERO

Palabras cruzadas from Ferrowhite on Vimeo.

ARCHIVO CABALLERO, un documental en vivo, con Pedro Caballero, dirección de Natalia Martirena, sábado 29 de agosto, 19 hs, en Ferrowhite, museo taller.