Hoy os voy a dar un poquito el ladrillazo, jajaja, pero es que el día de ayer fue especial por varias razones: Una de ellas fue que por fín salí a correr -con más miedo que vergüenza- y el resultado no pudo ser mejor. Cayeron 8.5k en los que tuve que lidiar con un viento muy incómodo, pero al mismo tiempo muy gratificantes. Es increíble cómo 4 días de descanso se pueden hacer tan largos... Cuando paré el reloj me extrañó el tiempo, y aluciné cuando saqué la media por kilómetro: ¡a 5'09"! Además vino Sergio para revisar mi espalda y soltar mis piernas, y he quedado en perfecto estado de revista para el domingo. ¡Genial!
Pero no sólo hubo carrera, también pudimos darnos un lujazo Ana y yo, ya que nos íbamos a celebrar nuestro
15 aniversario al
Coque, donde también organizamos nuestra boda hace 3 años. No puedo decir más que alabanzas sobre este restaurante emplazado en Humanes de Madrid, en el que destaca su trato exquisito y muy personal, además de su altísimo nivel de cocina de vanguardia.
Tuvimos el gran honor de ser los únicos comensales en la noche de ayer. Tan sólo dos mesas reservadas y una cancelación de última hora, nos hizo sentirnos muy especiales durante la velada. Y me explico:
Nada más llegar nos reciben con los brazos abiertos, como si nos conocieran de toda la vida, pero con el encanto de un restaurante de alta cocina. Inmediatamente nos animan a bajar a la bodega, donde nos invitan -por cuenta de la casa- a una copa de bienvenida (manzanilla para Ana y cava para mí) con unas entradas fantásticas para entrar en calor.
Tras dar buena cuenta, y en lugar de subir por las escaleras principales, nos acompañan por el ascensor de servicio......... ¡Ostias, esto es nuevo! Nos miramos Ana y yo, sorprendidos, porque quien nos abre la puerta es Diego Sandoval, Maitre y hermano del Chef. Nos da una calurosa bienvenida y nos indica que le sigamos hacia la impresionante cocina del restaurante. Allí está Mario, ataviado con su uniforme y con una incipiente barba, que nada más vernos se lanza con una amplia sonrisa a saludarnos y darnos la bienvenida.
Estamos en la gloria, y a sabiendas de lo bien que sientan estas cosas, nos prepara unos taquitos melosos de queso rellenos como aperitivo delante de nuestras narices. ¡Deliciosos! Nos despedimos de él, para irnos directos a la mesa, donde Diego nos recomienda un fabuloso vino madrileño con una potente nariz a frutos rojos, ¡ñam!
Y empieza el festival de tres horas... Os dejo el impresionante menú que tuvimos el gusto de paladear anoche y que recordaremos durante mucho tiempo. ¡Sin palabras!
ENTRADAS
Copa de bienvenida.
Emulsión de gachas con sorpresa de ibéricos.
Sorpresa de queso meloso.
Cocido madrileño.
Patatas doradas con salsa oriental.
MENÚ GASTRONÓMICO
Ñoquis de boletus con Jamón, con caldo de jamón ibérico.
Sopa de moluscos y crustáceos.
Verduras autóctonas con brotes silvestres sobre lámina de repollo y pétalos.
Carabinero de Huelva con sal de curri.
Huevo con espárragos trigueros, hongos, ajetes tiernos y orquídeas.
Ensalda de besugo escabechado con velo de tomate, nueces y escarola.
Cocochas de bacalao sobre tirabeque y muselina de ajo.
Bonito del norte con tomate encebollado y tandori.
Guiso de Tendondes de vaca brava con amanita cesárea y ahumado al horno de leña.
Cochinillo lacado asado en horno de leña.
Naranja helada acidulada gran pomier.
Bosque encantado de setas y chocolate con helado de hierba buena.
FINALES
Dulces de la casa, teja, crujiente de chocolate, tapón de chocolate con naranja, membrillo de fresa...
Infusión y copa.
Otras referencias: