Un comentario al post anterior, de
Fernando, me parece que merece esta entrada.
El carisma de nuestra congregación –Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús- es ’La Reparación al Corazón de Jesús’, que se podría describir así: Anunciar a todas las personas la alegría de la certeza de que estamos salvados; Jesús asumió todo mal que tengamos los hombres y lo reparó él mismo. Se trata ahora de que cada uno lo aceptemos.
Y este carisma lo trasmitimos las hermanas en dos vertientes: La adoración a Cristo en la Eucaristía –nosotras adoramos, pero sobre todo invitamos a todos a que adoren- y lo que llamamos ‘la educación en la fe’, que abarca un espectro muy amplio, desde los colegios hasta cualquier tipo de promoción social que colabore con que la persona sea reconocida en su dignidad deseada por su Creador.
Por eso, en nuestras casas tenemos siempre una iglesia -en lo posible con puerta a la calle- con tiempos fijos de exposición de Jesús a la adoración de todos, y distintas obras apostólicas: colegios, casas de espiritualidad –para acoger gente en retiros, grupos de oración, espiritualidad, solidarios y de promoción humana-, inserción en los barrios, ayuda en las parroquias, talleres y cursos de educación no formal, apoyo escolar, y ahora también, sobre todo en Africa, dispensarios y salas de salud.
No estoy segura de estar nombrando todas, pero en lo que puse se nota la amplitud de actividades.
También hay hermanas que se dedican a pastoral carcelaria, a medios de comunicación –este blog también intenta tener ese mensaje detrás-, y tantas cosas más.
Todo esto, por supuesto, tratando de entregar, en lo apostólico además de en nuestro propio ser, nuestro carisma reparador.