Cebar
Los mates tibios lavan la tarde
cebo mil veces la misma historia
y la dejo secar al sol
para volverla a tomar.
El agua deja ir al calor,
el sol se esconde en la pared,
y la chica de la historia
me revuelve el mate.
Sin estar
causa / que se me laven las tardes,
si estuviera
creo / me quemaría los labios.
El problema
de acostumbrarse a cebar
es que no te sigan
la ronda.
Caminos del vino
mientras tanto se añeja en botella hasta
que algún desprevenido consumidor del mercado interno decida
ahogar en él sus
penas.
Eugenia Segura
Las
vecinas se agolpan en la vereda
para
ver los fuegos artificiales,
mañana
dirán
lo hermoso que fue todo
de
una fiesta que no entendieron
pero
no dejan de seguir.
Que
la nueva reina de la vendimia
es
una chica muy linda
y
este año
hasta
sabe hablar bien.
Pienso
en
la virreina,
en
cuánto habrá tenido que arrodillarse
previamente,
en
su cosecha de votos
y
encima
terminar
segunda.
De Coso, Ediciones del Dock, 2013.