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lunes, 5 de septiembre de 2011

Ellos



Siempre me causaron rechazo los hombres que hablan muy mal de sus ex. O sea, una cosa es decir "estaba re loca", "no me dejaba hacer nada" y otra cosa es decir "la conchuda de mi ex no quiero ni que me mande un sms para decirme algo de mi hijo". o "la pelotuda que haga lo que se le cante". No sé porqué siempre desconfío de esos hombres, al igual que los que ven a los hijos una vez a la semana. ¿Qué sos... el tío?. No sé porqué, pero cuando escucho a un hombre así no me dan ganas de nada, aunque lo que esté en juego sea solo algo sin compromiso. Además, si llegás a algo serio con ese hombre y despues se pudre todo, no te quejes, jodete....vos ya sabías...ahora la "forra de mi ex " serás vos.
Las mismas actitudes veo en algunas mujeres.: "el innombrable de mi ex", "el hijo de puta de mi ex". Si fuera hombre, también me alejaría de esas mujeres.
No sé, todavía no entiendo como se puede odiar o detestar a alguien con quien se pasó
buenos momentos. Entiendo los enojos, las puteadas, el sentir que es un o una pelotudo/a, pero hay que trascender eso y quedarse con la otra parte, es decir, con la historia vivida con él/ella y que fue elegida por ambos.
Personalmente, siento que con cada hombre que compartí algo fue importante. Siento que todos, en mayor o menor medida, contribuyeron a la mujer que soy hoy. Sin ellos no podría haber crecido, sin ellos no me habría podido conocer a mí misma.

jueves, 3 de febrero de 2011

¿Qué será de su vida?



Las personas que pasan por nuestra vida, sea un rato o mucho tiempo, dejan una huella. A veces, hay personas con las que compartimos un par de encuentros nomás y por algo no se da y eso no nos provoca nada, porque de hecho, es algo que elegimos porque la persona no nos llenaba lo suficiente. Sin embargo, a veces pasa que después de un tiempo largo volvemos a pensar en esa persona. Que jodida que es la mente, ¿no?.
Capaz que a la chica o al chico que no ves hace tres años, hoy te dan ganas de saber de él. ¿Qué estará haciendo?, ¿Estará en pareja?, ¿se acordará quien soy?. Y quizás hasta se abre la posibilidad de volver a tener un encuentro aún sabiendo que esa persona no llena todas nuestras expectativas. Pero sentimos ganas de saber como nos sentiríamos hoy con esa persona.
También sucede que el tiempo nos hace olvidar de algunas cosas y resignificar otras. Por ejemplo, capaz que luego de tres años apenas te acordás que te molestaba de esa persona o porqué te peleaste, y en cambio, te acordás que una vez pasaron una noche linda o charla entretenida. O que no era tan rompebolas como las o los que vinieron después. O que era buena persona. Y te dan ganas de llamar, mandar un mail o algo de eso, aunque muchas veces no lo hagamos por no quedar desubicados o por miedo a que nos manden a cagar.
Yo he recibido mensajes de hombres después de años de no verlos y lees y te preguntás: ¿y a este que le pasó? hace tres años que no cruzamos una palabra y ahora aparece? y lo peor era que cuando querías que te llamara no lo hacía, y cuando ya te olvidaste, aparece. Y a mí también a veces me han dado ganas de saber de una persona, que será de su vida. Y hasta a veces me surge esa boludez de saber que recuerdo tiene de mí hoy luego de el tiempo que pasó.
Y a ustedes, ¿les pasa algo de esto?

jueves, 23 de diciembre de 2010

Mensajitos de fin de año



No iba a postear en estos días festivos, pero visto que el post anterior está colapsado, se me ocurrió hacer este artículo ya que estas fechas suelen hacernos recordar de tiempos pasados o activar fantasías. Es común que para Navidad o Año nuevo aparezca el llamado, mail o sms sorpresivo de algún ex o incluso que a nosotros mismos se nos ocurra mandar un Feliz Navidad para tantear un terreno que parecía olvidado.
Incluso, muchas parejas comienzar formalmente un 25 de dieciembre o 1 de enero.
Y algo muy frecuente también es decidir si se le manda un mensajito o no al o la amante.
Además, en esta fecha hay una cierta licencia para saludar a todos sin verguenza o sin quedar desubicado, por lo que muchos se animan ahora a escribir o hablar cuando no lo hicieron durante el año.
¿Te pasó alguna vez de recibir mensajes de hombres o mujeres que nunca pensaste que te iban a escribir? ¿Te viste escribiendo un sms sin pensar que ibas a hacerlo? ¿Esperas ansiosamente una llamada o mensaje de alguien durante estas fiestas pero no estás dispuesto a escribir vos si no lo hace primero él o ella?
Yo recuerdo hace unos cuatro años, tipo 22 hs, en plena cena, yo con el celular sobre la mesa, mi mamá de un lado y mi pareja del otro. Llega un Sms. Agarro el celular sin sospecha, con total naturalidad porque no esperaba mensaje de nadie especial ni tenía nada que ocultar y leo: Feliz Navidad, mi amor. Siempre pienso en vos.
De más está de decir que me atraganté con el vittel toné y no sabía para donde revolear el teléfono. Y lo peor era que a ese hombre no lo veía hace un año o más y que además creo que nunca me había escrito mi amor. Como sea, estas fechas parecen que activan cosas que quedaron dormidas.

martes, 11 de mayo de 2010

Shock de hijos ajenos

Hoy vuelvo hablar de los hijos pero desde otra perspectiva. Seguramente a todos nos ha pasado cruzarnos con un o una ex y verlo llevando un cochecito de bebé, o verla a ella embarazada, o jugando a la pelota en la playa con dos nenes. Por una extraña razón, la imagen nos choca. ¿Me van a decir que no??? Por más que él o ella sean sólo un recuerdo en tu vida, impacta ver a un ex con un hijo, sobretodo si vos no pudiste rehacer una pareja.
Y ni hablar si fue una relación larga e importante de esas en las que hasta se habló del deseo de tener hijos juntos.
Este post se me ocurrió porque hace unos días vi una entrevista que la hacían a Isabel Macedo en la que hacía referencia a los tres hijitos que tiene Facundo Arana con otra mujer...y la mina decía: obvio q me deprimí cuando lo vi en la tele re feliz con sus mellizos! me tiré en la cama a llorar y a comer chocolate! (para los que no entienden de que hablamos porque son de otro país, Isabel Macedo es una actriz argentina muy bonita que estuvo muchos años en pareja con un actor de telenovela también bonito (el de la foto), se separon y al toque él tuvo tres hijos). Por supuesto la Macedo desquitó su bronca y se volteó a cuanto tipo casado y soltero se le cruzó por el camino! Está muy bien...todas haríamos eso en esa situación! No me quiero imaginar si encima el otro es famoso y lo tenés que ver con los hijos por tv y en las tapas de las revistas!

sábado, 25 de julio de 2009

Doble vida.

Quizás el título sea excesivo, pero el tema de Soda Stereo estaba bueno...
Voy a plantear dos temas hoy, que tienen estricta relación con eso que hablábamos hace un par de post sobre las máscaras que siempre llevamos y que siempre llevan los otros. y también tiene que ver con esa conocida y certera frase que dice "nunca terminamos de conocer a las personas, aún a las más cercanas".
Seguramente a todos les habrá pasado separarse de una pareja y enterarse al tiempo que él o ella desde que se separaron elige hacer cosas que antes odiaba, o que cuando éra una la que se lo proponía, no le gustaba la idea y sin embargo, un tiempo después se encuentran haciendo esas cosas. A modo de ejemplo: el tipo al que no le gustaba bailar y cuando era tu novio se dedicaba a apoyarse en las columnas del boliche, o era el único que se quedaba sentado en una fiesta, resulta que ahora que ya no está con vos lo ves casualmente bailando desaforado en algun lugar...o a la chica que odiaba ir a caminar cuando estaba con vos, y ahora sale todas las mañanas a caminar 5 km. con una amiga. O la chica que no le gustaba maquillarse y ahora la ves maquillada como si fuera a una fiesta todos los días. O el tipo con el que tuviste miles de discusiones porque no quería tener un perro en la casa compartida, y a ahora lo cruzás en la calle paseando a un perrito. O al que no le gustaba ir a la playa y le tenías que rogar para ir y después va todos los domingos con su nueva novia y la sombrilla. Ejemplos sobran, seguro que tenés uno para contar...Yo creo que esto no es estrictamente una doble vida pero sí una demostración de que nunca terminamos de conocer a nadie, aunque creamos que sí, y también es la confirmación de que somos distintos con cada persona, por eso es que me hace agua por todos lados la frase "ser uno mismo". Somos un pedacito de uno mismo con cada uno. Apenas eso.
El otro tema es el que tiene que ver con un doble discurso, a ver como lo puedo explicar...hay gente que esconde cosas compulsivamente . Y hay gente que te jura que odia algo y en realidad lo hace a escondidas...a modo de ejemplo: a la mina que jura que jamás se masturbó, un día le encontrás casualmente un vibrador, el tipo que dice que es un asco la lluvia dorada, le pide a una puta que se mee para verla, el tipo que jura que jamás entró a una página porno, tiene 15 páginas pornos en el historial de su pc. Eso solo hablando de cosas sexuales, tambíén está la mujer intelectual que dice que jamás leería una Cosmopolitan y tiene una caja para guardar la colección..., o el tipo que dice que los hombres que se ponen crema en la cara son putos y tiene un frasquito de crema escondido entre las toallas del baño... y esto sí que tiene que ver con las máscaras, con lo que uno elige mostrar y lo que no. No está mal guardarse cosas sólo para uno, pero a veces está bueno acortar distancias entre una máscara y otra...para que el otro no se sienta tan mal cuando descubre algo oculto y termine diciendo eso de "pensé que lo/a conocía"
¿o será que nunca tendríamos que aspirar a conocer todo del otro?

domingo, 31 de mayo de 2009

De eso no se habla

Para bien o para mal, o para las dos cosas juntas, el pasado nos forma. Sin embargo, muchas personas toman como un código el no hablar con nuevas parejas de relaciones anteriores. "el pasado pisado", "no me importa lo que hiciste antes de mí", "prefiero pensar que sólo fuiste mío/a, "no quiero saber como cogía tu ex", parecen ser frases frecuentes, como si el desconocer alejara el pasado...
Yo creo que hay que hacer una diferencia entre hablar del pasado y comparar. La comparación es odiosa. Pero para mi es imprescindible saber de su pasado. Me banco y agradezco todo tipo de detalles que me cuenten y pregunto también. Auqnue tengo claro, que posiblemente muchos hombres no nos cuenten exactamente la verdad, como tampoco lo hacemos a veces nosotras. Hay cosas que uno no tiene ganas de contar y está muy bien, pero a mi me gusta saber. Y generalmente introduzco el tema de sus ex yo, por ejemplo (en el caso de que el sexo haya sido bueno), luego de tener relaciones un :"donde aprendiste tantas cosas vos?" o "¿quien te enseñó a coger así?. Obvio que siempre se rien (con una hermosa e inevitable sonrisa de quien recuerda años pasados) y no contestan nada o te retrucan con un: ¿y avos quien te enseñó a coger así?. Y bueno, ahi el tema está planteado y generalmente surge una charla que para mí está buena. Y a mi, reitero, me encanta saber todo, y pregunto.
El problema es que a veces queremos que nos digan lo que queremos escuchar. Hay que saber bancarse, por ejemplo, que con su ex la pasara espectacular en la cama. Y que lo diga en esos términos. Si eso es real, a mi me gustan que me lo digan así tal cual, no me gusta que me digan lo quiero escuchar, al menos en este tema.
Incluso hay personas que se enojan cuando durante las primeras citas el otro hace mención a su ex pareja. Yo creo que mientras no se note que el tipo (o la mina) siguen perdidamente enamorados de su ex pareja, no tiene nada de malo.
Lo mismo que las fotos de las ex...obviamente pido y exijo que la saque del portaretratos pero no se le puede pedir que tire las fotos. Hay que respetar al pasado, el propio y el ajeno. Y si uno quiere, guardarse algunas cosas sólo para uno, pero no porque le pueden caer mal al otro sino para conservarlas intactas, o porque nos dan verguenza a nosotros o por lo que sea. Está claro, que cada uno cuenta lo que quiere, pero me parece horrible el no hablar de relaciones anteriores, no me parece ni ahí un código de respeto. Me parece que está bueno, y es enriquecedor sexualmente hablar de parejas anteriores con nuestra pareja. Porque también es una forma de conocerse, de ver que cosas le interesan y que cosas no al otro.
Y a vos te gusta saber de su pasado? preguntás porque te gusta o preguntas y después te sentis mal? O preferís mirar el presente y no para atrás?

miércoles, 28 de enero de 2009

Los platos rotos que dejaron los ex...

La edad, las parejas, las experiencias, sin dudas que nos hacen crecer pero también nos hacen cambiar las formas de encarar nuevas relaciones. Por miedo, por prejuicios, lo pasado no pasa en vano, y de alguna manera se inscribe en nuestra mente y en nuestra memoria. Así es que después de los 30 años (la edad es arbitraria como para marcar una etapa nomás) cambian las formas de encarar las cosas. A menudo, cuando nos relacionamos con alguien de más de 30, esa persona ya atravesó alguna separación, alguna herida y demás, y es fácil que la nueva posible pareja tenga que pagar los fracasos anteriores. Así nos encontramos con los tipos que tienen miedo a volver a enamorarse, los que evitan compromisos pero te histeriquean porque en el fondo quieren estar con alguien pero tienen miedo, también está el que la mujer se le quedó con todo lo material entonces jura y perjura que no volverá a convivir ni a casarse, está al que le fueron infiel y por eso no confía en ninguna mujer, está al que le hacés acordar a su ex de la que todavía sigue enamorado y por eso está con vos, está el que quedó herido de amor entonces quiere que sea la mujer la que lo busque, lo conquiste y demás para levantar su autoestima. Y está por supuesto, el que quiere una mejor segunda oportunidad ( o tercera o cuarta)
En las mujeres separadas, (acá van a tener que ayudarme los hombres a completar la lista) suelen prevalecer dos extremos, las que se victimizan y gritan a los cuatro vientos que no quieren volver a estar jamás con un especimen del sexo masculino o las que se liberan, se cambian la forma de vestir, el peinado, cambian la actitud y asumen una postura de encarar todas relaciones sin compromisos y tratan a los hombres como un objeto de satisfacción sexual y nada más. Y también estan por supuesto, las que apuestan a una nueva pareja y una nueva oportunidad.
Para todos los casos, siempre vale recordarles: "corazón, yo no soy tu ex. No me compares."
¿Se te ocurre algun estereotipo más de los separados?

lunes, 25 de agosto de 2008

Los ex...los ex!

Adviértase que el post bien puede aplicarse también a las ex.
Por alguna razón que trataremos de dilucidar con este post, los ex suelen ser una opción siempre a mano, a la hora de tener sexo o bien, es como inevitable el cruzarse casualmente en la calle y que no te pase absolutamente nada.
Algunos dirán: "pero si te separaste por algo es"... si hay cosas que jodían, por qué querer volver aestar con esa persona?.
Es una gran verdad esa que dice que "el tiempo cura", y quizás por eso, es que el tiempo cierra heridas y a la distancia parecen casi invisibles esas cosas malas que pasaron entre ambos. Luego de un tiempo, parece prevalecer un "la pasábamos bien, era una buena persona". Claro que este pensamiento, a menudo dura lo que dura un nuevo encuentro. Ahí uno recuerda un montón de otras cosas que el tiempo había hecho olvidar. No se puede borrar el pasado.
"Un jarrón roto puede pegarse, pero nunca volverá a estar entero", dijo una amiga alguna vez.
Todo esto sumado a que los ex siempre están aunque no los veamos. Es como que cada tanto se acuerdan y van apareciendo, o cuando se pelean con sus nuevas novias o cuando se ponen nostálgicos, o cuando llega un cumpleaños, o cuando sea, siempre aparecen desde algun lado.
Pasa también que generalmente una de las dos personas queda más enganchada que la otra, entonces, un nuevo encuentro aunque sea sólo sexo puede perjudicar las cosas. O sea, hay que aclarar muy bien lo que se busca antes de sucumbir ante los encantos del ex. Y no siempre es fácil.
La recomendación es siempre ir para adelante, pero está claro que no siempre se puede.
Personalemte, siempre me invade la misma sensación: aunque esté segura de no querer saber nada más con el hombre en cuestión, es como que no soporto esa idea de que pasemos a ser extraños en la vida del otro. Nunca asimilé del todo bien lo del olvido. Prefiero tener lindos recuerdos en vez de tener que olvidar.
Ojo, que aún pensando esto, sé que no es lo más sano. Lo mejor es cortar de una, sacrlo del msn, borrarlo del teléfono, evitar pasar por la calle de su casa, de su trabajo. Pero eso implica no saber absoloutamente nada de esa persona. Reitero, aunque no se quiera nada más, a veces dan ganas de saber como está, nada mas.