La tradición del arte del bordado es muy antigua en la ciudad de Sevilla. Sus orígenes gremiales se remontan al siglo XV, pero fue durante el XVI y el XVII cuando se consolidaron los diseños y formas más característicos de esta labor. Estos podían ser obras llanas -un realce sencillo bordeando el tejido-, en forma de cenefas con motivos vegetales o de imaginería o con figuras de hilos de colores. Las técnicas más características son la del bordado de realce, muy costoso, que se ejecuta sobre piezas rellenas de mayor o menor grosor, dependiendo de lo que se desee que sobresalgan los adornos ejecutados con la aguja, y la del bordado de recorte, efectuado con piezas trabajadas por separado que luego se superponen en el tejido.
En s.XIX se produce una eclosión y redefinición del bordado.Cabe destacar los nombres de Patrocinio López, Eloísa Rivera, las hermanas Antúnez y Herminia Alvarez Udell. La tradición de formas barrocas se redifinió según el gusto decimonónico, con el uso de motivos únicos o figuras heráldicas dispuestos asimétricamente, amplios espacios sin cubrir y flecos dorados. Progresivamente los dibujos se agrandaron y ocuparon partes cada vez más amplias del tejido, prodominando el uso de motivos vegetales de traza naturalista.
Una de las mayores exponentes de esta etapa junto a las ya mencionadas,fue sin lugar a dudas Teresa del Castillo,de quien desconocemos más datos personales,y quien trabajó copiosamente para las corporaciones sevillanas,en muchos de los casos bajo diseño de su marido,Antonio del Canto Torralba,quien fue además pintor y profesor de la Escuela de bellas Artes de Sevilla a finales del siglo XIX.
Dada la imposibilidad de catalogar la obra de esta genial bordadora,ya que muchas de las piezas decimonónicas se encuentran bajo el anonimato,atribuidas o destruidas,diseccionaremos los ejemplos más representativos de esta enigmática artesana y su inseparable binomio,como es Antonio del Canto Torralbo.
En la hermandad del santo Entierro, hay que destacar la importancia decisiva en la Hermandad y en la forja de una estética muy específica de su cofradía en la calle, partiendo de toda una remodelación de pasos, enseres,bordados, etc, del académico Antonio del Canto Torralbo. Éste diseñó los bordados de las imágenes del paso del Duelo, gran parte de los enseres de orfebrería y bordados del cortejo, e incluso realizó los dibujos acuarelados que, a modo de figurines, sirvieron de modelos para la confección de los ropajes de las sibilias y, probablemente del resto del cortejo simbólico. Su esposa, Teresa del Castillo, ejecutó los diseños de los bordados. Todo ello, sitúa a Antonio del Canto Torralbo como gran organizador,diseñador y ejecutor material de la puesta en la calle de una cofradía, sus enseres, suspasos, su estilo y su impronta, desde los años finales del Sexenio y comienzos de la Restauración.
Esto quiere decir que se adelantaría en casi dos décadas a Juan Manuel Rodríguez Ojeda en funciones similares respecto a otras hermandades. Antonio del Canto imprimió un estilo arabista a una parte de sus creaciones para el Santo Entierro,aunque por su contexto se han clasificado hasta ahora como simplemente neogóticas.
Las bocinas del paso del Triunfo de la Santa Cruz, los mantolines y túnicas del paso del Duelo así como el manto de María Santísima de Villaviciosa son obra de Teresa del Castillo en 1880. El diseño del manto de la Dolorosa, presenta unas "ces" cruzadas que configuran una serie de rosetones en cuyo interior se sitúan sendas coronas de estrellas, en cuyo centro se representan una serie de soles, todo ello de estilo neogótico, al igual que la greca que siluetea el total resultante.Una de las grandes aportaciones de Antonio del Canto Torralvo a las cofradías fue la introducción del estilo neogótico en sus diseños.
Esto quiere decir que se adelantaría en casi dos décadas a Juan Manuel Rodríguez Ojeda en funciones similares respecto a otras hermandades. Antonio del Canto imprimió un estilo arabista a una parte de sus creaciones para el Santo Entierro,aunque por su contexto se han clasificado hasta ahora como simplemente neogóticas.
Las bocinas del paso del Triunfo de la Santa Cruz, los mantolines y túnicas del paso del Duelo así como el manto de María Santísima de Villaviciosa son obra de Teresa del Castillo en 1880. El diseño del manto de la Dolorosa, presenta unas "ces" cruzadas que configuran una serie de rosetones en cuyo interior se sitúan sendas coronas de estrellas, en cuyo centro se representan una serie de soles, todo ello de estilo neogótico, al igual que la greca que siluetea el total resultante.Una de las grandes aportaciones de Antonio del Canto Torralvo a las cofradías fue la introducción del estilo neogótico en sus diseños.
Teresa del Castillo bordó en su taller de la Alamedilla de la Puerta de Triana, además del conjunto de bordados del paso del Duelo,entre otros los del paso de la Quinta Angustia, la túnica de las coronas de espinas, del Señor del Gran Poder,la túnica del Nazareno del Valle,y piezas diferentes a Pasión y La Carretería.
Para el gran Poder borda en 1857 la túnica de la Corona de Espinas, atribuida por similitudes estilísticas.Se ha podido saber que la suma del presupuesto entregado por don Antonio del Canto referente al diseño y bordado de la túnica, ascendió a 32.000 reales.El diseño de la túnica de la Corona de Espinas está compuesto por hojas de acanto y flores de cardo alrededor de toda la parte inferior de la túnica, y por hojas pequeñas que se entrelazan y centran la composición en la parte frontal formando una corona de espina -que le da nombre-, dentro de lacual figura el paño de la Verónica. También presenta bordadas las bocamangas y la cenefa del pechoy cuello, con una labor más plana en la que resaltan unas flores de cardo iguales a la de la zona inferior- Teresa del Castillo también borda un manto menor o de camarín para la Santísima Virgen con los populares temas de cardos y sobre terciopelo granate. Se completa con una saya del mismo motivo y autor en 1860.
La Túnica del Señor con la Cruz al Hombro,de la hermandad del Valle,está realizada en terciopelo de Lyón morado bordado en hilo metálico dorado, simboliza la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
La túnica fue trazada por Antonio del Canto Torralba y bordada por Teresa del Castillo en el año 1881.
En el borde inferior, en la bocamanga y en el cuello se desarrolla un festón donde se engarzan hojas de acanto. De la parte inferior surgen tallos de grandes proporciones en forma de roleos, de los cuales brotan hojas de acanto, y de la parte central surge una gran hoja de acanto de cinco lóbulos. Las mangas repiten el modelo ornamental de hojas de acanto en forma de roleos.
La túnica fue trazada por Antonio del Canto Torralba y bordada por Teresa del Castillo en el año 1881.
En el borde inferior, en la bocamanga y en el cuello se desarrolla un festón donde se engarzan hojas de acanto. De la parte inferior surgen tallos de grandes proporciones en forma de roleos, de los cuales brotan hojas de acanto, y de la parte central surge una gran hoja de acanto de cinco lóbulos. Las mangas repiten el modelo ornamental de hojas de acanto en forma de roleos.
La Saya de los Soles es una túnica de terciopelo azul prusia bordada en oro, representa simbólicamente las Virtudes Marianas.
Diseñada por Antonio del Canto Torralba y bordada por Teresa del Castillo en 1879, en la parte central de la túnica surgen tres tallos de acanto de los que brotan sus características hojas lobuladas de gran tamaño, mezcladas con otras más menudas lanceoladas, lineales y aovadas alargadas. Los característicos soles que salpican la parte superior de la prenda dan nombre a la misma.
El techo del Palio de Ntra. Sra. del Valle en terciopelo granate bordado en hilos metálicos plateados y sedas de colores. La aureola circular que centra la composición fue elaborada en la primera mitad del siglo XVIII y representa simbólicamente la proclamación de María como Madre de Dios.Diseñada por Antonio del Canto Torralba y bordada por Teresa del Castillo en 1879, en la parte central de la túnica surgen tres tallos de acanto de los que brotan sus características hojas lobuladas de gran tamaño, mezcladas con otras más menudas lanceoladas, lineales y aovadas alargadas. Los característicos soles que salpican la parte superior de la prenda dan nombre a la misma.
El salpicado de estrellas es bordado por Antonia Bazo en 1806 y el resto de la ornamentación se elabora en 1880 por Teresa del Castillo.
También borda los paños de bocina de ambos misterios,a fines del XIX.
Para la hermandad de Pasión también ejecuta los paños de bocina,en esas fechas.
Para la Quinta Angustia dejó notables piezas,como el spqr,de mediados del XIX,el guión de 1856, el Sinelabe Concepta que es también una original insignia mariana de la cual y con estas características quedan pocas en la cofradías. Alargada y sobre terciopelo azul, las palabras Sinelabe Concepta, están rodeadas de estrellas que la dominan por completo. El Estandarte representativo y a la vez símbolo de la Archicofradía lleva bordado en oro el antiguo escudo de la misma, orlado por el Toisón de Oro y el Collar de la Orden de Carlos III. Le acompañan castillos y leones rampantes, todo ellos, sobre terciopelo azul marino.Finalmente unos elegantes paños que en terciopelos azul oscuro llevan bordados el escudo de la Hermandad, obra de Teresa del Castillo, no así los pequeños adornos bordados de floristerías que son obra mas moderna de Guillermo Carrasquilla alrededor de 1950.
Para la hermandad de Pasión también ejecuta los paños de bocina,en esas fechas.
Para la Quinta Angustia dejó notables piezas,como el spqr,de mediados del XIX,el guión de 1856, el Sinelabe Concepta que es también una original insignia mariana de la cual y con estas características quedan pocas en la cofradías. Alargada y sobre terciopelo azul, las palabras Sinelabe Concepta, están rodeadas de estrellas que la dominan por completo. El Estandarte representativo y a la vez símbolo de la Archicofradía lleva bordado en oro el antiguo escudo de la misma, orlado por el Toisón de Oro y el Collar de la Orden de Carlos III. Le acompañan castillos y leones rampantes, todo ellos, sobre terciopelo azul marino.Finalmente unos elegantes paños que en terciopelos azul oscuro llevan bordados el escudo de la Hermandad, obra de Teresa del Castillo, no así los pequeños adornos bordados de floristerías que son obra mas moderna de Guillermo Carrasquilla alrededor de 1950.
Para acabar la Carretería.Ejecuta el spqr y el sinelabe,asi como los paños de bocina.De excepcionales se pueden catalogar cada una de las piezas de las imágenesdel misterio,ejecutadas por Teresa del Castillo entorno a 1861,salvo el mantolín de San Juan,obra de Carrillo del s.XVIII.
En las hermandades de gloria,podemos reseñar el manto de color azul pavo, obra que realizó Teresa del Castillo a mediados del siglo XIX, que a su vez es el que suele utilizarse para la procesión, pues la Titular gloriosa cuenta con otros dos. El hecho que la vecina Hermandad de las Tres Caídas lo utilizara, es porque el de la Virgen de Loreto está en proceso de restauración.