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domingo, 13 de febrero de 2011

No me puedo callar

Ayer otra vez me vi en una e esas situaciones en las que no me puedo callar. En general logro cerrar la boca, pero hay una clase de situación en el que siempre me salió la "loca" de adentro.
No hay nada que deteste mas en este mundo que los trastornados sexuales de mierda (hay que decirlo con todas las letras). Y ayer iba caminando por la calle con mi hermana, la nena y una amiga y un tipo se nos acercó se hizo el tonto y apretujado y le tocó el culo a mi hermana, a lo que ella se dio vuelta y le dijo "tarado" o "estúpido" y yo totalmente sacada de mi misma le grité "enfermo". Ahí el tipo reaccionó y nos dijo gritando "a quien le decís tarado??" y yo me acordé que estaba con mi hija y me dio miedo y por eso no seguí. Caminamos rápido, miré posibles lugares para entrar y que alguien nos ayude a defendernos, miré el piso, pero todas las baldosas estaban sanas.
Si, soy un poco loca, si el tipo venía para mi lado LE IBA A TIRAR CON LO QUE ENCONTRARA, y si era un pedazo de baldosa mejor.
No es la primera vez que me pasa, en Buenos Aires está lleno de trastornados sexuales y encima avalados por machistas insoportables que comienzan a reírse y hacer comentarios por demás estúpidos. Ustedes quizá están pensando que yo no le hubiese tirado una piedra... pero si.

Cuando tenía catorce años iba a la escuela a la mañana temprano y un día me crucé con uno de estos. Me agarró a mi y me toco el culo y después la agarró a mi hermana, y ahí yo le pegué una trompada.
El tipo confundido caminó unos pasos, creo que no se lo esperaba. Yo tenía catorce pero parecía de doce, jamás pensó que me iba a defender. Entonces se dio vuelta y me dijo "volá de acá". Nunca me voy a olvidar de ese momento. Agarré a mi hermana y salimos corriendo y gritando "Auxilio, auxiliooooo!!!" y ahí nos encontramos con unos chicos que también estaban yendo a una escuela privada cerca de casa.
Cuando pasan estas cosas, sucede además algo extraño. Por vergüenza o culpa (no sé bien cual es la cuestión) uno no dice realmente que pasó. Honestamente te da vergüenza decir "me manosearon, me tocaron, me... etc." a veces eso sucede porque están esos pelotudos des ubicados machistas que saltan riéndose de la situación a apoyar al trastornadito. Cuestión es que lloramos, tartamudeamos y dijimos "un tipo, un tipo...". Los chicos se miraron y nos dijeron que fuéramos con ellos.
Caminamos unas cuadras hacia el colegio privado desviándonos del recorrido hacia nuestra escuela, cruzamos un puente y cuando llegamos al otro lado, ahí estaba otra vez el tipo, con una sonrisa gigante nos miraba, justo por el único lugar donde podíamos escapar.
Y ahí no mas empecé a gritar, y corrí para la puerta del colegio Entonces unos padres que estaban dejando a sus hijos nos preguntaron que nos pasaba y le dijimos "ese tipo, ese tipo... nos está siguiendo" (otra vez no dijimos nada de lo que verdaderamente había pasado). Cuando se dio cuenta que estábamos hablando con los padres, emprendió la retirada, pero lo fueron a buscar y nosotras vimos como comenzaban a pegarle entre todos. Eso fue lo único que vimos, porque nos fuimos corriendo para el subte.
No sé si será común. Pero en Buenos Aires no debe haber mujer que no tenga un caso así para contar. Mis compañeras y amigas al menos tienen un par de historias ¡Buenos Aires está lleno de exibicionistas!
Hace un tiempo en el subte a una chica un tipo "le acabó" en el pantalón. En vez de romperle bien la cara, los "pseudo hombres" que viajaban en el subte comenzaron a hacer chistes, sobre "que había sido precoz porque en solo una estación había acabado". Esos me parecen mas patéticos que el que hace eso. Porque el tipo es un enfermo, pero ellos que se supone que no, en vez de pensar un poco y actuar hablan boludeces.
Me acuerdo que ese día, cuando finalmente pude contar lo que había pasado a mi familia, su recomendación fue unánime. Me tendría que haber callado la boca. Eso me dijeron, porque si el tipo tenía un cuchillo o me devolvía la trompada iba a ser peor. Sin embargo cada vez que algo así me pasa se apodera de mí una bronca tan grande que no puedo evitar sacarme completamente de mis cavales, no puedo siquiera intentar hacerlo. No siento ya vergüenza, ni siento que sea un papelón, creo que el que LE TIENE que dar vergüenza es al otro, no a mi. Y creo que parcialmente esto los tipos lo presienten, porque en el bondi (colectivo) cuando alguno amaga a quedarse parado atrás mío lo miro con una cara de c... que enseguida se cambia de lugar, no tengo problema de plantarme y hacerle un quilombo garrafal y bajarlo a trompadas si es necesario.

Disculpen la ausencia o el exceso de puntuación, pero como ya dije estas cosas me enervan y a pesar de las recomendaciones de mi familia, no me puedo callar.
¿Y ustedes?
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