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lunes, 14 de febrero de 2011

El Rey de Hungría

Por más de 900 años (1000 - 1918) Hungría fue regida por soberanos con el título de Rey de Hungría y el territorio magiar pasó a ser denominado la Corona de San Esteban. El primer rey húngaro fue San Esteban I coronado en el año 1000 y el último fue Carlos IV, quien renunció a sus derechos en 1918 firmando el acuerdo de Eckartsau.

Las dinastías más importantes fueron la Casa de Árpad, la Casa de Anjou-Hungría y la Casa de Habsburgo. Luego de la extinción de la dinastía de los Árpad y más tarde la dinastía Angevina, el título de Rey de Hungría fue llevado por un monarca de fuera de Hungría con unas pocas excepciones.

Esta lista de gobernantes incluye los Grandes Príncipes (895-1000) y los Reyes (1000-1918).
  • Dinastía de los Árpád (904 - 1301)
  • Interregno
  • Dinastía de Anjou-Hungría (1308 - 1386)
  • Dinastía de Luxemburgo (1386 - 1437)
  • Dinastía Habsburgo (1437 - 1440)
  • Dinastía Jagellón (1440 - 1444)
  • Dinastía Habsburgo (1444 - 1457)
  • Dinastía Hunyadi (1457 - 1490)
  • Dinastía Jagellón (1490 - 1526)
  • Dinastía Szapolyai (1526 - 1570)
  • Dinastía Habsburgo (1526 - 1780)
  • Dinastía Habsburgo-Lorena (1780-1918)
    * Reyes titulares

La coronación de Andrés I de Hungría (1047)


A partir del siglo XIII fue establecido un procedimiento para confirmar la legitimidad del Rey:

· coronación por el Arzobispo de Esztegom
· coronación con la Santa Corona de Hungría
· coronación en la ciudad de Székesfehérvár

Este proceso significó un verdadero nivel de protección a la integridad del reino, pues por ejemplo robar la Santa Corona no era suficiente para convertirse en legítimo rey. El primer requerimiento fue confirmado por Béla III, quien había sido coronado por el Arzobispo de Kalocsa basado en la especial autorización del papa Alejandro III, pero luego él declaró que su coronación no perjudicaría el reclamo tradicional de los Arzobispos de Esztegom de coronar al rey.

Árpád (904 - 1301)

? -854 Ügyek, Príncipe de los húngaros
858-895 Álmos, Príncipe de Hungría
904-907 Árpád el Conquistador, Príncipe de Hungría
907-947 Zolta, Príncipe de Hungría
947-955 Falicsi, Príncipe de Hungría
955-971 Taksony, Príncipe de Hungría
971-997 Geza, Príncipe de Hungría
997-1038 Esteban I (San Esteban), Príncipe de Hungría, luego Rey
1038-1041 Pedro Orseolo, Rey de Hungría
1041-1044 Samuel Aba, Rey de Hungría
1044-1046 Pedro Orseolo, Rey de Hungría
1046-1060 Andrés I el Católico, Rey de Hungría
1060-1063 Bela I el Campeón, Rey de Hungría
1063-1074 Salomón, Rey de Hungría
1074-1077 Geza I el Magno, Rey de Hungría
1077-1095 Ladislao I (San Ladislao), Rey de Hungría
1095-1116 Colomán el Bibliófilo, Rey de Hungría
1116-1131 Esteban II, Rey de Hungría
1131-1141 Bela II el Ciego, Rey de Hungría
1141-1162 Geza II, Rey de Hungría
1161 Esteban III, Rey de Hungría
1162-1163 Ladislao II, Rey de Hungría
1163-1165 Esteban IV, Rey de Hungría
1163-1172 Esteban III, Rey de Hungría
1172-1196 Bela III Alexios, Rey de Hungría
1196-1204 Emérico, Rey de Hungría
1204-1205 Ladislao III, Rey de Hungría
1205-1235 Andrés II el Hierosolimitano, Rey de Hungría
1235-1270 Bela IV, Rey de Hungría
1270-1272 Esteban V, Rey de Hungría
1272-1290 Ladislao IV el Cumano, Rey de Hungría
1290-1301 Andrés III, Rey de Hungría

El Rey Bela III de Hungría

Interregno

1301 Carlos I Roberto, Rey de Hungría
1301-1305 Wenceslao, Rey de Hungría y de Bohemia
1305-1307 Otón (Bela V), Rey de Hungría

Anjou-Hungría (1308 - 1386)

1308-1342 Carlos I Roberto, Rey de Hungría
1342-1382 Luis I el Grande, Rey de Hungría y de Polonia
1382-1385 María I, Reina de Hungría
1385-1387 Carlos II el Pequeño, Rey de Hungría y de Nápoles

Luxemburgo (1386 - 1437)

1386-1395 María I, Reina de Hungría
1387-1437 Segismundo, Rey de Hungría y de Bohemia, Emperador del Sacro Imperio Romano

Habsburgo (1437 - 1440)

1437-1439 Alberto el Magnánimo, Rey de Hungría y de Bohemia
1440 Ladislao V el Póstumo, Rey de Hungría y de Bohemia

Ladislao el Póstumo y su prometida, Magdalena de Valois, hija de Carlos VII de Francia (1457)


Jagellón (1440 - 1444)

1440-1444 Vladislao I, Rey de Hungría y de Polonia

Habsburgo (1444 - 1457)

1444-1457 Ladislao V el Póstumo, Rey de Hungría y de Bohemia

Hunyadi (1457 - 1490)

1458-1490 Matías Corvino, Rey de Hungría y de Bohemia

Jagellón (1490 - 1526)

1490-1516 Vladislao II, Rey de Hungría y de Bohemia
1490-1526 Luis II, Rey de Hungría y de Bohemia

Szapolyai (1526 - 1570)

1526-1540 Juan I, Rey de Hungría
1540-1570 Juan II, Rey de Hungría y Príncipe de Transilvania

Armas de János Szapolyai, Juan I de Hungría


Habsburgo (1526 - 1780)

Hungría fue efectivamente dividida en tres partes: Hungría Real, en el norte y oeste, Hungría Otomana en el sur y el Principado de Transilvania en el este. La lista siguiente, hasta 1699, enumera los gobernantes de Hungría Real:

1526-1564 Fernando I, Rey de Hungría y Emperador germánico como Fernando I
1564-1572 Maximiliano I, Rey de Hungría y Emperador germánico como Maximiliano II
1572-1608 Rodolfo I, Rey de Hungría y Emperador germánico como Rodolfo II
1608-1619 Matías II, Rey de Hungría y Emperador germánico como Matías I
1618-1637Fernando II, Rey de Hungría y Emperador germánico como Fernando II
1625-1657 Fernando III, Rey de Hungría y Emperador germánico como Fernando III
1647-1654 Fernando IV, Rey de Hungría
1655-1705 Leopoldo I, Rey de Hungría y Emperador germánico como Leopoldo I
1687-1711 José I, Rey de Hungría y Emperador germánico como José I
1711-1740 Carlos III, Rey de Hungría y Emperador germánico como Carlos VI
1740-1780 María Teresa, Reina de Hungría

Habsburgo-Lorena (1780-1918)

1780-1790 José II, Rey de Hungría y Emperador germánico como José II
1790-1792 Leopoldo II, Rey de Hungría y Emperador germánico como Leopoldo II
1792-1835 Francisco I, Rey de Hungría y Emperador de Austria como Francisco I
1830-1848 Fernando V, Rey de Hungría y Emperador de Austria como Fernando I
1848-1916 Francisco José I, Rey de Hungría y Emperador de Austria como Francisco José I
1916-1918 Carlos IV, Rey de Hungría y Emperador de Austria como Carlos I


El tálero de María Teresa, moneda de plata con la inscripción M[ARIA] THERESIA D[EI] G[RATIA] R[OMANORVM] IMP[ERATRIX] HV[NGARIAE] BO[HEMIAE] REG[INA], “María Teresa, por la Gracia de Dios, Emperatriz de los Romanos, Reina de Hungría y de Bohemia”.


Reyes titulares

1922 Otón de Habsburgo-Lorena, Rey titular de Hungría y Emperador titular de Austria

Era hijo de Carlos IV de Hungría. Aunque su dinastía fue obligada a renunciar al trono de aquel país, Otón es rey titular de los húngaros. Luego de la muerte de éste, su hijo mayor varón, Carlos de Habsburgo-Lorena, pasará a ser el rey titular de Hungría.

Otros títulos

A través de los siglos, los reyes de Hungría adquirieron o reclamaron las coronas de varios países vecinos y comenzaron a usar los títulos reales conectados a aquellos países. En la última época del reino, su título completo era: "Dei gratia Hungarie, Dalmatie, Croatie, Rame, Servie, Galicie, Lodomerie, Cumanie, Bulgarique Apostolicus Rex" o en castellano: "Por la Gracia de Dios Rey Apostólico de Hungría, Dalmacia, Croacia, Rama, Serbia, Galicia, Lodomeria, Cumania y Bulgaria".

Los términos Nobilissimus (el muy noble) y nobilissima familia (la muy noble familia) han sido usados desde el siglo XI por el Rey y su familia pero fueron confirmados pocas veces cuando fueron mencionados en ciertos documentos oficiales.


Escudos de armas húngaro y polaco con el casco angevino (1340) usados durante el reinado de Luis I, rey de Hungría y de Croacia y rey de Polonia


Rey Apostólico es un título hereditario que comenzó a portar el Rey de Hungría cuando el Papa Silvestre II se lo otorgó a San Esteban (997-1038). Los esfuerzos de aquel rey para cristianizar a su pueblo lo llevaron a ser comparado con uno de los apóstoles. Es un título comparable al de Rey Católico de España o al de Rey Muy Cristiano de Francia, pero es de un orden superior. Fue usado por primera vez por el emperador Leopoldo I (1657-1705), al ser coronado Rey de Hungría, pero fue confirmado por el Papa Clemente XIII en 1758. El último en utilizarlo fue Carlos IV (1916-1918).

El título Rey de Eslavonia refería a los territorios entre los ríos Drava y Sava y fue usado por primera vez por Ladislao I de Hungría. También fue Ladislao quien adoptó el título Rey de Croacia en 1091. Colomán de Hungría agregó la frase Rey de Dalmacia al tratamiento real en 1105.

El título Rey de Rama, refiriendo al reclamo sobre Bosnia, fue usado por primera vez por Béla II de Hungría en 1136. Emerico de Hungría fue quien adoptó el título Rey de Serbia. El de Rey de Galicia fue usado para indicar la supremacía sobre Halych, mientras que Rey de Lodomeria refería a Volinia; ambos títulos fueron adoptados por Andrés II en 1205. En 1233, Béla IV comenzó a utilizar Rey de Cumania, el cual expresaba el dominio sobre los territorios establecidos por los cumanos (Valaquia y Moldavia) en la época. La frase Rey de Bulgaria fue agregada al tratamiento real por Esteban V.


Béla IV de Hungría y de Croacia


Transilvania fue originalmente una provincia del Reino de Hungría gobernado por un voivoda, pero luego de 1526 se convirtió en un principado semi-independiente subordinado al Imperio Otomano primero y al Imperio Habsburgo después. En 1696, luego del destronamiento de Miguel II Apafi, el Sacro Emperador Romano Leopoldo I tomó el título Príncipe de Transilvania. En 1765, la emperatriz María Teresa elevó Transilvania a Gran Principado. El Conde de los Szeklers (húngaro: ispán) fue originalmente una dignidad del Reino de Hungría, pero el título fue usado últimamente por los Príncipes de Transilvania.

La Reina

A partir de 1526 el título de Reina de Hungría pertenecía por derecho a la consorte de los emperadores Habsburgo que también eran reyes de Hungría. La Reina de Hungría también era Sacra Emperatriz Romana (luego Emperatriz de Austria) y Reina consorte de Bohemia. Desde Leopoldo I, cuando todos los reyes de Hungría comenzaron a usar el título de Rey Apostólico, sus esposas eran tratadas como Reina Apostólica de Hungría.

El Reino de Hungría tuvo solo dos reinas reinantes que fueron coronadas como reyes: María I en 1386 y María II Teresa en 1740.

María de Austria, reina consorte de Hungría y de Bohemia (el rey Luis II), recibe la abdicación de su hermano Carlos (el emperador Carlos V). La pintura muestra a la reina de Hungría vestida de blanco, pese a que nunca vistió otro color más que el negro desde la muerte de su esposo (1555).


jueves, 10 de febrero de 2011

La etiqueta

La fría noche del 25 de noviembre de 1916, mientras repicaban las campanas de todas las iglesias de Austria-Hungría, doscientos militares a caballo recorrían las calles de Viena precediendo la procesión fúnebre del último representante del antiguo estilo Habsburgo: el emperador Francisco José I. Seis caballos negros con crespones del mismo color tiraban de la carroza, también negra, que portaba el féretro.





Llegados a la iglesia e los Capuchinos, introdujeron el ataúd hasta encontrar una gran puerta cerrada. Siguiendo la ceremonia, que venía repitiéndose desde decenios atrás, un miembro de la comitiva se adelantó y golpeó el portalón para que le abriesen.
- ¿Quién quiere entrar? –preguntó, desde el interior, el padre guardián.
- Su Majestad Imperial Francisco José I, emperador de Austria, rey apostólico de Hungría, rey de Bohemia…- y el portavoz continuó enumerando una cincuentena de títulos reales, ducales, condales y señoriales.
- No le conocemos –fue la lacónica respuesta del capuchino.
Volvió a llamar el acompañante.
- ¿Quién quiere entrar? –insistieron desde el otro lado.
- Francisco José I, emperador de Austria y rey de Hungría –abrevió, esta vez, el portavoz imperial.
- No le conocemos.
Al tercer bastonazo y tras la misma pregunta, el que encabezaba la comitiva contestó:
- Francisco José, un pobre pecador.
Y entonces se abrió el enorme portalón.





El ceremonial cargado de tradiciones regía la vida de la corte de los Hasburgo. Durante el siglo XVIII, la etiqueta fijaba el empleo de toda la vida cotidiana. En la época de Carlos VI, los embajadores (incluyendo el Nuncio del Papa) permanecían de pie alrededor de la mesa en que el monarca celebraba sus comidas y no se retiraban sino hasta que Su Majestad hubiera llevado un vaso a sus labios. Durante las representaciones teatrales, dos pajes arrodillados abanicaban los augustos rostros de los soberanos.





Bajo María-Teresa, que amaba el lujo, las fiestas eran desmesuradas y la etiqueta también estricta. Las caballerizas de la emperatriz albergaban dos mil quinientos caballos. Se daban en palacio bailes para seis mil invitados. José II el Reformador sustituyó el orden a las malversaciones y la economía a los gastos dispendiosos. Leopoldo II, su hermano y sucesor, se dio prisa en suprimir hasta los últimos vestigios de la reforma de José II y volvió a las antiguas costumbres. Su hijo, Francisco II, respetó las tradiciones y el protocolo.





La etiqueta española –introducida en Viena por Rodolfo II- reinaba en la Hofburg durante los primeros años del reinado de Francisco José, aunque bastante aligerada desde el siglo XVII. En tiempos de Felipe II el ceremonial lo prescribía todo minuciosamente, incluso cómo debía comportarse el rey cuando deseaba hacer acto de esposo: vestido con un traje ceñido y un mantelete, el sombrero de plumas en la cabeza, la espada al cinto, el vellón de oro al cuello, llevando una garrafa de agua, Su Majestad se dirigía a los departamentos de la reina. Lo precedían el gran maestro de ceremonias, alabarderos y lacayos portadores de velas. La esposa, ataviada con vestiduras negras, llevando una antorcha encendida en la mano, entraba al salón con su séquito por la entrada opuesta. Una vez solos y habiéndose despojado de la espada y de su sombrero de plumas, el rey podía retozar con su esposa sobre el lecho. Cuando todo estaba cumplido, llamaban a sus séquitos, que los acompañaban de regreso a sus habitaciones con el mismo ceremonial.





A mediados del siglo XIX, en los días de Francisco José y Sissi, la etiqueta era mucho más estricta en Viena que en Madrid durante la misma época. Primeramente, dividía a los mortales en dos categorías: los que, por su nacimiento, eran hoffahig (dignos de figurar en la corte) y los que no lo eran. Quienes tenían su “gran entrada” eran veintitrés familias nobles y doscientas veintinueve damas; pero era preciso distinguir aún entre las damas “admisibles”, que tenían derecho a entrar sin golpear en los departamentos de la emperatriz y las damas “aguardantes”, que debían llamar suavemente a la puerta antes de recibir la autorización para ingresar.





La etiqueta organizaba las ceremonias civiles y religiosas hasta en sus menores detalles. Los días de grandes fiestas católicas, la corte entera participaba en las suntuosas procesiones; Sus Majestades seguían al Santísimo Sacramento acompañados por los archiduques y archiduquesas y todos los grandes dignatarios. El Viernes Santo, el emperador arrodillado lavaba los pies de doce menesterosos, vertiendo sobre ellos un poco de agua. Los archiduques les enjugaban con lienzos (en realidad, los “doce pobres del Emperador” eran doce funcionarios cuidadosamente atendidos por un pedicuro. Sus pies estaban tan inmaculados que el embajador de Rusia dijo a su vecino: “¡Podría confundírseles con los pies del cuerpo de ballet!”).





La implacable etiqueta determinaba cada cosa: los uniformes, la vestimenta, la calidad de la vajilla para ciertas recepciones, las reverencias, los saludos, el ancho de los galones, el largo de los guantes. En la mesa imperial, todo el mundo estaba mudo: nadie tenía el derecho de interrogar a Su Majestad. Si el emperador hacía una pregunta, debía respondérsele en pocas palabras; toda conversación general estaba proscripta. El monarca tragaba sus alimentos en un instante; los jóvenes, hambrientos, servidos en último término al extremo de la mesa, devoraban sus enormes porciones cuando se les daba tiempo.



Después de la cena, los huéspedes pasaban al salón y aguardaban al Emperador, quien formulaba algunas preguntas. Se escuchaban breves respuestas: “¡Si, Sire!..” “¡No, Majestad!...” Esta sesión “alrededor del fuego” no tenía nada de caluroso ni de confortable. Con celoso cuidado, la archiduquesa Sofía, madre del emperador, velaba en la estricta observancia del protocolo sacrosanto.

El Archiduque Francisco Carlos y la Archiduquesa Sofía (nacida princesa de Baviera) con sus hijos: Francisco José, emperador de Austria, con su esposa Sissi (y los hijos de éstos Rodolfo y Gisela), Maximiliano, emperador de México, con su esposa Charlotte y los archiduques Luis Víctor y Carlos Luis (1860).






jueves, 5 de noviembre de 2009

Los Habsburgo


Los Habsburgo austríacos y los Habsburgo españoles


Cuando el Emperador Carlos V (Carlos I de España) asignó las tierras austríacas a su hermano Fernando I el 21 de abril de 1521, la dinastía se dividió en una rama austríaca y una española. Los Habsburgo austríacos llevaron (después de 1556) el título de Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, así como de las tierras hereditarias de los Habsburgo y los Reinos de Bohemia y Hungría, mientras que los Habsburgo españoles gobernaban sobre los reinos españoles, los Países Bajos, las posesiones de los Habsburgo en Italia, y durante un tiempo, Portugal. Hungría, nominalmente bajo el reinado de los Habsburgo desde 1526 pero en su mayor parte bajo ocupación turca otomana durante 150 años, fue reconquistada en 1683–1699.



Maximiliano II, Sacro Emperador Romano Germánico (1527-1576)


Los Habsburgo españoles desaparecieron en 1700 debido a la endogamia y excesiva consanguinidad de sus matrimonios, que acabaron por dar un rey completamente disminuido e incapaz de gobernar, Carlos II de España. Se provocó así la Guerra de Sucesión Española), cosa que se repetiría con los Habsburgo austríacos en 1740 (provocando la Guerra de Sucesión Austriaca).


Sin embargo, la heredera del último Habsburgo austríaco (María Teresa) se casó con Francisco Esteban, Duque de Lorena, (ambos eran bisnietos del Emperador Habsburgo Fernando III, pero desde diferentes emperatrices) y sus descendientes continuaron la tradición de los Habsburgo de Viena bajo el nombre dinástico Habsburgo-Lorena (Se especula a menudo que los comunes matrimonios intrafamiliares entre ambas líneas contribuyeron a su extinción, pero hubo pocos matrimonios de este tipo en la línea austríaca. La muerte de las jóvenes herederas por viruela fue una causa mayor.).


María Teresa, Emperatriz, con su familia (1765)


El Imperio Austríaco


El 6 de agosto de 1806 se disolvió el Sacro Imperio Romano Germánico bajo la reorganización de Alemania del Emperador francés Napoleón Bonaparte. Sin embargo, como anticipación de la pérdida de su título de Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Francisco II se declaró a sí mismo Emperador de Austria hereditario (como Francisco I) el 11 de agosto de 1804, tres meses después de que Napoleón se hubiera declarado a sí mismo Emperador de los franceses el 18 de mayo de 1804.


El Emperador Francisco I de Austria usó el gran título oficial: «Francisco I, por la gracia de Dios Emperador de Austria; Rey de Jerusalén, Hungría, Bohemia, Dalmacia, Croacia, Eslavonia, Galicia y Lodomeria; Archiduque de Austria; Duque de Lorena, Salzburgo, Wurzburgo, Franconia, Estiria, Carintia y Carniola; Gran Duque de Cracovia; Gran Príncipe de Transilvania; Margrave de Moravia; Duque de Sandomir, Masovia, Lublin, Alta y Baja Silesia, Auschwitz y Zator, Teschen y Friuli; Príncipe de Berchtesgaden y Mergentheim; Conde de Habsburgo, Gorizia y Gradisca y del Tirol; y Margrave de Alta y Baja Lusacia y Istria».


Armas del Imperio Austro-Húngaro


En 1867 se dio autonomía efectiva a Hungría bajo los términos del Ausgleich o 'compromiso' en que, asociándose con Austria, pasó a convertirse en los inseparables y hereditarios Austria (imperio) - Hungría (reino) hasta la deposición de los Habsburgos en 1918 después de la derrota en la Primera Guerra Mundial.


El título del Imperio de Austria era, en realidad, el del Imperio de la Casa de Austria, es decir, el de las tierras de los Habsburgo, no el de los austríacos.


El largo gobierno del emperador Francisco José I (1848-1916) creó una especial forma de vida mediante una intensa burocratización centralista y germanizada (excepto en Hungría desde 1867). Su vida personal, metódica, protocolaria, serena y muy ancien régime, recibió los golpes del oscuro suicidio de su hijo Rodolfo en 1889, el asesinato de su esposa Sissi en 1898, el atentado fatal contra el heredero del trono, Francisco Fernando, en 1914. Inducido por Guillermo II, emperador de Alemania, asumió la responsabilidad de ser el primero en declarar aquella guerra que sería el Primer gran conflicto mundial.



Archiduque Rodolfo de Habsburgo-Lorena, Príncipe Heredero de Austria, Hungría y Bohemia (1858-1889)


Precisamente la vieja dinastía de los Habsburgo miraba con cierto desdén a los Hohenzollern, que eran hasta hacía dos siglos unos feudatarios de Austria. Burgraves ambiciosos que empezaron su carrera como humildes marqueses de Brandeburgo, consiguieron al fin la modesta corona de Prusia y acabaron como emperadores de Alemania. Y luego de la muerte de Francisco José y el advenimiento y abdicación de su sobrino nieto Carlos (último emperador de Austria y rey de Hungría) en 1918, aquellos condes de Habsburgo que a partir del siglo XI se hicieron poderosísimos, nueve siglos más tarde ya sólo eran lo mismo que otros tantos miles de aristócratas europeos. Aunque ya habían dejado su huella en la Historia.



Zita María delle Grazie Adelgonda Micaela Raffaela Gabriela Giuseppina Antonia Luisa Agnese de Borbón-Parma y Braganza, emperatriz consorte de Austria (1900)


martes, 1 de septiembre de 2009

Títulos reales: la Reina Reinante

Una reina reinante refiere a una soberana poseyendo y ejerciendo todos los poderes monárquicos de un jefe, en contrapartida a una reina consorte, quien es esposa de un soberano reinante y no tiene ninguno de los poderes oficiales de estado.


En el Antiguo Egipto, las culturas del Pacífico e incluso en la historia antigua de Europa, las monarcas regentes han usado el título de Rey o su equivalente, como el Faraón, donde el género es irrelevante al oficio. También la Emperatriz Irene de Bizancio se llamaba a sí misma basileus (βασιλεύς), “emperador”, antes que basilissa (βασίλισσα), “emperatriz”. Y Jadwiga de Polonia fue coronada como Rex Poloniae (“Rey de Polonia”).


Entre las monarquías davídicas de Judea, se menciona una reina reinante soltera, Athaliah, aunque la Biblia la recuerda negativamente como una usurpadora. Contrariamente, mucho más tarde la reina de los Asmoneos, Salomé Alexandra (Shlomzion) fue altamente popular.

Técnicamente, un rey del género masculino también puede ser un rey reinante o un rey consorte, pero esta distinción es inusual y, por ejemplo, ha sido usado sólo dos veces en la historia de la monarquía británica y sus predecesoras. En todas las actuales monarquías que autorizan una reina en el trono, el esposo de cada reina no es titulado rey, sino que generalmente tiene el rango de príncipe.


Jadwiga (1373-1399)



El ascenso al trono ocurre de acuerdo al orden de sucesión de la nación. Los métodos de sucesión incluyen la nominación, cuando el monarca reinante o un consejo nombran a un heredero, ya fuere por primogenitura, cuando los hijos del monarca se convierten en regentes en orden de nacimiento del mayor al menor, o por ultimogenitura, cuando los hijos se convierten en regentes en orden reverso de nacimiento, del menor al mayor. El ámbito de aplicación de la sucesión puede ser matrilineal, patrilineal o ambos, incluso, raramente, abierta a elección general cuando es necesario. El derecho de sucesión por género puede ser abierto a hombres y mujeres, limitado solo a hombres o limitado solo a mujeres.



La más típica sucesión en las monarquías europeas desde la Alta Edad Media hasta bien entrado el siglo XX ha sido la primogenitura de preferencia masculina, aunque el orden de sucesión ha alternado a través de los hijos del monarca en orden de su nacimiento, seguido entonces por las hijas. Históricamente, muchos reinos prohibieron la sucesión por mujeres o a través de la línea femenina en obediencia a la Ley Sálica y algunos todavía lo hacen. Ninguna reina por propio derecho gobernó Francia, por ejemplo. Sólo una mujer, María Teresa de Austria, reinó sobre el Sacro Imperio Romano con el título “Sagrada Emperatriz Romana”; primero por matrimonio y luego de facto fue soberana por cuarenta años.



María Teresa (1717-1780)

En los últimos años del siglo XX, Suecia, Noruega, Bélgica y los Países Bajos enmendaron sus actos de sucesión a la primogenitura sin preferencia de género. En algunos casos, el cambio no tomará efectividad hasta la generación siguiente a las actuales generaciones –para evitar desposeer a personas que ya estaban en la sucesión, en una posición determinada.


En China, Wu Zetian se convirtió en Emperatriz Reinante y estableció la Dinastía Zhou luego de despedir a sus hijos. Fue la única emperatriz reinante documentada en la historia china. Pero han habido poderosas emperatrices consortes o emperatrices viudas, algunas de las cuales efectivamente gobernaron como soberanas de facto pero no de jure.




La Emperatriz Wu y sus damas (690)

Han habido reinas o emperatrices reinantes por propio derecho en Asia (Persia, Judea, China, Japón, Corea, Mongolia, Vietnam), en África (Egipto, Etiopía, Madagascar y Nubia) y en Oceanía (Hawaii).

Soberanas reinantes de Europa

Junto al nombre aparece el período de gobierno de cada monarca.

Bohemia

  • Maria Teresa de Austria (1740 - 1780)
Bosnia
  • Jelena Gruba (1395 - 1398)

Dinamarca

  • Margarita I, Reina de Dinamarca (1375–1412), de Noruega (1388–1412), de Suecia (1389–1412)
  • Margarita II (1972–presente)

Margrethe II (1940 - )

Hungría

  • María (1382-1385 y 1386-1395)
  • María Teresa de Austria (1740-1780)
Navarra
  • Jeanne III de Navarra (1555-1572)
Países Bajos
  • Guillermina (1890 – 1948)
  • Juliana (1948 – 1980)
  • Beatriz (1980 – presente)

Guillermina I (1880-1962)


Polonia
  • Jadwiga (1384-1386)
  • Anna Jagellon (1575-1595)
Portugal

  • Beatriz (de jure 1383-1385)
  • Maria I (1777-1816)
  • Maria II (1826-1828 y 1834-1853)

María II de Portugal (1819-1853)

Rusia

  • Catalina I (1725-1727)
  • Anna (1730-1740)
  • Elizabeth (1741-1762)
  • Catalina II (1762-1796)

Castilla, Aragón, España

  • Petronila de Aragón
  • Urraca de Castilla
  • Berenguela de Castilla
  • Isabel I de Castilla
  • Juana I de Castilla
  • Isabel II de España


Juana de Castilla, “La Loca”, primera reina de España unida junto con su hijo Carlos I (1479-1555)

Suecia
  • Margaret (1389–1412)
  • Cristina (1632 – 1654)
  • Ulrika Eleonora la Joven (1718 – 1720)


Cristina (1626-1689)


Inglaterra, Escocia, Gran Bretaña, Reino Unido

  • Boudicaa, reina del antiguo pueblo celta de los Icenos
  • Cordelia
  • Gwendolen
  • Matilda (o Maud) de Inglaterra (nombrada en 1141, nunca gobernó pues su título fue usurpado). Se llamaba a sí misma Señora de los Ingleses (Lady of the English), a pesar de que Reina de los Ingleses era desconocido.
  • Margarita de Escocia, the Maid of Norway (1286 – 1290) – era hija de Erik II de Noruega y Margarita de Escocia (hija de Alejandro III) y murió durante el viaje a Escocia antes de comenzar el reinado.
  • Mary I, Reina de los Escoceses (1542 – 1567) - se convirtió en reina a los seis días de nacida, fue coronada a los 5 años y prontamente comprometida al Delfín de Francia, el futuro Francisco II.

María, Reina de los Escoceses (1542-1587)

  • Lady Jane Grey (julio 1553) – sin considerar a reinas celtas como Boudicaa, Jane es referida como la primera soberana reinante de Inglaterra; es llamada “La reina de los 9 días” debido al breve período de su reinado.
  • Mary I de Inglaterra (1553 – 1558) - elevada al trono de acuerdo a la voluntad de Henry VIII, se la considera como la primera o segunda reina reinante y en los subsiguientes años de su reinado fue como si Jane nunca hubiera sido reina.
  • Elizabeth I de Inglaterra (1558 – 1603)
  • Mary II de Inglaterra y II de Escocia (1689 – 1694) – co-reinó con su esposo William III; les fue otorgado el trono por el Parlamento luego que éste depusiera a James II durante la Revolución Gloriosa de 1688.
  • Anne, Reina de Inglaterra, Escocia e Irlanda y luego Reina de Gran Bretaña e Irlanda (1702 – 1714)
  • Victoria del Reino Unido (1837 – 1901)
  • Elizabeth II del Reino Unido (1952 - presente)


Victoria (1819-1901)