martes, 25 de febrero de 2014

SABRE D'OFFICIER SUPERIEUR DE CAVALERIE LEGERE MODEL AN-IX dit "A LA CHASSEUR"

Sable para Oficial Superior de Caballería Ligera modelo AN-IX

Francesc Pintado i Simó Monné


Membre de Massèna Society

et

du Souvenir Napoléonien (Société française d'histoire napoléonienne)

General de División François Fournier-Sarlovèze "el húsar".
Observad el sable "a la chssseur"  

La montura del Año Noveno (1800) aparece con el fin de unificar a la Caballería Ligera (Húsares, Cazadores y posteriormente Lanceros y digo posteriormente porqué éstos no fueron creados hasta 1807, no recibiendo la lanza hasta 1809 después de la batalla de Wagram).
Prácticamente todos los Regimientos de Cazadores a Caballo cambiaron sus sables por el nuevo modelo a excepción del 2º Regimiento que siguió utilizando su peculiar sable modelo de 1673, valga la excepción de Oficiales y Oficiales Superiores que podían comprarse sus "herramientas de trabajo" a su gusto y según su bolsillo. Las formaciones de Húsares rechazan de entrada al nuevo modelo y el Primer Cónsul les otorga el privilegio de seguir usando sus viejos sables "a la husarda" aunque los van cambiando progresivamente según van pasando los años, no todos, algunos de ellos los llevaran hasta Waterloo. En el caso de los Lanceros, los no pertenecientes a la Guardia Imperial reciben el sable "a la chasseur" ya que los pertenecientes a la Guardia Imperial llevan el mismo sable que los Cazadores de la Guardia Imperial, diseñado por Boutet y fabricado en Versailles.

   Sable "a la Chasseur" para Oficial Superior origen de este artículo

El sable junto a su vaina

El sable origen de este artículo es un sable modelo AN-IX (1800), llamado "a la Chasseur" para Oficial Superior de Caballería Ligera confeccionado en Klingenthal por los famosos hermanos Colaux, prestigiosos espaderos asentados en esa localidad.

Descripción del sable

Montura "a la cazadora" compuesta por guarda y dos gavilanes oblicuos, largo galluelo, monterilla corrida y puño de madera cordada y forrada de espeso cuero guarnecido con torzal simple de latón, presentando a ambas caras de su cruceta sendos seguros para su buena sujeción a la vaina.
Todo el conjunto presenta un magnifico acabado de lujo estando sus partes metálicas doradas al mercurio (conservado parcialmente).
Hoja curva y bi-vaceada, de filo corrido hasta la punta, lomo cuadrado y contrafilo en mesa. Presenta en su primer tercio grabados militares y florales así como símbolos propios de la Caballería Ligera, tales como una media luna, un sol radiante y la cabeza de un Turco además de un Águila Imperial alusiva ésta al gran fervor de su propietario por su Emperador.
Vaina confeccionada en lámina de acero pulido con brocal de latón dorado, dos abrazaderas también en latón dorado sumamente enriquecidas con lujosos cincelados alusivos a la época, provistas de sendos pitones con anilla y batiente, éste en acero pulido a juego con la vaina.  
   

Detalle del lujoso acabado de la hoja y de las abrazaderas de la vaina
Observad el Águila Imperial ubicada entre grabados en oro y cobalto representados en el primer tercio de la hoja. 


Detalle de la hoja en su cara izquierda, observad la cabeza de turco ubicada debajo de un sol símbolos estos utilizados para ornamentar las hojas de los sables propios de la Caballería Ligera. 


La bigotera de la hoja presenta en su cara derecha la firma de los hermanos Colaux.


La bigotera de la hoja presenta en su cara izquierda "Manufacture Imple. du Klingenthal"
por "Fabrica Imperial de Klingenthal"


Su lomo presenta grabado en su bigotera en oro y cobalto el símbolo de la Caballería Ligera propio este de las formaciones de Húsares, Cazadores a Caballo y Lanceros.


Detalle de la monterilla en su parte trasera, observad su acabado


Detalle de la mesa de la hoja y del batiente de la vaina.


Detalle de la montura "a la Chasseur en su cara izquierda.
Observad la riqueza de su acabado plasmado en el lujoso cincelado que presenta en la totalidad de su conjunto.


Detalle de la montura en su cara derecha "no vista".
Observad la carencia de ostentación alguna, practica habitual en las partes "no vistas".
Cada ornamento tenía un precio y muchos Oficiales optaban por no ornamentar las partes "no vistas" con el fin de abaratar el producto.