Esas flores míticas que nos acompañan desde la infancia activando nuestra imaginación
y decorando nuestros rincones escondidos por todo el Casco Antiguo.
Pasan desapercibidos por su familiaridad pero al fijarnos en ellos,
descubrimos un mundo lleno de colores y contrastes.
Podemos ver como...
a través de los años nuestro emblema monumental ha sido guarda y custodio
de sus perritos y de sus propios secretos... Los secretos del san Antonio.
Nacen y crecen en todas partes y posiciones -incluida nuestra querida sierra.
Hasta tal punto que costaría trabajo saber si esta toma es horizontal o vertical.
Nuestro querido pueblo tiene una serie de "casas colgantes"...
En ellas tampoco pueden faltar... Los perritos de las casas de Ubrique.
Llevamos un buen rato hablando de "perritos" y aún no hemos aclarado...
que son flores.
¡Que para ellos no hace falta ningún cartelito...!
Otra vez los perritos están jugando con los acantos...
al esconder, en un ficticio parque que hay...
entre la Higuera y el Convento.
Ya están otra vez los perritos lanzando sus efluvios olorosos cuando
"la primavera la sangre altera" -al menos la de los abejorros.
Ya están otra vez los perritos decorando el jarrón de interior, mezclándose con otras flores .
O mezclándose con otras flores silvestres libres -sin corte- en el exterior.
O engalanando balcones.
Dando un toque de glamour sobresaliente cuando "esta casa es una ruina".
Tratando de disimular aquello de lo que pensamos... "Pó é feo".
Ya están los perritos con su misión invasora de color rosado por solares con solera.
Decorando los ancestros muros con ese toque tan familiar
y rústico que marcó toda una época anterior más natural.
Añorando esa poca lluvia caída en Ubrique este año y preocupados por la sequía.
Y por la noche... A dormir y soñar con el camino de Ronda -aunque sea.
Lo cierto es que otra vez los perritos están que se suben...
de nuevo a lo alto de lo que, en la película de "las aventuras de Juan Lucas"...
fuera la cárcel... El peñón de la Becerra.
-¿Se llamaría Becerra la mujer que viviera ahí...?
Otra vez los perritos...
aderezan los lugares típicos, como la plaza de "aparcamientos" de la Trinidad...
o hacen volar la imaginación de un salto,
desde el campanario de la O hasta el Calvario de Ubrique.
-¿Y qué decir de los "autóctonos" perritos de agua de Ubrique?
-¡Qué es una raza de perros de cuatro patas! Y... ¡Qué no tienen nada que ver aquí!
Son nuestros perritos los que crecen en el Arroyo Seco, cuando trae agua...
junto a los perritos de la "obra nacional del treinta y siete"
que aún perdura encima de los Nueve Caños
O aquellos que quieren ocupar el puesto de los pinos del depósito
-en una pura ilusión óptica- y que se conforman con...
adecentar el deterioro extremo al que está llegando el rincón más "bonito" de Ubrique...
¡El Rodezno...!
-Ahora vendría bien el emoticono de la lágrima.
Pero otra vez los perritos, están dando su toque maestro
de color especial, a tanta debacle, tanto por delante...
¡Cómo por detrás...!
Y todos los perritos de nuestro querido pueblo, juntos...
desde los perritos de al lado del cine Capitol -"el cine en Ubrique"- hasta...
los perritos de Aguailla -la esquina más "bonita" de Ubrique-
todos, todos,
son hijos de los perritos de aquel año.
De ahí la idea de este título tan cacareado de...
¡Otra vez los perritos!
Estos últimos son los que comparten esquina con uno de
los rótulos de la serie mítica de carteles para pensar.
-¡Y con ellos damos por concluido el monotema floral de hoy...!
Ya decidiremos si, en un futuro, Ubrique en verde hace o no, otro relato fotográfico
con el tema central de los antirrinos... ¿Antirrinos...? ¡Si! Y también llamados
boca de dragón, dragonaria, conejitos, boca de león, dragoncitos,
gallitos, boca de conilla, tarasca de jardín...
Pero para nosotros...
¡Perritos... mejor!