Ultimamente me he dado cuenta que el espacio-tiempo me juega malas pasadas, aunque pensándolo bien, supongo que es algo que me lleva acompañando toda la vida ...soy la típica persona que nunca estoy en los sitios cuando se debe de estar, en el momento justo y en el lugar adecuado.
La verdad es que no lo había pensado antes, o por lo menos no en voz alta y mucho menos a corazón abierto, pero creo que siempre he estado acompañada de esa extraña sensación de formar parte de otra época, como si hubiera nacido en un tiempo que no me pertenece. Igual es que el desfase viene de lejos, y el destino trata de reajustar fisuras e incluso grietas, y mi vida forma parte de una novela de ciencia ficción...
Todo lo anteriormente escrito tampoco sé si forma parte de una reflexión superficial fruto del egocentrismo que puede crear la adicción al blog o de una paranoia propia de un parado con mucho tiempo libre y pocos problemas que resolver, y ganas de tener muchos problemas que resolver.
El caso es que, a riesgo de parecer una frívola, confieso que me gustaría tener una máquina del tiempo y poder viajar hasta la próxima colección de Hoss Intropia para el otoño-invierno y traerme conmigo al aquí y ahora, esta maravilla de vestido.
Y es que este verano ni es verano, ni yo estoy en mi mejor momento....de nuevo el espacio-tiempo, jugándome una mala pasada.
Biquiños
Clara
P.D: Post cargado de sobredosis de dramatismo y licencias literarias para enfatizar lo mucho muchísimo que me gusta esta marca. Basado en hechos reales. ;)