Chris Pine, Zachary Quinto, Benedict
Cumbertach, Karl Urban, Anton Yelchin, Zoe Saldana, Jhon Cho, Leonard Nimoy,
Simon Pegg
No fui seguidor de la serie, pero aún así es innegable
el poder atrayente de su universo e imposible no ver algunas de sus películas.
Star
trek es una de las sagas cinematográficas más recordadas, el Enterprise debe ser
la nave espacial con mayor recordación de nombre al igual que el halcón
milenario de Star wars, pero hablemos de Star Trek en la oscuridad; vendría a hacer
la décimo segunda de la franquicia, y la secuela de la estrenada el 2009, ambas
dirigidas por J.J. Abrams.
De
la anterior se guardaba un buen recuerdo, vino a hacer una realidad paralela de
la que ya hemos visto en anteriores películas, fue bien recibida por los fans y
críticos. Ésta no podía ser menos.
Así
podemos ver otra vez a los personajes originales de la serie, James T Kirk, Spock
y compañía. La película tiene una excelente escena al comienzo que nos prepara
para lo que vendrá.
Jhon
Harrison es el malo de turno, y parte del mismo comando espacial, descubrir cuáles
son sus motivaciones es la intriga a resolver y a eso se aboca las casi dos
horas de la película.
No
es necesario, haber visto la serie o alguna de las películas anteriores para
poder disfrutar de En la oscuridad, pero recuerdo especialmente la segunda
película de la franquicia, a decir de muchos una de las mejores. Star Trek: La ira de Khan (Nicholas Meyer,82). En este film se tomó un personaje que había aparecido
en la serie, un villano destacado al que el equipo había enfrentado antes para
una especie de revancha. Khan fue interpretado por Ricardo Montalbán (el mismo
de la serie La Isla de la fantasía) y donde también aparecía la Doctora Marcus
que como saben los fans es la madre del hijo de Kirk. Este guiñó a la segunda
película de la franquicia no es el único en star Trek en la oscuridad pero no
se puede hablar demasiado sin hacer spoiler.
J.J.
Abrams como se sabe ya, hizo carrera en la tv dirigiendo la serie Alias, pasó a
dirigir Misión Imposible 3 (2006), Star trek (2008) y Super 8 (2011), es un
director eficiente y sus películas suelen ser bastantes , siendo la mejor la
anterior Star Trek.
Algo
que deben recordar es que en la anterior el villano Nero al romper el
espacio/tiempo y tener a Spock del futuro con uno del pasado, abre un nuevo
espacio de “realidad alternativa” en el que se pueden desarrollar historias sin
ofender a los fans o chocar con el tiempo en que se realizaron todas las películas anteriores
de Star trek.
Star
Trek ofrece no solo logra empatía que uno siente por la tripulación del Enterprise,
sino que tiene todo es divertida, espectacular, dosis de drama, y un romance,
casi flirteo imperceptible entre algunos de los protagonistas. Sin dejar de
lado la fuerte relación de camaradería entre Spock y Kirk, aunque sabiendo
claro que Spock es un vulcano y lo suyo no son las emociones.
Con
respecto a la primera, En la oscuridad no llega a ser mejor, pero está bien, es
respetuosa con la saga, cumple milimétricamente (que no sorprenda que las
producciones de Hollywood vengan hechas para gustar casi por cálculo a los
espectadores) con su propósito de ser el nuevo blockbuster de la temporada.