Despertaron mis ojos a la mañana,
al resplandor del sol en nuevo día;
ver las mariposas en su osadía,
de requiebros de una cortesana,
sus alas, en mi jardín engalana,
a las petunias, su coquetería,
explotando el color en armonía;
y el olor inunda hasta mi sabana
El cielo, me anuncia la primavera,
el sol, me está inyectando energía,
la noche se me hace placentera.
En contacto, y en plena sintonía,
el cielo como una cristalera;
bebiendo primaveras me veía.
Mantengamos mientras sea posible esa coquetería primaveral.
ResponderEliminar¡Bonito y florido soneto!...
ResponderEliminarUn gusto haber pasado por el blog, y gracias por haber visitado el mío.
Un abrazo.
Juan.
Paco, gracias por pasarte, estos días estoy bastante liada...disculpa mi atardanza, un abrazo.
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