Libando en el aire los sinsabores,
descubro al vuelo en ella la agonía;
ya sin tesón, ni fuerza ni osadía,
el saltamontes no huele “colores”.
No sabes clasificar los amores,
cada cual tiene su categoría;
en cada estante ordenado estaría,
por llegar más tade... a los albores.
Del corazón, no sean competidores.
sin querer doblegar tú gran orgullo;
donde huele el olor de los cobardes.
No parles más, enredes más barullo
ni te enfundes en tú piel el disfraz de alarde
libera dudas: Con eso concluyo.
Mariola López