Dicen los enteraos que lo que nos distingue de los animales es la capacidad para sonreír y reír.
No estoy yo muy seguro de desear ser distinguido de los animales; en el proceso perdemos inocencia, realidad de lo que es la vida y un algo noble, inclasificable y ya olvidado y enterrado en genes egoístas y ansiosos por sobrevivir a toda costa.
No obstante, si de risa y reírse se trata, creo que hemos dado, aquí en este blog que se desvela por buscar aquel artista que brilla por su talento y la efusividad conque crea y se recrea en su música, con el músico idóneo. Andy Frasco, un autor de ¡¡veintitrés años!! del valle de San Fernando, en California que se mueve como un poseso sobre su piano y su necesidad de recrear la música loca, fresca y divertida que hizo bailar a tus padre y a tus abuelos.
Influenciado por gente como Damien Rice, Sam Cooke, Professor Longhair, Van Morrison,Tom Waits o, creo yo que el pensamiento de Little Richard, Jerry Lee Lewis o gente como Pete And The Test Tube Babys, The Damned (al menos su Captain Sensible), o Slade, la música de Andy Frasco y sus U.N. es un despliegue maravilloso de sonidos que sobrevuelan épocas pasadas y llenas de rísas y hazañas que se solventaban frente a una leche malteada o, como mucho, una cerveza y un whisky en un garito de negros..¡¡uuuhh que peligrooo!!
Hay un amor y un cariño sincero y entregado por gente que creía que lo que hacia era un puro divertimento. Las trascendentalidades eran relegadas a unos años grises y deteriorados que distaban mucho del globo de chicle, del amor en el asiento trasero del cadillac, de la luna iluminando tus pasos camino de casa con el sabor de sus labios, con suerte de ambos, en tu boca y una sonrisa, como un Rock N Roll en tu cara.
" Just A Good Ole Time" es toda una declaración de principios del sonido Andy Frasco, ese Party Blues, como se le ha venido llamando a sus canciones. Canciones, que, en el número de trece aúllan y se descojonan en este último álbum suyo y que han hecho que una parte de este binomio bicorporal y unicerebral estallen de emoción y dicha. " Still Sleeping At My Mama's House", "Everybody Needs Somebody", "Ain't Gonna Quit Cha Babe" o " Heavyweight" te levantan del sillón. La voz de Frasco es terrosa, intensa exaltada, cargada de fuerza y rabia por sacar afuera el amor por esa deliciosa música añeja y, a un tiempo, por desecar los malos rollos, la melancolía y una tristeza que, a veces, se antoja infinita, en un parafraseo o plagio del disco de los Smashing Pumkins.
La parte más cuerda de TwoHeads, como la llama acertadamente creo yo, Carolynn Underground, está enganchada, de manera absoluta a este gran disco...Para una cosa que no recomiendo yo, y viene de ese tipo maravilloso..¿La vas a dejar pasar?
No, creo que no..yo, al menos, no lo he hecho.
